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Los Dodgers están probando algo de la postemporada

LOS ANGELES - Los Dodgers de Los Angeles ya parecen estar en modo de playoffs, donde las carreras son escasas y con frecuencia los partidos se deciden en la parte final.

Los duelos de lanzadores han sido la norma en los primeros dos juegos de la serie importante ante los Gigantes de San Francisco, y se espera más de eso el miércoles en la noche cuando el abridor de los Dodgers Kenta Maeda se mida a Matt Moore de los Gigantes.

El martes, no fue un abridor zurdo el que le dio problemas a los Dodgers, sino el derecho Johnny Cueto, quien lanzó hasta que no pudo más. Cueto salió por una dolencia en la ingle izquierda, tras trabajar en 5 1/3 sin permitir anotaciones en la eventual victoria de San Francisco 2-0. Una noche antes, el as de los Gigantes Madison Bumgarner laboró por siete episodios, aunque los Dodgers se sublevaron en la novena entrada para llevarse la victoria 2-1.

Para aquellos que rebosan confianza, los Dodgers han estado cabeza con cabeza ante sus rivales Gigantes esta semana en una atmósfera de playoffs, ante dos lanzadores con muchos logros, ganando uno de ellos y en posición de ganar el otro. Para aquellos más excépticos, los Dodgers no han hecho lo suficiente ante una aguerrida escuadra de los Gigantes.

Luego del partido final de la serie el miércoles, más optimistas podrían ser pesimistas o más pesimistas podrían ser optimistas. Esa es la manera en que esto opera en esta época del año.

Lo que quizás parece más importante, es que los Dodgers se están viendo forzados a lidiar desde ya con la gran cantidad de emociones que llegan con el béisbol de octubre. Como funcionan los entrenamientos primaverales para la temporada regular, los Dodgers están ahora en una especie de preparación de playoffs esta semana ante los Gigantes, con su estadio lleno hasta los bordes y con las emociones brotando por doquier.

Y mientras la intensidad ciertamente se ha incrementado en los últimos tiempos, a muchos les gustaría creer que los Dodgers han estado jugando con una mentalidad como si estuvieran contra la pared desde hace algún tiempo.

"Se siente como que hemos estado jugando así desde el inicio de la segunda mitad, tratando de cortar deficit en la tabla de posiciones", dijo el receptor de los Dodgers Yasmani Grandal. "Todo el mundo está intentando llegar a la postemporada. Los partidos van a ser cerrados. Nadie te va a regular nada, así que uno tiene que hacer las cosas uno mismo. La clave es ganar cada serie, y si hacemos eso seremos campeones divisionales y estaremos en los playoffs".

Antes de la actual serie ante los Gigantes, los Dodgers pasaron por otra gran prueba con una gira de 10 partidos como visitantes ante los Marlins de Miami, Yankees de Nueva York y Diamondbacks de Arizona. Los rivales divisionales Diamondbacks quizás ya se hayan dado cuenta del hecho de que no van a llegar a la postemporada este año, pero aun así probaron ser un rival duro de roer durante cuatro partidos.

Los Dodgers jugaron para 5-5 en esa gira - nada que provocara que los proclamáramos listos para lo que viene por ahí, pero por supuesto esos eran partidos como visitantes. Y un record de .500 en 10 partidos de postemporada no significaría necesariamente la eliminación sino en cambio un déficit de 3-2 en la SCLB si las victorias y las derrotas se colocaran de forma correcta. No es un escenario ideal, especialmente sin ventaja de localía en la serie, pero así es la vida.

Ahora metan a dicha ecuación algunos partidos locales y a los Dodgers les gustaría pensar que el béisbol que ellos están jugando ahora podría ser el preludio de un pico en su actuación en octubre. Las pasadas dos semanas han sido lo más cerca que los Dodgers pueden utilizar para duplicar el béisbol de octubre.

"Lo es; se siente como béisbol de playoffs con cerca de 15 jugadores adicionales (en el roster)", dijo el manager de los Dodgers Dave Roberts. "Pero la intensidad, la magnitud (de la serie contra los Gigantes), ciertamente hay un sentido de eso".

Por supuesto, el punto de Roberts es que con un roster de 36 jugadores él puede dirigir estos partidos un poco diferente a como manejaría en octubre con sus 25 mejores jugadores. Sin embargo, esos jugadores que están en los bordes saben que Roberts tiene la tarea de seleccionar los mejores de esa parte de su roster ahora mismo.

Esos jugadores saben que cualquier cosa menos que un béisbol de alta calidad en estas últimas dos semanas los dejaría viendo los partidos de playoffs por televisión. Y si hay una cosa que Roberts ha demostrado en su temporada inaugural como manager es que a él le gusta utilizar todo su roster.

Jugadores como Andrew Toles y Grant Dayton parece que han dejado en claro sus argumentos para ser incluidos en los playoffs. Julio Urías ha mostrado que puede ser una opción seria para el bullpen. José De León quiere demostrar que si se necesita un cuarto abridor en postemporada, él puede ser ese lanzador.

Y entonces está la meta continua de que Clayton Kershaw y Rich Hill alcancen su mejor forma para la postemporada. Kershaw lanzó 88 pitcheos en su última salida y solo parece que está trabajando en su puntería desde que volvió de la lista de lesionados. Hill hizo 77 lanzamientos el martes y su salida fue más producto de la circunstancia de la situación con su puesto en la alineación ya que los Dodgers necesitaban más ofensiva.

El ritmo parece acelerado, pero ambos lanzadores deben estar a toda su capacidad al llegar el 7 de octubre, cuando podría ser el primer día de la Serie Divisional de la Liga Nacional. Y luego que Kershaw se perdiera 75 días (lesión en la espalda baja) y Hill se perdiera seis semanas (problemas de ampollas), sus brazos deben estar frescos, asumiendo que nada más les afecte físicamente.

Es posible que los Dodgers vigilen el problema de ampollas de Hill de entrada en entrada, pero el zurdo dice que él solo está enfocado en ejecutar sus lanzamientos.

"Ha sido una temporada muy loca con algo de tiempo fuera para luego volver a juego", dijo Hill. "Yo pienso que ya contesté algunas preguntas cuando la gente se sorprendió de que pudiese volver a lanzar a pesar de no haber hecho salidas de rehabilitación. Pienso que es algo que de momento se presenta la ocasión y la ocasión provoca que uno se levante y luzca lo mejor posible".

Ciertamente parece que Hill está listo para lo que viene. ¿O es que lo que viene está listo para darle la bienvenida a Hill?

¿Y cuán cerca está Kershaw de sentirse como él mismo? Esa es realmente la pregunta más grande que rodea a los Dodgers en estos días fuera de en cuál día podría asegurar su boleto a la postemporada.

"Es una buena pregunta; pienso que depende del día", dijo Kershaw. "Pienso que en Nueva York (el pasado miércoles) me sentí muy bien físicamente. En cuanto a repertorio, todo estaba saliendo como yo quería que saliera. (El lunes) no fue así, pero pudo haberse debido a que no vas a poder estar en tu mejor forma cada vez. Fisicamente, me siento bien, no tengo quejas. El brazo se siente bien, la espalda está bien, asi que quizás sea un día en el que no tienes tu mejor repertorio".

Pero eso no significa que el lunes no haya tenido sus cosas positivas.

"Al llevar conteos de pitcheos altos, me aseguro que mi cuerpo se pueda recuperar, y me siento bien, así que son cosas positivas", dijo Kershaw. "Pude batallar (en la salida del lunes), lo que fue bueno también".