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Yon de Luisa y la eutanasia silenciosa de Kuri

LOS ÁNGELES -- Fidel Kuri Grajales amenazó que este lunes arremetería contra la FMF y la Liga MX con artillería pesada.

Documentos, grabaciones, testimonios, denuncias. Y verbo, mucho verbo. No hubo tal embestida hasta el cierre de este texto.

Versiones en la Ciudad de México aseguran que el dueño de Veracruz entregó su arsenal a un medio capitalino. Yon de Luisa, aseguran, ordenó sofocar la metralla.

Y el lunes transcurrió sólo con los ecos de Kuri tratando de cubrir de verborrea el cataclismo de 9.2 grados en la escala de Tuzos. Kuri no se manda solo, también hay quien le pegue un grito. Y lo hizo.

Reclama el escualo mayor que la FMF le adeuda los pagos por los tres jugadores peruanos cedidos por Veracruz a la Copa del Mundo, unos 440 mil dólares, y que exigirá ese dinero.

La realidad, según diversas fuentes, es que la Comisión de Controversias de la FMF pidió que ese dinero que correspondía a Veracruz, se retuviera para cubrir parte de los adeudos que tiene con jugadores, técnicos y hasta con la propia Liga Mx.

De Veracruz reportan que Kuri prepara la contraofensiva. Socios políticos y financieros lo asesoran, ojo, sin querer hacerlo, porque incluso le recomiendan que venda al equipo.

Pero Kuri está dispuesto a librar la batalla fuera de la cancha, porque dentro de ella, ya la perdió. Y se va quedando solo. Yon de Luisa lo va aislando. Como a un leproso. Eutanasia no pedida.

Robert Dante Siboldi renunció este lunes a Veracruz. Tal vez lo hace resignado, además, a que ya no recibirá ni un centavo de los salarios caídos. Ya el 9-2 es un estigma, una cicatriz imborrable.

Antes, Mario Trejo también había abandonado el acuario gobernado por Kuri, harto del ejercito de pirañas, que infestan las redes sociales, las oficinas, los vestuarios, con la obligación de comadronas eficientes y chismorrear detalle, cierto o no, que se considere subersivo.

Se dice que Carlos Salcido fue enviado a la banca, porque se le ocurrió imprecar a Kuri respecto a sueldos atrasados. Arregló por poco dinero, muchísimo menos que en Chivas, y al final termina jugando por nada.

La historia del futbol mexicano ha estado poblada de dirigentes indeseables, por desafiar los intereses de la FMF. Algunos de manera sana, otros de forma mercenario, y otros más, pensando que pueden manejar el futbol como se manejan en el baño de su casa.

Uno de los primeros rebeldes, visionario por cierto, fue Armando Presa, empresario y propietario de los Atletas Campesinos de Querétaro.

Se le ocurrió colocar en sus camisetas, por entonces libres de publicidad en los equipos de México y casi en el mundo, un tractor para promocionar su franquicia con una empresa fabricante de estos artefactos.

Rafael del Castillo, el gestor de los fatídicos y fatalistas cachirules, doctor en Derecho por cierto, se ensañó hasta lograr que el empresario queretano se deshiciera del equipo, por presiones directas de sus jefes, Guillermo Cañedo y Emilio Azcárraga Milmo.

Pero, por ejemplo, la FMF no se atrevió nunca a proceder cuando Jacinto Lloret, empresario tapatío, fue despojado con armas con cartucho cortado sobre su escritorio, del equipo Jalisco, por terror hacia el poder político y en los submundos del nuevo propietario.

Y claro, en otra ocasión, el sistema de control total del futbol mexicano aplastó sin piedad ni decoro a Emilio Maurer, refundiéndolo en la cárcel, apoyado en documentos que lo dejaban mal parado tras una auditoria interna y otra externa.

Aquí, lo curioso, es que Maurer era el vicepresidente de la FMF, pero al presidente, Francisco Ibarra García de Quevedo, alias El Cuico, ni lo molestaron, como tampoco a Guillermo Lara, cuyo nombre aparecía con tenebrosa frecuencia en la investigación.

Y claro, al relevo entró Marcelino García Paniagua, por entonces presidente de Chivas, para vivir una segunda gestión al frente de la FMF. Él mismo le quitó los derechos de televisión a la empresa que hoy es TV Azteca, para restituírselos a Televisa.

Hoy, Kuri asegura que es acosado, perseguido, azuzado, descarnadamente. Puede ser. Hay una confrontación de situaciones: él ha perpetrado tantas irregularidades que ya debería haber sido echado, hace años, del futbol profesional.

Pero, Decio de María nunca se atrevió. Le tuvo, le tiene y le tendrá miedo a Kuri. Yon de Luisa ha sido más cuidadoso de las formas.

Es tan maquiavélicamente perfecto, tan exquisitamente minucioso, que Yon de Luisa le está ayudando a Fidel Kuri a practicarse la eutanasia, claro sin que éste lo sepa y sin que siquiera la haya pedido.