Los Medias Rojas de Boston son realeza nuevamente luego de su victoria en la Serie Mundial sobre los Dodgers de Los Ángeles. Boston viene de una temporada de 108 victorias, posee la nómina más alta del juego y tiene un núcleo de jugadores talentosos en su mejor momento.
¿Suena esto como una fórmula clara para una dinastía para tí? En cierto modo lo es, pero una cosa que sabemos sobre esta era del béisbol de Grandes Lgas es que no existe una verdadera fórmula para una dinastía. Al menos no en el sentido de los viejos Yankees de Nueva York de Mantle y Stengel, o incluso los recientes Yankees de Torre-Jeter.
Además de la nómina, esos atributos, más de 100 triunfos, núcleos de talento en su pico, se aplicaron con la misma facilidad a los Cachorros de Chicago después de ganar la Serie Mundial en 2016. Y escribimos algunas de las mismas cosas solo el año pasado sobre los Astros de Houston, quienes, como los Medias Rojas, pasaron la última noche de la temporada de béisbol bailando en el césped del Dodger Stadium.
Tan optimista como las cosas se ven hoy en día para los Medias Rojas, en este momento no hay un solo equipo que defina esta era. Y tal vez no lo habrá. Ha habido muchos tramos en la historia del béisbol donde el trofeo de campeonato se pasó de un equipo a otro.
Lo que hace que este momento en particular en las Grandes Ligas sea tan único es que a pesar de la ausencia de un campeón repetido en los últimos años, en realidad no se debe a la paridad de la liga. En cambio, hemos entrado en una época en la que hay un puñado de potencias, cualquiera de las cuales podría llegar a la cima en una temporada determinada. Los Medias Rojas son claramente uno de los que pueden, y también lo son los Cachorros y los Astros antes mencionados. También lo son los Yankees y los Dodgers. Algunos podrían argumentar que los Indios de Cleveland también deberían participar en esta discusión.
Estos equipos están trabajando en rachas multianuales de apariciones de postemporada:
• Dodgers, seis apariciones consecutivas en la postemporada (seis títulos de la Liga Nacional Oeste, dos banderines de la Liga Nacional).
• Cachorros, cuatro consecutivos (dos títulos de la Central de la Liga Nacional, un campeonato)-
• Medias Rojas, tres consecutivos (tres títulos de la Liga Americana Este, un campeonato).
• Indios, tres seguidos (tres títulos de la Liga Central, un banderín).
• Astros, dos consecutivos (dos títulos de la Liga Americana Oeste, un campeonato)-
• Yankees, dos seguidos.
• Rockies, dos seguidos.
Y aquí están los mejores registros agregados en las últimas tres temporadas regulares:
Medias Rojas, 294-192 (.605)
Cachorros, 290-196 (.597)
Astros, 288-198 (.593)
Indios, 287-198 (.592)
Dodgers, 287-200 (.589)
Yankees, 275-211 (.566)
Nacionales, 274-212 (.564)
Cardenales, 257-229 (.529)
Finalmente, aquí están las probabilidades actuales de ganar la Serie Mundial de 2019, cortesía del SuperBook Westgate Las Vegas:
Medias Rojas 6-1
Astros 6-1
Dodgers 7-1
Yankees 7-1
Cachorros 10-1
Indios 10-1
Es una lista de aspecto bastante familiar, ¿no?
Ciertamente podríamos tener un rompefiesta en el Clásico de Otoño del próximo año. Los Cerveceros de Milwaukee llegaron en un solo juego para llegar allí esta vez y recuperarán a todos sus jugadores clave. Los Bravos de Atlanta ganaron la división Este de la Liga Nacional esta temporada y están abriendo su nueva ventana de contención. Los Nacionales tampoco deberían ser olvidados, a pesar de la agencia libre de Bryce Harper. Sin duda, los consideramos uno de los superequipos cuando comenzó la temporada 2018.
Pero concentrémonos en los equipos que lideran los mercados de apuestas, porque también son los equipos que lideran la tabla de posiciones de tres años y que están entre los que trabajan en racha de postemporada de varios años. Si alguno de esos equipos se abriera paso con un par de títulos, podría convertirse en un equipo que define esta era. Si aceptamos eso como una posibilidad, ¿quién está mejor posicionado para hacerlo?
Vamos a ver a los principales candidatos en orden de lo más probable que sea una dinastía, al menos, mientras explicamos la perspectiva general de cada club. Si te adelantas solo para ver las clasificaciones, eso es trampa. Tu madre estaría muy avergonzada y tu perro ya no te querrá
1. Medias Rojas de Boston
Los Medias Rojas cuentan con una cantidad de agentes libres, incluyendo a Steve Pearce, Más Valioso de la Serie Mundial. Luego de haber disfrutado su momento revelación a los 35 años, sería maravilloso ver a Pearce capitalizando su caché en el mercado, pero su edad y posición van en su contra. A lo mínimo, seguirá siendo un complemento diestro atractivo para Mitch Moreland en la primera base y obviamente, encajó muy bien en el clubhouse de Boston.
En cuanto a nuestra interrogante de si está surgiendo una dinastía, algo más pertinente que la situación de Pearce son los destinos de los pitchers agentes libres Nathan Eovaldi, Joe Kelly y Craig Kimbrel. Eovaldi y Kelly posiblemente se han hecho con un buen dinero con sus desempeños de octubre. La situación de Kimbrel sigue siendo poco clara, considerando la disolución del concepto de “cerrador” en términos financieros y los signos de desgaste mostrados por el en la temporada recién concluida. En el caso de Boston, lo importante es que los Medias Rojas tendrán que sacar la cartera para retener brazos de calidad o tendrán que invertir en otras opciones a fin de conseguir soluciones licitando contra muchos otros optantes.
El sistema de granjas de los Medias Rojas se ubicó en el puesto 24 de los rankings de enero de Keith Law y si bien Keith elogió a los tomados por Boston en el draft 2017, dichos peloteros no serán soluciones certeras para cubrir puestos en el roster de 2019. Con tantos agentes libres presentes, los Medias Rojas contarán con cierta flexibilidad financiera, considerando que su nómina de 2018 fue la más onerosa de las Grandes Ligas. Aunque también existe la oportunidad de invertir dentro de los márgenes e intentar reiniciar sus cifras con miras al impuesto al lujo. Sería algo excesivamente severo y nada característico de Dave Dombrowski, pero es una opción.
La base de talento sigue presente. J.D. Martínez, Mookie Betts, Andrew Benintendi, Xander Bogaerts, entre otros. Rafael Devers debería seguir ascendiendo. Probablemente Boston no dependerá mucho de la recuperación de Dustin Pedroia, pero sí podría ayudarles. En cuanto al staff de pitcheo, David Price podría rescindir su contrato, pero sería toda una sorpresa. Los Medias Rojas mantuvieron una opción tan obvia sobre Chris Sale que era natural ejercerla, incluso mientras planificaban su desfile de victoria.
Una métrica que revisamos para este artículo fue un estimado somero del WAR proyectado para los peloteros menores a 30 años para el inicio de la próxima campaña. El método fue un poco rudimentario, pero los Medias Rojas se ubicaron en el puesto 17 de esta medición. Básicamente cuentas con los “Killer B’s” junto con Devers para así parecer un equipo algo más “veterano”. La historia nos indica que eso podría implicar en el futuro lesiones, declive, promedios mediocres de desempeño contrastado con salario, etcétera.
A pesar de ello, no hay que considerar que Boston está al borde del precipicio porque jugadores de la talla de Sale, Price y Martínez están o pronto se encontrarán rondando los 30 años. De hecho, sus historiales son tan fuertes y estables que sería toda una sorpresa si eso le ocurriera a alguno de ellos. Aunque siempre preocupa cuando hay muchos hombres con cierta edad dentro de un roster.
El campeonato de 2018 fue todo un logro conseguido por todos de abajo hasta arriba y hay cierta incertidumbre subyacente por debajo del núcleo. La incertidumbre puede ser vista como oportunidades disfrazadas, sin embargo. Con los movimientos correctos, Boston podría ser aún mejor en la próxima campaña y más allá. No sorprendería dada la forma óptima en la cual se ha administrado la organización de los Medias Rojas desde que John Henry y socios adquirieran el equipo hace 16 años.
Cuando se trata de ver las posibilidades que hay de crear una dinastía, es realmente difícil elegir entre Dodgers, Yankees, Astros y Medias Rojas. Pero Boston cuenta con más dinero que Houston. Y en comparación con Yankees y Dodgers, los Medias Rojas tienen algo en la era actual que los primeros no: un título.
2. Dodgers de Los Ángeles
Los Dodgers no han invertido fuertes sumas en incorporaciones de agentes libres externos durante la era de Andrew Freeman. Quedaron a raya del límite al impuesto al lujo esta temporada para así darse la posibilidad de superarlo en el invierno. Obviamente que dicho plan fue posiblemente puesto en acción anticipando lo que era inicialmente considerada una camada de agentes libres de altísimo nivel pero que ahora no se muestra llena de nombres capaces de modificar sustancialmente la jerarquía de la liga.
La primera prioridad para los Dodgers es la decisión de Clayton Kershaw, si éste decide rescindir su contrato o no. Esta decisión se conocerá en los próximos días. De permanecer con los Dodgers, retendrán a su as del pitcheo durante por lo menos dos temporadas más a un precio cercano a los $35 millones por año. También es posible que Los Ángeles y Kershaw anuncien una extensión contractual, o que Kershaw partirá pronto. En estos momentos, todas esas situaciones tienen igual probabilidad de ocurrir. La pregunta clave a hacer: Si Kershaw fuera agente libre de otro equipo, ¿qué tan dispuestos estarían los Dodgers a optar por sus servicios?
Manny Machado es el otro agente libre de primer nivel para los Dodgers. Uno aspiraría ver que Machado alquiló su residencia en Los Ángeles a corto plazo. Corey Seager estará de vuelta como campocorto de los Dodgers el próximo año y los años venideros. ¿Podrían los Dodgers desembolsar entre $200 millones y $300 millones que se requerirían para quedarse con Machado? Claro. Es una posibilidad. La clave para mantener las esperanzas de asentar una dinastía de los Dodgers radica en que, si bien han armado el roster de Grandes Ligas con mayor profundidad de todo el béisbol, no han diezmado su sistema de prospectos. Y se trata de uno con gran calidad. Yasmani Grandal es agente libre, pero Austin Barnes sigue ahí, los jugadores suplentes con veteranía tienen precio económico y los Dodgers cuenta con dos de los mejores receptores prospectos del béisbol con Keibert Ruiz y Will Smith.
Revisando el roster de los Dodgers y la camada de agentes libres por venir, pues es cierto, podrían intentar hacerse con alguien de la talla de Harper, que es joven y mejoraría a cualquier equipo. Ciertamente sería terrorífico para el resto de los clubes de Grandes Ligas si eso llegara a ocurrir. Pero los Dodgers no tienen por qué hacer esa clase de adquisición para seguir siendo contendor viable. Por un lado, cuentan con Alex Verdugo, jardinero prospecto de gran valía y quien habría jugado gran parte de la temporada 2018 en el equipo grande de la mayoría de las organizaciones. Además, no sabemos cuáles serán las versiones que veremos de Chris Taylor y Max Muncy en 2019.
Cada aspecto que se busca en una organización para evaluar su sostenibilidad en el tiempo está presente. Law catalogó al sistema de los Dodgers como noveno mejor del béisbol antes de comenzar la temporada. En cuanto a su talento menor de 30 años presente en el roster de 40, los Dodgers están en el tercer lugar de las Mayores. Tienen la mayor capacidad de expandir su nómina de cualquier equipo de la pelota grande y aún así, acaban de retroceder en cuanto a su tope para llegar al territorio de impuesto al lujo. Cuentan con una de las mejores operaciones de análisis estadístico del béisbol. Tienen sólido historial en desarrollo de peloteros tanto en las Mayores como en las Menores.
Pueden ver a dónde nos dirigimos con esto. Es cierto que los Dodgers quedaron a muy poco de ganar el título por dos años seguidos, pero esta organización no va a decaer pronto. Los Dodgers no tienen posibilidades de convertirse en la versión beisbolera de los Buffalo Bills de la década de los 90.
3.Yankees de Nueva York
Realmente, se trata de elegir entre Yankees y Dodgers, pero ciertamente los Dodgers hicieron más durante la postemporada. Realmente, no podemos juzgar a estas neo dinastías bajo los estándares impuestos en los días de Mantle y Rizzuto. Los equipos no van a volver a hilvanar cinco o seis títulos consecutivos. Incluso si los Yankees pudieran comprar a los 20 mejores peloteros de las Grandes Ligas, el elemento aleatorio del formato de postemporada evitaría que ocurriera tal hazaña.
Los Dodgers cuentan con dos banderines alcanzados en esta era de los súper equipos. Los Yankees acudieron una vez a la Serie de Campeonato de la Liga Americana. Si los Dodgers alcanzan el título de Serie Mundial el próximo año, podríamos comenzar a denominarles “dinastía”. Los Yankees, probablemente, necesiten de un título y otra carrera fuerte para llegar a ese punto. He ahí la razón por la cual los Dodgers están por encima de los Yankees en esta lista.
Con la excepción de lo anterior, no hay muchos elementos que diferencien a ambos clubes. Los Yankees tienen el WAR proyectado más alto para sus peloteros menores de 30 años de cualquier roster de 40. Cuentan con un sistema de granjas calificado previo al inicio de la temporada por la mayoría de los expertos como digno del top 5. Han retrocedido hasta alejarse del límite del impuesto al lujo. Y son los Yankees de Nueva York, por ello, estarán metidos en la pelea por contratar a cualquier agente libre importante que pruebe las aguas del mercado.
Ese rol como lugar de destino principal para los agentes libres ayudó a acabar con la última carrera de éxitos a alto nivel sostenida por los Yankees. Sin embargo, en esta ocasión el gerente general Brian Cashman está haciendo las cosas de forma distinta. Su gasto será inmenso, pero se mantendrá dentro de los límites de la eficiencia. Ya no se está relegando al sistema de prospectos. Es muy poco probable que Nueva York vuelva a caer en los excesos del pasado.
En cuanto a ese talento menor a 30 años: están presentes Aaron Judge, Gary Sánchez, Gleyber Torres, Miguel Andújar, Giancarlo Stanton, Didi Gregorius, Manny Machado (ven lo que hicimos ahí)… Es impresionante. Lo único que causaría un repliegue por parte de los Yankees es que sus prospectos del pitcheo no se desarrollen y si sus incorporaciones en agencia libre no llegan a rendir, lo cual es un riesgo siempre presente. Nueva York necesitará hacer algunas incorporaciones de alto impacto en su rotación este invierno.
4. Astros de Houston
Una gran razón por la cual los Astros de Houston se ubicaron adelante de los Medias Rojas de Boston en sus primeros destellos en 2019 es la cantidad de talentos que tiene menos de 30 años en el roster -la segunda más alta en Las Mayores por la medida mencionada anteriormente-. Estamos hablando de Alex Bregman, Carlos Correa, José Altuve y George Springer, que le dan a Houston un grupo establecido de jugadores súper estrellas todavía jóvenes que ningún otro equipo puede igualar.
Houston tuvo un equipo de lanzadores veteranos esta temporada y ocupó el cuarto lugar por edad por tiempo de juego. Esto podría ser muy diferente pronto. Dallas Keuchel (31 años para la siguiente campaña) y Charlie Morton (35) serán agentes libres. A Justin Verlander (que no envejece, pero tendrá 36 en el tiempo cronológico) le queda un año más en su contrato.
Afortunadamente para Houston, no hay una gran necesidad de inflar la nómina con agentes libres. Jeff Luhnow y sus analistas pueden apuntar la edición de valor, sabiendo que Verlander, Gerrit Cole y Lance McCullers Jr., todavía estarán ahí. Además, Brad Peacock y Collin McHugh han sido buenos abridores en el pasado, pero se movieron al bullpen por la profundidad de Houston. Luego están los chicos, liderados por Forrest Whitley, Framber Valdez y Josh James.
Es importante que los Astros mantengan sus gastos en el pitcheo bajo control porque su presupuesto eventualmente vencerá en la posición del talento, que debe aumentar con un papel más importante para el prospecto Kyle Tucker el próximo año. Altuve ya ha firmado una extensión de $163 millones. Springer está bajo contrato la próxima temporada pero luego ingresará a su último año de elegibilidad de arbitraje. Correa apenas está tocando su ventana de arbitraje. Bregman estará ahí en 2020.
La inversión de ese núcleo de talento valdrá la pena, pero va a ser costosa. De acuerdo con Cot’s Contracts, los Astros no han estado en una lista de las 10 nóminas más altas desde 2009. Para mantener el tren en marcha por encima de las Crawford Boxes, eso probablemente va a cambiar.
5. Cachorros de Chicago
Esto podría leerse como una lectura bastante pesimista de la perspectiva de los Cachorros. Vamos a abordar eso con un par de declaraciones rápidas. Primero, hay una brecha mucho mayor entre los equipos de los números 5 y 6 en la lista que del 4 al 5. En segundo lugar, colocar a los Cachorros aquí es menos de una crítica de su estado organizativo que una realidad de la ferocidad de la competición en la elite del béisbol. Es por eso que estamos enfocándonos en estos equipo hoy en primer lugar.
Los Cachorros tienen un grado de poder financiero similar a los Medias Rojas, Yankees y Dodgers, y ciertamente más que los Astros. Ellos también tiene una gran colección de talento de menos de 30, clasificados en sextos. Anthony Rizzo, Javier Báez, Kris Bryant, Willson Contreras y Kyle Schwarber tienen tiempo de su lado.
Esos son todos los jugadores de posición, que por supuesto es por diseño. El plan de los Cachorros era aumentar su talentoso y estable núcleo de jugadores de posición con adquisiciones de lanzadores específicos. Ha sido una aguja más difícil de engarzar de lo previsto. Jon Lester sigue siendo un buen lanzador, pero mostró señales de desaceleración. Yu Darvish solo puede ser visto como un signo de interrogación en este punto. Y quién sabe qué demonios le pasó a Tyler Chatwood.
Los Cachorros tienen una decisión que tomar sobre la opción de Cole Hamels, y eso sucederá en los próximos días. Sería obvio si superan que obtendrían la versión de Hamels de Chicago. Pero este tipo no había vivido mucho en sus últimas dos temporadas con Texas y cumplirá 35 años en la próxima temporada. Los Cachorros también necesitan ayuda en el bullpen.
¿Puede Chicago tirar dinero en estos problemas? ¿Debería? Aparte de Rizzo, los Cachorros están buscando un roster de construido con una base de jugadores buenos en sus ventanas de arbitraje. Ellos también tienen a Lester, Darvish y Jason Heyward en los libros por más de $60 millones en cada una de las siguientes dos temporadas. Además de todo eso, el sistema de ligas menores de los Cachorros se han agotado en los niveles superiores.
Esto suena con una perspectiva nefasta, pero en realidad es solo una explicación de por qué se ubican detrás de los otros súper equipos. Pero los Cachorros pertenecen a esta clase.
6. Indios de Cleveland
Los Indios tiene un uno-dos en su alineación como nadie en Francisco Lindor y José Ramírez. Ambos jugadores acaban de alcanzar sus mejores años. Es ese punto de partida sorprendente para cualquier organización.
A partir de ahí, vas a la rotación de Cleveland. Corey Kluber, Carlos Carrasco, Mike Clevinger, Trevor Bauer y Shane Bieber. Ese grupo, y la falta de competencia en la central de la Liga Americana, les aseguran que los Indios serán de nuevo los grandes favoritos en su división.
Sin embargo, Cleveland carece de la profundidad de talento en su roster de Grandes Ligas como otros súper equipo. El bullpen, que fue el grupo que desencadenó esta carrera actual de Cleveland en primer lugar, cayó en pedazos en 2018 y podría tener que reconstruirse desde cero.
El sistema de fincas de Cleveland es mediano, y ha empeorado en el talento de alto nivel por el cambio de media temporada que envió a Francisco Mejía a San Diego por Brad Hand y Adam Cimber. Podría haber alguna ayuda de pitcheo por acercarse, y la profundidad en la rotación de Cleveland debería permitir que los Indios rompan sus brazos con roles secundarios.
Más que nada, los Indios necesitan actualizar su grupo de posición con al menos un agente libre de impacto. No parecen estar en la carrera por gente como Machado o Harper. Tal vez podrían lograr conseguir a Josh Donaldson se quede con un contrato de almohada, ya que necesita restablecer su valor y Cleveland es una buena opción para él.
Sin embargo, queda por ver cuán agresivos pueden ser los Indios financieramente. Nunca se han elevado por encima de la mitad en la nómina. Y a pesar de su éxito en el campo en los últimos años, los Indios aún ocupan el tercer lugar en asistencia en 2018. Los más probable es que, si hacemos otra vista de los súper equipos el próximo año, los Indios no estarán en la lista.