MELBOURNE -- Anna Kournikova fue la primera sorprendida cuando se le interrogó por el tatuaje en la parte inferior de su espalda.

"¿De veras alcanzan a verlo?", preguntó la rusa.

Kournikova ganó su primer partido de sencillos en torneo Grand Slam desde el 2001 al vapulear este lunes a la eslovaca Henrieta Nagyova 6-1, 6-2 en el Abierto Australiano.

Pero el tema predilecto en la rueda de prensa posterior no fue su despliegue de tenis, sino el tatuaje.

"Es sólo un parche para el calor", explicó la rusa. "Además me ayuda para los dolores en la espalda. Lo que pasa es que la falda que uso es más corta que antes y todo el mundo se da cuenta de los parches".