DALLAS -- Los Boston Celtics saben que viven su mejor momento en buen tiempo, pero que requieren mayor consistencia si pretenden competir hasta el final en la Conferencia Este.
También aseguran que a pesar de estar en segundo lugar de su sector, sólo atrás de los campeones Cleveland Cavaliers, necesitan ser más consistentes los cuatro periodos del partido.
Y están convencidos de que tienen el talento suficiente para enfocarse y tratar de hacer una mejor segunda parte de la campaña, que la primera.
“Estamos jugando al básquetbol de la manera correcta en especial al final de los partidos“, dijo Jae Crowder. “Si pudiéramos mantener esa consistencia seríamos casi imparables. Pero esa es la diferencia entre los buenos y malos equipos".
Boston regresa este miércoles a casa para disputar su penúltimo juego antes del rompimiento por el Juego de Estrellas, contra los Philadelphia 76ers, después de terminar una gira de cuatro partidos con marca de 3-1, incluyendo la victoria del lunes 11-98 sobre los Mavericks.
Sin embargo, deben estar conscientes de que sólo uno de los cuatro rivales tiene marca ganadora y que toda la gira se definió hasta los minutos finales.
Perdieron el primero de la gira ante los Sacramento Kings sin DeMarcus Cousins; en Portland y Utah tuvieron que remontar para ganar, y en Dallas nunca tuvieron una ventaja definitiva o el camino abierto hasta los últimos cinco minutos de juego.
“El entrenador siempre habla de que debemos concentrarnos y nunca dar por descartado a nadie“, dijo Isaiah Thomas. “Dice que hay que jugar los 48 minutos completos. Y después, pase lo que pase ya pensar en el siguiente partido”.
Esa ha sido la filosofía de los Celtics, de acuerdo al entrenador Brad Stevens; tratar de checar los errores, intentar se más consistentes y seguir al partido inmediato, sin pensar tampoco en el futuro a largo plazo.
“En este momento, con dos partidos pendientes, parecería como que el rompimiento por el Juego de Estrellas está a 200 millas de distancia", comentó Stevens.
“Nunca sabes qué pasará después“, agregó. “Sólo puedes controlar tu desempeño en el juego próximo".
Los jugadores creen en Stevens. La prueba más inmediata fue el vestidor visitante en Dallas el lunes por la noche, cuando los Celtics ya empacaban y se concentraban en los 76ers, antes si quiera de pensar que cierran la primera parte de la temporada en Chicago contra los Bulls.
“Sólo estamos viendo adelante en el equipo que está frente a nosotros“, reiteró Thomas. “No creo que nadie esté muy preocupado ahorita en la posición en que estamos. Aún hay mucha temporada, pero confiamos en que competiremos hasta el final”.
Por lo pronto, saben que deben enfocarse antes de ir al Juego de Estrellas.
“Estos últimos dos juegos son bien importantes“, dijo Thomas. “Debemos finalizar los últimos dos partidos antes del rompimiento con el pie derecho, con la esperanza de ganarlos".
Para Marcus Smart, es una obligación tratar de ganarlo todo de aquí hasta el fin de temporada.
“Este es el tiempo del año cuando los jugadores comienzan a poner excusas por baja de juego y dejar ir partidos“, dijo. “Esos juegos que dejas ir después regresan y te lastiman en la tabla de posiciones”.
Los Celtics (36-19) reciben el miércoles a los 76ers (21-34) colocados en el segundo lugar de la conferencia, a sólo dos partidos de distancia de los Cavaliers (37-16), que ha mandado en el Este de punta a punta las dos temporadas más recientes.
“Tienen legítima oportunidad de competir con este equipo por llegar a las Finales en el Este", consideró el entrenador de los Mavericks, Rick Carlisle. “Hay talento, son muy atléticos y están bien entrenados".