SAN FRANCISCO - Si tan solo todos ellospudieran ser como Madison Bumgarner en esta época del año. Y por "ellos", ustedes saben a quién me refiero.
David Price, Max Scherzer, Rick Porcello, Yu Darvish, Cole Hamels and Rich Hill tienen marca combinada de 0-6 en esta postemporada fascinante - luego de tener record de 93-35 durante la temporada regular. Clayton Kershaw ganó apenas su segunda apertura en sus últimas ocho salidas en postemporada, pero solo llegó a poco más de cinco entradas. Y ni siquiera hemos mencionado a Jeff Samardzija y Colby Lewis.
Siempre miramos a octubre como ese mes donde los ases toman posesión del escenario. De la forma en que lo hizo Sanford B. Koufax. De la forma en que lo hizo P. Robert Gibson. De la forma en que lo hizo John Smoltz y Curt Schilling y Jack Morris. Incluso en la forma en que lo hizo Josh Beckett.
Pero quizás no vivimos en un juego donde eso siga siendo tan fácil de lograr. Quizás haya demasiada atención, demasiada presión, demasiada información. Quizás hemos colocado la barra demasiado alta - porque lo que siempre hemos esperado de los Ases no es lo que ellos han estado entregándonos.
Ahora si han visto a MadBum trabajando su magia - y vamos a tener la oportunidad de ver a Bumgarner de nuevo el lunes en la noche, en un choque en el Juego 3 de la Serie Divisional de la Liga Nacional ante Jake Arrieta en el AT&T Park - uno podría preguntarse de qué rayos estamos hablando. Pero miren alrededor del resto del deporte para que vean algo increíble.
Doce lanzadores activos han ganado un premio Cy Young y lanzado en la postemporada en el transcurso de sus carreras. Solo cinco de ellos tienen record ganador en postemporada. Kershaw tiene marca de 3-6 con efectividad de 4.65 en octubre. Price tiene 2-8, 5.54 -- y 0-8 como abridor.
¿Cómo es esto posible? Se siente como un fenómeno que desafía una explicación. Así que naturalmente, nos pusimos a la tarea de encontrarle una. Y he aquí lo que hemos encontrado: Es algo complicado.
"No es una declaración excluyente", dijo Smoltz, un hombre que tuvo marca de 15-4 y efectividad de 2.67 en su carrera en postemporada, con más ponches en playoffs (199) que cualquier otro lanzador en la historia. "Hay muchas razones diferentes".
Esas razones se pueden encontrar dentro de las cabezas de los hombres en el montículo - sin mencionar dentro de sus corazones, dentro de sus lanzamientos, dentro de su propio grupo de circunstancias. En realidad, algunas veces es todas las anteriores. Pero comencemos con un hecho que es cierto para todos:
El béisbol de octubre es diferente. Cada elemento involucrado en esto es diferente.
"Todo se magnifica en la postemporada", dijo Smoltz. "Los árbitros tienen mucha presión sobre los detalles, y todos los ojos están sobre ellos. Las zonas de strike se ponen un poco más interesantes. Los bateadores no dejan pasar lanzamientos o tienen turnos como los que tendrían en temporada regular. Hay mucho en juego. Pero la conclusión es que, si mentalmente no estás listo para ese momento, tu tasa de éxito no va a ser tan buena".
Smoltz fue un hombre que se alimentaba de esos momentos. Incluso ahora, los extraña mucho. Se encuentra a sí mismo diciendo, "Lo amaba. Quisiera tener más experiencias como esas". Pero cuando él mira a algunos de los hombres que se suben a un montículo en estos días, él dice, "Algunas personas en nuestro deporte no lo comprenden tanto como deberían".
Pero incluso si están de acuerdo con esto, ¿hace algún sentido que los lanzadores del calibre de Kershaw y Price no estén listos para los partidos más grandes de sus vidas? Piensen en todo lo que ellos han logrado. Piensen en lo mentalmente fuertes que tuvieron que haber sido para alcanzar su nivel en este deporte.
Así que ¿realmente puede estar todo en sus cabezas? Un veterano coach de pitcheo no lo cree así.
"Échenle una mirada a la forma de lanzar de Kershaw y Price -- versus la de Bumgarner", dijo. "Acelerado versus fácil, fluido. La mayoría de las veces, eso [la forma de lanzar] refleja también su personalidad".
Así que lo que este coach nos está diciendo es que tanto Kershaw como Price tienen una forma de lanzar que podría no ser adecuada para esta época del año - porque esa voz en su cabeza, ese motor en sus venas y ese golpeteo en su corazón los está impulsando a precipitarse, a dar bandazos, a ir más rápido en partidos en los que no hay nada más importante que la habilidad de mantenerse lento y en contro. En otras palabras, su personalidad podría estar mandando más que su habilidad en su forma de lanzar.
"Hace que sea más difícil repetirlo", dijo el coach de pitcheo. "La adrenalina es lo más difícil de controlar en el deporte. ... Yo los veo, y los veo que intentan dar más con mayor frecuencia que lo normal".
Un ejecutivo de la Liga Americana dijo que cree que eso es un gran problema, especialmente en el caso de Price. Se siente con tanta energía para hacer algo especial en esos momentos, que tiene problemas para bajar su intensidad cuando sea necesario.
"A la distancia, eso es lo mismo que yo veo", dijo Smoltz, "sin tener más detalles de cualquier otra cosa que no sea que él es muy apasionado. Miren, él es un trabajador lento, muy metódico, que lanza 230 entradas. Es un prototipo del as que puede encabezar una rotación. Pero al llegar a la postemporada, hay la capacidad de que quizás le importa tanto y que quiere hacerlo tan bien que no puede bajar la intensidad".
En el caso de Kershaw, dijo un ejecutivo de la LN, sus problemas nunca han sido con su repertorio. Son más que "se acelera tanto que las cosas comienzan a irle mal". Cualquiera que haya visto a Kershaw de cerca sabe que él se motiva para lucir en grande, y para impulsar a su equipo. Pero la misma gente también se pregunta si todas esas preocupaciones terminan pasándole factura - especialmente en momentos como este. Y Smoltz se pregunta lo mismo.
"Básicamente Clayton Kershaw ha lanzado un juego de playoff en cada partido que ha trabajado en los últimos tres años", dijo Smoltz, "porque cada partido de serie regular lo ha colocado en un nivel donde no permite nada. Así que imagínense el ser Clayton Kershaw, y permites tres carreras en un partido, la gente comienza a preguntarse, '¿Qué le pasa?' Así que él ha impuesto un estándar que no tiene precedentes.
"Y debido a esto, cuando él llega al final del año, se podría decir que él está un poco más frito mentalmente que la mayoría de los jugadores. Así que ahora, cuando llega ese momento y uno intenta cargar a tu equipo, no es como que le estén apaleando. Son una o dos entradas las que lo han definido - ante un equipo".
Por supuesto, ese equipo es los Cardenales de San Luis, quienes le vencieron en cuatro ocasiones seguidas en octubres consecutivos (2013 y 2014), anotando 19 carreras ante él en 22 ⅔ entradas. En medio de eso, el resto de los equipos en el béisbol lo venció tres veces en toda la temporada 2014, cuando tuvo marca de 21-3 y efectividad de 1.77.
Un sinnúmero de cazatalentos y ejecutivos dijeron que están convencidos de que Kershaw da pistas desde la cintura de sus lanzamientos en esos juegos, especialmente ante bateadores zurdos. Y los Cardenales supieron aprovecharse de eso. Colocamos aparte esas cuatro derrotas ante San Luis, y en sus otras salidas en postemporada desde 2013, Kershaw tiene marca de 3-1 con efectividad de 2.73. Su única derrota fue ante los Mets de Nueva York en octubre pasado, en un juego en el que comoquiera ponchó a 11 y permitió apenas cuatro hits.
No obstante, se siente como si hubiese una cualidad en Bumgarner que nadie más en el deporte puede igualar ahora mismo. E incluso el manager del equipo que lo tiene que enfrentar el lunes no puede menos que admirarlo. El domingo, el manager de los Cachorros de Chicago Joe Maddon comparó sin reparos a Bumgarner a lanzadores como Gibson y Koufax. Y Maddon no solo habló sobre la calidad de esos pitcheos saliendo con fuerza del brazo izquierdo de Bumgarner.
"No es únicamente su repertorio", dijo Maddon. "Es su naturaleza competitiva. Pienso que ahí es que se pierde mucho esto, en lo que hacemos. Todo el mundo siempre analiza los números y los pitcheos y cómo él hace esto y cómo girar las rotaciones, etc. Este tipo es un competidor. Eso es lo que lo coloca aparte del resto. No es que su repertorio sea tan especial. Sí es muy bueno. Pero la forma en que compite es lo que lo separa del resto".
El éxito de Bumgarner es demasiado único entre esta generación. Él debería comenzar a mercadear botellas del Elixir Milagroso de Octubre de MadBum - tendría más dinero que Mark Zuckerberg. Pero primero, le queda por lo menos otro partido de béisbol en postemporada, una reputación que mantener y una tarde de béisbol de octubre para recordarle al mundo lo que los ases solían hacer en esta época del año.