Pese a su marcha perfecta en el certamen caribeño, la "tribu" estaba obligada a ganar para llevarse el título, pero se estrelló con la soberbia serpentina de Acevedo, que permitió a los dominicanos alcanzar a los anfitriones en el standing con récord de 5-1.

Así, la llamada Serie Mundial Latinomaricana, que se realiza en el Estadio Roberto Clemente, se prolongará un día más y será hasta este sábado a las 18:00 horas locales (17:00 de México), cuando se conocerá al nuevo monarca de la pelota caribeña.

Contrario a la efectividad de los abridores de la tribu en toda la serie, que llegaron con un imponente 0.98 de carreras limpias, el boricua Dickie González empezó titubeante, algo nervioso, ante los temibles bats dominicanos.

En el primer capítulo, González dominó en elevado a Rafael Furcal, pero Luis Polonia y Michel Tejada le ligaron sencillos y el cuarto bat David Ortiz pegó doblete a lo profundo del izquierdo-central, para empujar las dos primeras carreras del duelo.

El abridor de Mayagüez se creció para retirar el inning sin más daño, así como despachar en tres bateadores la segunda, con un doble play de su cuadro, al igual que la tercera, mas en la cuarta volvió a sucumbir ante al artillería quisqueyana.

En ese cuarto inning, los "emplumados" incomodaron en demasía a Dickie González, ya que David Ortiz le abrió con indiscutible, pero Tony Batista roleteó para doble matanza. Y cuando se creía salvado, Raúl Mondesí le depositó la pelota atrás de la barda del derecho, para el 3-0.

Por el otro bando, José Acevedo estaba en plan de fenómeno recolectando ponches en grandes cantidades. En el primer episodio, abanicó a los tres bateadores, en la segunda despachó en cuatro hombres, con un chocolate.

En la tercera, también en orden, ponchó a dos más; en la cuarta, agregó a su cuenta otros dos abanicados, con un pasaporte. La quinta se fue en cuatro con el primer imparable de Indios y en la sexta volvió a ponchar a los tres abanicando.

Acevedo pasó algunos problemas en la fatídica, porque aunque empezó ponchando a Tony Valentín, regaló pasaporte a Luis Rivera, dominó a Julio Matos, Javier Valentín sencilleó al central, aunque todo acabó con rola al cuadro de Wilbert Nieves.

Al abrir la octava. Cibao aumentó a 4-0 cuando, con dos fuera, David Ortiz y Tony Batista ligaron dobletes, este último productor. En la novena, Félix José dio jonrón y Rafael Furcal empujó el 6-0 con sencillo.