LOS ÁNGELES -- ¿Es una venganza de Jorge Vergara contra Televisa por hacerlo aparecer pública y ridículamente castrado para hacer el anuncio de que el técnico americanista Miguel Herrera era el salvador del Tri rumbo al Mundial 2014?
¿Es una venganza de Billy Álvarez contra Televisa por el misterio de los 16 años sin título de Cruz Azul en relación con las casas de apuestas de la empresa de Azcárraga Jean?
¿Es una venganza de Carlos Slim y el Grupo Pachuco del Pachuca por las batallas oscuras que llevan librando durante años extra e intro futbol?
¿Es una venganza de TV Azteca contra Televisa por la forma en que la sometió en torno a los intereses financieros, políticos y deportivos de esta Industria, como les gusta llamar a algunos otros sometidos, al futbol mexicano?
¿Es una venganza de los Xolos de Tijuana contra Televisa por la forma en que -correctamente, aquí sí- se informó con detalle de la detención de Jorge Hank Rohn por presunta violación a la Ley Federal de Armas y explosivos?
¿O es una venganza de cualquiera de los otros enemigos que ha ido sembrando a lo largo de la historia?
Porque solo un enemigo rencoso, encarnizado, de Televisa puede haber llevado al América a Antonio Mohamed para que destruya de manera tan patética el dominio impuesto en la Liga MuyEquis en un lapso de dos años.
Por eso, ¿quién es el Judas que por 30 monedas, acuñadas en el fuego de la venganza o de la traición, llevó a Antonio Mohamed al América?
Más allá del 0-0 ante el Veracruz, más allá de esa paupérrima exhibición y más allá de ese bochorno en su propia cancha, un Estadio Azteca al que Miguel Herrera le había devuelto la condecoración de fortaleza, más allá de ello, el Turco hunde al América.
De hecho, la campaña de Mohamed hace aparecer a las Águilas de Miguel Herrera como un mito, como algo irreal, como una mentira, como un cuento de hadas, por la facilidad con que ha derruido el edificio sólido del americanismo.
Pruebas hay. Y como dijo la pedicurista, vamos callo por callo.
1.- La afición vuelve a alejarse del Estadio Azteca. Hay motivos: tres derrotas y un empate, éste ante el peor equipo de la Liga. Con Herrera, el América perdió cinco encuentros como local en cuatro torneos.
2.- El equipo pierde el sello de espectacularidad, agresividad, impiedad, aunque el mismo Turco diga que el equipo del Piojo no era ofensivo ni fastuoso ni embelesador. Este sábado en el Azteca era inidentificable quién tenía más miedo de perder: los Armadillos de Mohamed o el Veracruz.
3.- La personalidad de la banca se refleja en la cancha. El equipo ha perdido esa sangre en la mirada. Esa espuma de rabia en el hocico bufando. Hoy hay mucho glamour, mucho silencio, mucha pasiflora y mucha preocupación por el parecer, por el aparentar en lugar del ser. El futbolista ya no ve un técnico en su banca, sino un hipster.
El de antes escupía indicaciones imprecaciones; el de hoy, uñas y semillitas de calabaza.
4.- Cierto: Mohamed hace cambios, pero incorrectos en posición, en hombre o en recorrido. Miguel Herrera supo jugar, competir y ganar sin Layún y sin Sambueza. El Turco ni con ellos, ni sin ellos, ni a pesar de ellos.
5.- Hay un elemento que se agrega. No por ser nuevo sino porque recién empieza a dejar huella desde hace un par de semanas: la condición física. Siempre se le criticó a Mohamed sus laxas, despreocupadas y ligeras prácticas en ese aspecto. Por eso sus equipos son cortos de recorrido, aglutinados, poco aparatosos y espectaculares. Y los jugadores del América estaban evangelizados bajo la explosividad.
6.- El equipo de Mohamed ha recibido ya 14 goles, dos más que el América en todo el torneo anterior y uno menos que en todo el Clausura 2013 y todo el Apertura 2012, prácticamente con la misma defensa, porque la ausencia del Maza es decisión suya, y Layún. Insisto, Herrera cuando no jugaba sabía solucionarlo, recargando el trabajo por el lado de Paul Aguilar.
7.- De momento, Mohamed suma 14 goles en el torneo. Imposible que alcance las 31, 30, 28 y 30 anotaciones de los cuatro torneos anteriores; aunque es cierto, en tres de ellas, las tres primeras de El Piojo, estuvo Chucho Benítez.
8.- En El Nido se han recibido 38 tarjetas amarillas en 12 juegos. Son tres menos que en todo el torneo anterior.
9.- En combinación de resultados, el América podría encontrarse al final de la Fecha 12 fuera de la zona de Liguilla, aunque faltarían cinco fechas por disputarse.
10.- Y ojo con esto: América no tiene un torneo alterno que disputar de las exigencias de una Copa Libertadores o al menos una Concachampions o siquiera una Copa MuyEquis. Nada perturba o disturba a estas Águilas que han ido involucionando en Avestruces o Armadillos.
Entonces, reitero la pregunta: ¿quién es el Judas que por 30 monedas, acuñadas en el fuego de la venganza o de la traición, llevó a Antonio Mohamed al América?