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7 agentes libres que deberían firmar con su mismo equipo

Las gerencias sacan sus cuentas y en dependencia de lo que digan los números, así se mueven en el mercado.

Desde que en la década de los setentas surgió la figura del agente libre, los equipos enfrentan la pérdida cada año de valiosos peloteros a quienes no pueden pagarle su valor real en el mercado.

Pero hay algunos que los dueños y ejecutivos deberían hacer el máximo esfuerzo por conservarlos, sí o sí, en unos casos por lo que representan dentro del equipo y en otros, porque su valor monetario no es tan alto como para dejarlo pasar.

Marwin González (Astros de Houston)

En el 2017, los Astros ganaron por primera vez en su historia la Serie Mundial y el venezolano José Altuve fue elegido como el Jugador Más Valioso de la Liga Americana.

Eso habrá sido en la Liga Americana, porque dentro del equipo, el verdadero jugador más valioso fue su compatriota Marwin González.

Su capacidad para jugar posiblemente como nadie en casi todas las posiciones lo hacen una pieza de lujo.

El jugador de 29 años comenzó al menos 19 juegos en cuatro posiciones diferentes esta temporada, lo que le dio al manager A.J. Hinch la posibilidad de descansar a la mayoría de sus peloteros.

Houston no le ofreció oferta calificada, pero debería intentar firmarlo por al menos tres campañas más.

Craig Kimbrel (Medias Rojas de Boston)

Los Medias Rojas le ofrecieron la oferta calificada a Kimbrel para traerlo de vuelta en el 2019.

Ahí se equivoca Dave Dombrowski, pues Boston debería firmarlo con un contrato multianual.

Aunque este costará dinero, estamos hablando del mejor cerrador de todo el béisbol en lo que llevamos de esta década, con 333 rescates en nueve campañas y con apenas 30 años de edad.

Para que se tenga una idea de qué significa esto, basta decir que el panameño Mariano Rivera, el más grande relevista de la historia, alcanzó los 300 salvados a los 34 años.

Adam Jones (Orioles de Baltimore)

Ha sido el corazón, el alma y el rostro de la franquicia durante la última década, así que aunque está entrando con 33 años en decimocuarta temporada, ¿qué mejor jugador está allí para ayudar a liderar un equipo joven y en reconstrucción?

Además, claramente le gusta en Baltimore, pues rechazó la oportunidad de ser cambiado a un contendiente este verano.

Es cierto que su poder disminuyó drásticamente, al conectar solamente 15 jonrones, luego de siete campañas seguidas con al menos 25 bambinazos, pero el resto de los principales indicadores ofensivos se mantuvieron estables, según su trayectoria.

Wade Miley (Cerveceros de Milwaukee)

El zurdo Miley se perdió más de dos meses por una lesión en los oblicuos esta temporada, pero cuando regresó la pelota, lanzó bastante bien para los Cerveceros, con los que tuvo marca de 5-2 con efectividad de 2.57 en 16 aperturas.

Esto le permitió recuperarse de dos campañas consecutivas con efectividad de más de 5.00 y luego brilló en la postemporada, con promedio de limpias de 1.23 en 14 entradas y dos tercios.

Freddy Galvis (Padres de San Diego)

El venezolano Freddy Galvis jugó los 162 juegos por segunda temporada consecutiva, proporcionando estabilidad en el campocorto para San Diego.

Y también por segundo año seguido estuvo entre los finalistas al Guante de Oro de su posición en la Liga Nacional.

El dominicano Fernando Tatis Jr. es el prospecto número uno de San Diego y dos en todas las Grandes Ligas e incluso si en el 2019 está listo para hacerse cargo del campocorto, Galvis aún podría desempeñar un importante papel por su versatilidad.

Nelson Cruz (Marineros de Seattle)

Para el dominicano Nelson Cruz, la edad es solo un número, pues a los 37 años sigue siendo uno de los bateadores de poder más consistentes de todo el béisbol.

En el 2018 despachó 37 vuelacercas y desde el 2014 hasta la fecha acumula 204, más que cualquier otro toletero en ese lapso, incluido Giancarlo Stanton.

Se dice que los Marineros van a limpiar la casa lo más posible para el 2019, pero dejar ir a Cruz les representaría un hueco demasiado grande en el medio de su alineación.

Jonathan Lucroy (Atléticos de Oakland)

Los Atléticos siempre están en renovación, para, de tarde en tarde, llegar a los playoffs e irse en las primeras rondas.

No se sabe si Billy Beane, el flamante ganador del premio Ejecutivo del Año, busque al menos repetir la actuación del 2018, pero en cualquier opción, Lucroy debe ser quien esté detrás del plato en Oakland.

Sean Murphy, el mejor prospecto de esa posición dentro de la organización de los Atléticos, tuvo solo ocho turnos al bate en Triple-A, nivel al que fue promovido a final de temporada.

La receptoría es la posición que más tiempo toma para madurar, así que un pacto de dos años para Lucroy sería provechoso, a la espera de que Murphy esté listo.