<
>

Mavericks, escándalo dentro y fuera de la duela

DALLAS -- Los Mavericks regresaron a las primeras planas nacionales e internacionales de la NBA esta semana. Pero por las peores razones que cualquiera imaginado.

En medio de la peor temporada desde que en el año 2000 Mark Cuban se convirtió en dueño del equipo, personal de alto nivel de los Mavericks fue acusado de sostener conductas inapropiadas y ser un lugar hostil de trabajo.

Los puntos anteriores atentan de manera radical a la imagen que Cuban y la organización han proyectado al exterior durante casi dos décadas.

Los Mavericks siempre han parecido un equipo ejemplar, ganador, que hilvanó 12 temporadas consecutivas en postemporada; lugar del que están más alejados que nunca, empatados la noche del miércoles con la menor cantidad de victorias (18-40) en toda la NBA.

Para colmo, Cuban se atrevió a decir en público que había comentado con sus jugadores que “perder era la mejor opción en este momento", en referencia a que la cantidad de derrotas será directamente proporcional a mejor posición en el próximo draft, con la desesperada intención de conseguir ese talento, que ha escaseado cada vez más en Dallas, desde que fueron campeones en el 2011.

Cuban fue multado con 600 mil dólares, para aumentar su cantidad récord de infracciones impuestas, por comentarios que la liga considera inapropiados o fuera de lugar.

Comentarios que quizá sean tan inapropiados o que atenten contra la inteligencia de la opinión pública, como los que hizo Cuban este miércoles, respecto a que desconocía por completo que el ex presidente y director general de su Mavericks Terdema Ussery había propiciado un clima aterrorizante para el sector femenil de la nómina.

Ussery fue acusado en un reporte de la revista Sports Illustrated de acoso sexual reiterativo y casi hasta enfermizo, a lo largo de sus 17 años en el equipo, de 1998 al 2015.

El mismo Ussery, que fue investigado por el club, dos años antes de que Cuban lo comprara. Es casi imposible creer que el genio Cuban, jamás se diera por enterado de esa misma investigación contar el ejecutivo más alto, cuando estaba a punto de desembolsar los 280 millones de dólares que pagó por los Mavericks.

También son increíbles los comentarios de Cuban de que prefirió que el principal reportero de la página de Internet del equipo, Earl K. Sneed, conservara su empleo, a pesar de dos denuncias claras y en récord de violencia doméstica, incluyendo una en el 2014 en la que fue arrestado dentro de las propias oficinas de los Mavericks, por agredir a su entonces ex novia y también empleada del club.

Según Cuban, no despidió a Sneed para evitar que consiguiera otro trabajo en el que pudiera molestar o dañar a otras chicas...

Hasta el momento, jamás se ha sabido que Cuban sea partícipe de alguna de las actividades o situaciones de las que Ussery y el reportero fueron acusados. Tampoco de complicidad. Pero en realidad sorprende que alguien que se le ve de manera frecuente cerca del equipo, desconociera por completo el problema.

Cuban afirmó que jamás estuvo enterado de que algo así pudiera suceder, ya que pasa muy poco tiempo en las oficinas.

Aseguró que jamás permitirá conducta en detrimento de la organización, ni fuera de los estándares de la política personal, ni mucho menos hostilidad o acoso sexual.

Reveló que el director de recursos humanos de los Mavericks, Buddy Pittman, y el reportero ya fueron despedidos y que investigarán con detalle todos los hechos para llegar al fondo de la verdad.

El miércoles, los Mavericks informaron en un comunicado que contrataron a dos investigadores independientes de muy alta reputación nacional para que verifique los incidentes de los que fue acusado el ex ejecutivo principal.

“Los Dallas Mavericks contrataron a Evan Krutoy y Anne Milgrim para liderar una investigación indepediente dentro de la organización", escribieron en el boletín de prensa. “(…) Ellos sostendrán entrevistas confidenciales con todos los miembros del staff de los Mavericks, así como con empleados previos, que quieran hablar para ayudar a entender mejor y aclarar el asunto".

Quizá la única nota positiva del escándalo, dentro y fuera de la duela, en el que están los Mavericks en este momento, sea la conducta de los jugadores dentro del vestidor.

Según una ex empleada de los Mavericks, el lugar más decente y seguro dentro de las instalaciones del equipo era el vestidor de los jugadores, donde todos se comportaron siempre con respeto y educación.

Esos mismos jugadores que habrá que revisar con lupa dentro de la duela el resto de la campaña, luego de que su propio jefe les hizo la observación de que “perder era la mejor opción"

“Creo que no puedes en realidad jugar a perder en esta liga, en la que he estado mucho tiempo", dijo este miércoles Dirk Nowitzki. “Todos somos competidores. Creo que cuando estás allá afuera, tienes que competir. Si no, pierdes el valor en el mercado. Puedes lastimarte. Pueden pasar muchas cosas, si no juegas fuerte tus minutos".

“Ese es mi consejo para los jóvenes, jueguen sus minutos duro, mejoren y cualquier cosa que suceda, sucederá", agregó. “Creo que los jugadores nunca juegan a perder en esta liga. Puede pasar, pero nosotros no jugamos para eso. Yo aún amo competir. Esa es la gran razón por la que aún estoy aquí, porque aún disfruto salir y jugar contra algunos de esos muchachos que tienen la mitad de mi edad (…). Nunca toleraré perder a propósito. No es quien soy".