Aquí, algunos fragmentos de las entrevistas:

GABRIELA SABATINI, ENTREVISTADA POR JAVIER FRANA
Javier Frana
Gaby, contanos cómo fue tu primera posibilidad para participar de los Juegos Olímpicos... ¿fue algo que lo pensaste, lo dudaste cuando surgió la posibilidad?

Gabriela Sabatini
No, la verdad es que no, se dio. Bueno, yo venía jugando en el torneo, tenía en ese momento 18 años y estaba en pleno momento de mi carrera tenística y ese año justo en el 88 se daban los Juegos de Seúl, así que nada, la verdad es que estaba con muchas ganas porque iba a ser mi primer Juego. Ahí yo me empecé a dar cuenta de lo que significaba porque era algo, era para tu país, jugar para la Argentina y sentí que era lo mas importante, era lo máximo que podías hacer representar a tu país y eso era lo que más me motivaba en realidad.

Javier Frana
Te acordas del momento de la premiación, ¿qué sentiste?

Gabriela Sabatini
Si, si me acuerdo de ese momento, si, sentía frustración por no haberme llevado la medalla de oro, pero, después un ratito más tarde, ahí valoré el haberme llevado la de plata y bueno, estaba un poco más contenta...

Javier Frana
Después tuviste la oportunidad de jugar en Atlanta 1996, ¿lo disfrutaste más, lo viviste de manera diferente?

Gabriela Sabatini
Sí, Atlanta fue un poquito diferente porque yo no me quedé en la villa olímpica, decidí quedarme en otra zona, en una casa, y bueno por ahí se vio un poquito diferente, porque ya no estás conviviendo con los demás atletas, solamente cuando vas a jugar a competencia, ahí es donde convivís un poquito más pero si no estas viviendo cada día como que no lo vivís de la misma manera....

OSCAR, ENTREVISTADO POR LEIRA ALVAREZ PADIN
Leira
Usted disputó cinco Olimpíadas. De esas cinco, ¿hubo alguna que usted llegó a pensar, digamos, ahora en esta vamos a ganar una medalla?

Oscar
Opa! La de Seúl y la Olimpíada de Moscú. En Moscú, en el 80, nosotros teníamos un equipo que era una mezcla de la generación anterior con la mía, nosotros jugamos un partido contra Yugoslavia que, si ganábamos, íbamos a disputar la medalla, íbamos a disputar el tercero y el cuarto lugar, pero perdimos por un punto. Nosotros estábamos ganando por un punto, pero hicieron una falta, Marcel le hizo una falta a Delibasich. Delibasich fue y metió dos tiros libres faltando tres segundos para acabar el partido. Y no hubo falta, la marcaron porque ellos eran Yugoslavia. Después, nosotros tuvimos la pelota. Ze Galinha hizo un lanzamiento, la pelota casi entra. Si hubiéramos ganado ese partido, tal vez hubiéramos ganado la medalla de bronce. En Seúl, perdimos un partido contra España, inesperado, en vez de disputar los cuartos de final contra Australia, fuimos a disputar contra Rusia, Unión Soviética, de Sabonis, que salió campeona aquella época. Jugamos un partidazo contra la Unión Soviética, perdimos por dos puntos en la última pelota. Si hubiéramos ganado aquel partido, probablemente podríamos hasta haber llegado a la final del campeonato. Que era mi generación, aquella generación que ya había sido campeona panamericana un año antes en Indianápolis, que tenía un respeto mundial enorme y perdimos con Rusia en los cuartos de final. Así que fueron dos Olimpíadas que nos quedamos con… con… un poco de frustración, porque podríamos habernos llevado una medalla.

Leira
Muchos esperaban que usted se retirase después de Barcelona en 1992, pero decidiste jugar un poco más, hasta Altanta 1996. ¿Su vida profesional siempre fue así, fue difícil para usted dejar?

Oscar
Bueno, yo… Es difícil parar mientras uno todavía hace 40 puntos por partido, es difícil. Si yo estuviera haciendo 12, entonces iba a decir: No juego más. Todo lo que hago tiene que ser en el límite. Mientras yo seguía jugando bien, ¡PO! Yo tengo 45 años, el chico que me marcaba tenía 20, ahí sale el de veinte porque se cansó y entra uno de dieciocho para marcarme, y pegándome duro… Soy un señor mayor, acá… estoy haciendo 40 puntos contra unos chicos de 20. AH! Voy a seguir jugando, ¡Po! Esa fue la razón por la cual yo jugué durante tanto tiempo. Si yo notara que mi rendimiento se decaía, mismo sin correr, mismo sin saltar, mismo sin poder marcar bien, si no tuviera más agilidad, ¿voy a seguir jugando? Voy a jugar… y solo paré porque quise. Porque si continuara jugando, seguiría haciendo mis 30, 40 puntos. Porque yo entreno para eso, descanso, llevo las cosas como tienen que ser.

JAVIER SOTOMAYOR, ENTREVISTADO POR FERNANDO PALOMO
Fernando Palomo
En 1992 vos entraste a los Juegos Olímpicos de Barcelona como tremendo favorito, ¿nunca quizás habías entrado a un evento con la calidad de favorito con la que entrabas a esos Juegos?

Javier Sotomayor
Ya estaba entrando como favorito en otras competencias, y en el '92 si, toda la temporada fue buena, gané casi todas las competencias de la temporada pero igual menos las olimpíadas como que me sentí... como nunca me gustó sentirme, siempre me gustó sentir como que la presión de lo contrario, tratar de buscar grandes marcas. Y llegaba en el año '92 a todas las competencias y ganaba o saltaba contra la vía... Con facilidad 2,35 ó 2,36, y después como que no me entraba la euforia esa de seguir saltando. Y creo que fue un año en cuanto a resultados bueno, porque gané las olimpiadas pero no tuve grandes marcas.

Fernando Palomo
¿Llegaste a Atlanta sintiendo que se te había escapado la oportunidad de subirte al podium olímpico de nuevo?

Javier Sotomayor
Fui creo que ni pensando ya en la medalla de oro, fui diciendo voy a crecerme, es lo único que me queda sacar algo de mi experiencia y bueno logré ir a la final pero las condiciones físicas mías eran casi nulas. Siempre yo me dije que no había pasado lo que le podía pasarle a cualquier deportista, de que tuvo una lesión que fue lo que me impidió el poder estar en el podium olímpico, y ya al otro año fue todo lo contrario: al otro año gané el Mundial en Atenas.

Fernando Palomo
¿Y veías los Juegos olímpicos de Sydney 2000 como tu venganza?

Javier Sotomayor
No como venganza, no tomé eso como una venganza, siempre me preparé desde el año 1996 para participar en Sydney. Subirme al podium era un premio, pero igual tenía en mi mente en la medalla de oro. Igual me traicionó un poco el agua.

Fernando Palomo
¿Cómo afrontaste el salir del estadio, sabiendo que era la ultima vez que los aros olímpicos estaban cerca tuyo, en tu vida atlética activa?

Javier Sotomayor
No, bien, yo me preparé creo que, cuando terminó Winnipeg, me fui pensando "estos próximos van a ser mis últimos Juegos". Bueno, ya tenia un récord panamericano muy alto: 2,40. Cuando Maracaibo igual, dije quiero saltar 2,37 hacer record para la competencia, dejar el listón lo más alto posible, van a ser mis últimos Panamericanos. Y cuando Sydney igual, creo que como que me fui preparando mentalmente para cada ocasión....

RAÚL GONZÁLEZ, ENTREVISTADO POR HERIBERTO MURRIETA
Heriberto Murrieta
¿En los 20 kilómetros de Los Angeles 1984 qué fue lo que pasó, cuál fue tu estrategia, ya que dos mejicanos estaban luchando por la medalla de oro?

Raúl González
Yo llegué convencido de que podía ganar las dos y me preparé para hacerlo, por eso hice mucho trabajo, tenía cinco años compitiendo en las dos categorías y mi destino era ese, ganar las dos. Tuve un error de estrategia, aunque no desmerito el esfuerzo y el resultado de mi contrincante Ernesto que obtuvo sus logros por su capacidad. Pero yo fallé en mi estrategia, porque todo lo dejé para mi vuelta para dentro del estadio, yo sentí que los 19 kilómetros de los 20 tenía que hacer un trabajo entre los 2, no de Ernesto contra mi, sino de los dos contra el resto, digo que mi estrategia me falló, porque cuando nosotros íbamos a entrar ya al túnel que nos lleva a la pista dentro del estadio, ahí el fue mas rápido y al salir él estaba más o menos a unos 25 metros de ventaja mía, así que todo el esfuerzo que tenía planeado hacer dentro del estadio lo hice, pero lo único que pude alcanzarlo fue cinco metros atrás de el, que fue como concluimos la carrera. Con una medalla de plata no me conformé, porque no era realmente lo que yo quería, ni lo que tenia en mente y me toco aceptar que ese era el resultado. Finalmente lo felicité porque era su logro, dimos una vuelta en el estadio, fue un momento muy importante para el deporte mejicano.

Heriberto Murrieta
En el momento que cruzas la meta de los 50km. te desvaneces, aflojas el cuerpo, ¿qué haces en ese momento cuando justo cruzas la línea de llegada?

Raúl González
Es normal que cuando terminas una competencia de 50 kilómetros, en la que realizas aproximadamente 50.000 pasos, normalmente el atleta tiene una longitud de paso de un metro a 1.05 metro, así que cuando tú paras rompes una secuencia, una mecánica y te desvaneces y pierdes el equilibrio, pero luego te recuperas, sucede hasta en una prueba de 100 metros, sucede con los corredores de 400 de 1000 metros, es una cosa natural después de un gran esfuerzo, sin dejar de reconocer que era un momento extremadamente emotivo para mí, no podía mas que darle gracias a Dios, lo soñé, lo anhelé, lo lloré, lo sufrí, me obsesioné y estaba ahí después de 15 años...