Castro aprovechará a Rodríguez

El receptor Ramón Castro volverá a ser un jugador de respaldo desde la banca. Sin embargo, ante la resencia de su paisano puertorriqueño Iván Rodríguez, buscará aprender lo más posible

Castro no ha podido batear por encima de .240 en cuatro campañas. (AP)
JUPITER, Florida - Ramón Castro se proponía disputarle a Mike Redmond la titularidad en la receptoría de los Marlins en el 2003, pero a ambos no les quedará otra que ver desde el banco a Iván Rodríguez.

Castro, en lo particular, no se molesta por ello y dijo que buscará aprender de un "verdadero maestro" detrás del plato, que de paso es oirundo de su mismo pueblo en Puerto Rico: Vega Baja.

"Voy a observarlo bien. Cada detalle suyo en el juego me podrían ayudar", manifestó a la AP Castro, quien parece resignado al papel este año de suplir con Redmond el trabajo de Rodríguez. "Como quiera es un trabajo y me están pagando para que yo lo haga".

"Yo no estoy molesto, por el contrario, estoy contento de tenerlo aquí, somos del mismo pueblo. Para mí es un orgullo jugar con él en Grandes Ligas y a sabiendas de que es un candidato al salón de la fama", subrayó el catcher de 27 años.

Rodríguez, quien se desligó de los Rangers después de haber jugado con este equipo de Texas sus 12 primeras temporadas, firmó por un año y diez millones de dólares con los Marlins.

El boricua, a quien los Orioles trataron infructuosamente de contratar por varias temporadas, ganó diez guantes de oro consecutivos y fue el jugador más valioso de la Liga Americana en 1999.

Su arribo sepulta este año la empresa que se había propuesto Castro de disputarle la regularidad en esa posición a Redmond.

"Desde que terminó la temporada pasada, me había propuesto trabajar incansablemente para ganarme un lugar fijo en Florida y jugar finalmente una campaña completa", expresó Castro.

Redmond y Castro se alternaron el año pasado, pero el estadounidense jugó más y registró mejor promedio de bateo que el puertorriqueño.

Castro bateó apenas para 238, pero es cinco años menor que Redmond y le aventaja levemente en cuanto a bateo. Castro la sacó del parque el año pasado en seis ocasiones; Redmond solamente en dos.

El mayor dolor de cabeza para Castro ha sido su anémico bateo. Desde que subió a las mayores en 1999, no ha podido batear más de 240 y tampoco ha tenido una campaña completa.

Por ello, Castro veía el 2003 como un año "decisivo".

Castro dice que ahora no le queda otra que aprovechar la presencia de Rodríguez y aprender de él en todo. "A mí me falta. Así que estaré muy concentrado en ver a 'Pudge' batear y dirigir desde la receptoría a los lanzadores", reiteró.

Castro y Rodríguez se conocen desde hace años e incluso ambos han coincidido en momentos de entrenamientos y en partidos en su país.

"Nosotros somos como hermanos", dijo Castro. "Bromeamos en momentos libres; hablamos de béisbol a la hora del trabajo".

-AP

 ENVÍALO | MÁS ENVIADOS

Florida
martes, 11 de marzo
Portada