INDEPENDENCE, Ohio - Sería difícil imaginar cuando los Miami Heat lograron campeonatos seguidos hace algunas unas temporadas que LeBron James y Dwyane Wade dejarían la franquicia en el corto plazo.
Sin embargo, James regresó a su ciudad natal con los Cleveland Cavaliers en 2014 y Wade regresó a su ciudad natal con los Chicago Bulls el verano pasado, cambiado el equilibrio de poder en la Conferencia del Este.
Con los Bulls y los Cavs programados para enfrentarse en un partido de pretemporada el viernes, James confirmó que esperó que Wade hubiera terminado con él en Cleveland.
“No no lo podíamos permitir”, dijo James. “Es así de simple”.
Wade firmó por dos años con Chicago en la temporada baja a cambio de $47 millones. Los Cavs, muy por encima de la capacidad salarial con James, Kyrie Irving, Kevin Love y Tristan Thompson, todos firmados por el máximo contrato, podría haber ofrecido a Wade solo la excepción de nivel medio, por un valor de $3.5 millones.
Cleveland terminó usando la excepción para retener a Richard Jefferson.
“¿Quién no estaría interesado en un Salón de la Fama?”, dijo el entrenador de los Cavs, Tyronn Lue, refiriéndose a la probable inclusión de Wade a Salón. “Eso ni siquiera tiene sentido. Sí, lo queríamos”.
James, quien ha mantenido la amistad con Wade desde que salió de Miami, respaldó, como era de esperar, la decisión de Wade de unirse a los Bulls después de jugar 13 años de su carrera con el Heat.
“Apoyo a mis chicos, ustedes saben eso”, dijo James. “Esa fue una decisión que quería hacer y yo lo apoyo”.
Al igual que James con la comunidad de Akron, Ohio, comprende un elemento tan importante en su vida desde que regresó a los Cavs, Wade ha dicho que estar en Chicago puede ayudarle a lograr un cambio positivo a su ciudad.
“Mi propósito al estar de vuelta en la ciudad es más grande que el básquetbol”, aseguró Wade el mes pasado. “El básquetbol es gran parte de eso, por supuesto. Es lo que hago para vivir. Pero creo que mi propósito al final del día es esperar para venir a Chicago y ser la voz que puede ayudar a la personas a juntarse”.
James, quien compartió el escenario de los ESPYS con Wade el verano para animar a otros atletas a aumentar su conciencia social, dijo que ha hablado con Wade sobre la continuación de esa causa.
“Hemos tenido muchas conversaciones”, dijo James. “Realmente no me gusta hablar de lo que hablamos, pero él ha hecho algunas cosas en la comunidad desde que regresó a Chicago, y obviamente tiene muchos lazos ahí, siendo de ahí. Así que creo que ha sido bueno no solo para él, sino para la ciudad, es lo más importante”.
Mientras la era del Big Three en Miami será recordada por dos títulos, cuatro viajes a las finales, y una racha ganadora de 27 partidos, y crear el frenesí de agentes libres para los Súper Estrellas que existe hoy en día, James dijo que está sorprendido que haya durado más tiempo.
“En el deporte profesional las cosas pueden cambiar de un año para otro de esa manera, por lo que siempre he tenido esa perspectiva desde que llegué a la NBA”, aseguró James. “Siempre he sabido que es un negocio y puedes estar en un equipo este año -tener compañeros este año- y el siguiente año puede que no los tengas. Eso es parte del negocio. Siempre voy a tener ese punto de vista”.