Ronda Rousey no ha anunciado una decisión acerca de su futuro como peleadora profesional, pero el presidente de la UFC, Dana White, no espera su regreso.
Durante una aparición en el podcast de la UFC 'Unfiltered', White dijo que ha hablado con Rousey recientemente y no le dio la sensación de querer volver a pelear de nuevo.
"Su ánimo está bien y está concentrada en sí misma. En la conversación que tuve con ella, si he de decirlo correctamente, justo ahora - y no me gusta decir aquí y ahora porque depende de ella, es su asunto- pero no podría decir que va a volver a pelear. Creo que probablemente se ha terminado.
"Creo que va a lidiar con ello y a comenzar a vivir su vida fuera de las peleas".
Roysey (12-2) se convirtió en la primera campeona de la UFC en 2012 y comenzó un reinado de seis defensas consecutivas del título. Perdió el título de 135 libras en noviembre de 2015, cuando fue noqueada por Holly Holm con una patada a la cabeza.
Luego de perderse casi todo el 2016, Rousey regresó para retar a la campeona vigente Amanda Nunes en la función de UFC 207, el 30 de diciembre en Las Vegas.
De cara al compromiso, Rousey se negó a hablar con cualquier medio de comunicación y rechazó prácticamente todas las obligaciones para promoverlo. Nunes, finalmente, dominó a Rousey en el primer round y la noqueó en solamente 48 segundos.
"Ni siquiera es que yo crea que ella era invencible", dijo White acerca del deslucido regreso de Rousey en diciembre. "Es tan competitiva que su récord profesional significa todo para ella y una vez que perdió, comenzó a decirse a ella misma: '¿Que demonios es lo que estoy haciendo? ¿Esto es mi vida? ¿Es todo? Quiero experimentar haciendo otras cosas'. Eso es lo que comenzó a hacer.
"Tiene mucho dinero. Nunca va a necesitar dinero de nuevo. A menos que gastes como loco, nunca vas a necesitar dinero de nuevo cuando tienes lo que Ronda tiene, y ella no es muy gastadora. Tiene una linda casa en Venice, Californoa. Tiene muchos planes, creo que quiere mudarse a un lugar desolado y hacer sus cosas".
Rousey, de 29 años de edad, es medallista olímpica de bronce en judo. Su pelea de campeonato ante Holm en la función UFC 192 en Melbourne, Australia, reportó una asistencia de 56,214 personas, la más concurrida en la historia de la UFC.
"Ella cambió el mundo", dijo White. "Ella puso la pelea de mujeres en el mapa. Ha sido parte de las más grandes peleas de la historia de las mujeres y espero que esos récords se puedan romper. No sé si puedan, pero espero que sí".