<
>

Mayo cargado de jonrones, sorpresas y peleas

Mayo fue un mes de muchos cuadrangulares, de hecho el segundo más prolifico en la historia de 140 años de las ligas Americana y Nacional, pero también de sorpresas y peleas espectaculares, entre jugadores, entre coaches y entre jugadores y coaches con los árbitros.
Los Astros de Houston, que entran a junio con la mejor marca de Grandes Ligas (38-16) y la mayor ventaja de un líder divisional (11 juegos sobre Angelinos de Los Ángeles), batearon 52 cuadrangulares en mayo, la mayor cantidad en un mes en la historia de la franquicia. Ocho jugadores de los Astros pegaron cuatro o más vuelacercas, un récord del béisbol.

Con los Astros comandando la ofensiva, los 30 equipos de las ligas mayores se combinaron para sacar 1,060 pelotas de los parques, el segundo mayor total de la historia en un mes calendario, solamente detrás de los 1,069 que se conectaron en mayo del 2000. De acuerdo a Stats and Info de ESPN: 335 jugadores diferentes batearon jonrones en mayo (el récord es de 345, en septiembre del 2015), 234 tuvieron al menos dos vuelacercas (récord) y 125 batearon cuatro o más (récord).

En los primeros dos meses de la temporada de Grandes Ligas del 2017 se pegaron 1,923 cuadrangulares en 790 partidos, para una frecuencia de 2.43 por encuentro, la más alta de la historia. Durante la temporada del 2000 se estableció la marca, con 2.30 jonrones por juego, mientras que en el 2016 la frecuencia fue de 2.31.

Los dos equipos que disputaron la Serie Mundial del año pasado, Indios Cleveland y Cachorros de Chicago, no están exactamente paseando la distancia en esta ocasión.

Cleveland, campeón de la Liga Americana, comenzó junio compartiendo el primer lugar de la División Central con Mellizos de Minnesota, un conjunto que viene de perder 103 partidos y quedar en el último lugar del sector. Y la tribu logró escalar hasta la cima a última hora, aprovechando cuatro reveses seguidos de los Mellizos para cerrar el mes.

Chicago, que ganó su primer campeonato en 108 años en entradas extras de un séptimo y decisivo encuentro del Clásico de Otoño pasado, entra a junio con récord negativo (25-27) y juego y medio detrás de los sorprendentes Cerveceros de Milwaukee, que pegaron 74 jonrones, el mayor total de la franquicia en los primeros dos meses de una temporada, para tomar ventaja en la guerra con sus poderosos rivales del centro de la Liga Nacional: Chicago, Cardenales de San Luis, Piratas de Pittsburgh y Rojos de Cincinnati.

Hablando de guerra, en mayo tuvimos el clímax de una disputa que se desató en abril entre los Orioles Baltimore y los Medias Rojas de Boston, dos rivales de la poderosa División Este de la Liga Americana, después que de el antesalista dominicano Manny Machado lesionara de la pantorrilla izquierda al intermedista Dustin Pedroia con una barrida en la segunda base.

Los lanzadores de los Medias Rojas se pasaron el resto de la serie (del 21 al 23 de abril en Baltimore) tratando de golpear, infructuosamente, a Machado y el relevista Matt Barnes fue un poco más lejos, cuando intentó dar a la cabeza del dominicano. El 2 de mayo, en Fenway Park, el estelar zurdo Chris Sale lanzó detrás de Machado en la primera entrada, lo que provocó una reacción. Luego del partido, Machado, quien será uno de los agentes libres más codiciados de las ligas mayores en el invierno de 2018, dijo:

"He perdido mi respeto por esa organización, por su cuerpo de coaches y por todo el mundo ahí"
Los Yankees de Nueva York, que liderados por el jardinero novato Aaron Judge, han impartido justicia a su placer por dos meses, también tuvieron sus confrontaciones, pero con los árbitros.

El 12 de mayo, el árbitro del plato Adrian Johnson expulsó a Chase Headley, después de señalar al rostro del antesalista de Nueva York, quien se quejaba de haber sido golpeado por un pitcheo mientras intentaba un toque en la séptima entrada y de algunos pitcheos que consideró estuvieron fuera de la zona de strike en los turnos anteriores.

Headley bateó .232 con tres jonrones en los primeros dos meses de la temporada y .254 con 34 jonrones en sus primeros 400 partidos con los Yankees y pese a que su contrato de $52 millones de dólares cubre hasta el 2018, cada día crece más el rumor de que Nueva York podría subir al súper prospecto venezolano Gleyber Torres para encargarse de la esquina caliente.

El 20 de mayo de Mayo en el Tropicana Field, en medio de una de las pocas malas rachas prolongadas que ha sufrido Nueva York este año (habían perdido siete de sus últimos 10 juegos) el árbitro principal Scott Barry expulsó al manager Joe Girardi y al coach de pitcheo Larry Rothschild. Girardi también había sido sacado del juego el día anterior para totalizar 37 expulsiones en su carrera, incluyendo 34 como manager (32 con los Yankees y 2 con Marlins de Miami).

El jardinero dominicano José Bautista, quien durante los playoffs del 2015 realizó uno de los lanzamientos de bate después de un jonrón más famosos de la historia, repitió la dosis tras pegar un cuadrangular en la octava entrada contra los Bravos de Atlanta el 17 de mayo en el Sun Trust Park en un partido que los locales ganaban 8-3.

Cuando Bautista llegó al plato pidió excusas al receptor Kurt Suzuki, pero de todos modos las bancas se vaciaron. Bautista, quien solamente bateó un jonrón en abril y tenía cinco antes de enfrentar al relevista Eric O´Flaherty, quiso expresar su alegría por hacer un buen contacto, pero los Bravos no lo vieron de esa manera. Al día siguiente, el colombiano Julio Teherán golpeó a Bautista en su primer turno y el veterano aceptó el castigo sin quejarse.

Don Mattingly, quien dirigió a Dodgers de Los Ángeles por cuatro temporadas antes de irse a Miami en 2016, tuvo un encontronazo con su ex equipo el 19 de mayo en Dodger Stadium, después que el pitcher Ross Stripling, de Los Angeles, lanzara por detrás del poderoso bateador Giancarlo Stanton en la novena entrada, en respuesta a un pelotazo de AJ Ramos a Brett Einer en el cierre de la octava.

Cuando las bancas se vaciaron y los miembros de Marlins y Dodgers se confundieron en el medio del diamante, el mayor jaloneo lo protagonizaron Mattingly y el coach de la banca de los Dodgers, Bob Geren.

Pero con todo lo emocionante que pueda resultar una discusión entre dos señores maduros, la verdadera controversia de mayo se produjo el lunes 28 durante las celebraciones de "Memorial Day" entre el jardinero Bryce Harper, de los Nacionales de Washington, y el relevista Hunter Strickland, de los San Francisco Giants.

Strickland, aparentemente todavía molesto porque Harper le pegó dos cuadrangulares durante la postemporada del 2014, aterrizó una recta de 98 millas por hora al cuerpo de Harper en el primer lanzamiento que le hace en serie regular y la primera vez que lo encuentra en un terreno en tres años.

Harper lanzó su casco erráticamente al lanzador y luego fue al montículo para una pelea corta, pero memorable. Incluso, algunos analistas opinaron que el choque Harper-Strickland tuvo más atractivo que la reciente pelea entre los boxeadores mexicanos Saúl-El Canelo-Alvarez y Julio César Chávez hijo.

La oficina del comisionado castigó a Strickland con seis partidos de suspensión y a Harper con cuatro. Ambos apelaron la decisión y a Harper, un candidato al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional este año, le rebajaron un encuentro.

Gigantes y Nacionales se enfrentarán otra vez en el fin de semana del 11 al 13 de agosto en el Nationals Park y lo más probable es que la serie sea promovida como la pelea del siglo o algo por el estilo.