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King Ryan derriba tres veces al campeón superligero Devin Haney y sorprende al mundo

Ryan García superó a Devin Haney que no pudo preservar su condición de campeón mundial superligero del CMB.


El estadounidense Ryan García superó por decisión mayoritaria a Devin Haney que no pudo retener su cinturón de campeón mundial superligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en la pelea estelar de una cartelera efectuada este sábado en el Barclays Center de Brooklyn, New York.

García recibió el beneplácito de dos jueces 114-110 y 115-109, mientras que el tercero lo vio empate 112-112.

"Vamos chicos, relamente pensaron quee yo estaba loco", gritó Ryan después de la victoria más importante de su carrera. Tres derribos hicieron la diferencia en una pelea muy cercana.

Con la victoria, García mejoró su récord profesional a 25-1-0, 20 KO's y desempató la rivalidad que le une a Haney, puesto a que ambos habían peleado seis veces en las filas amateurs y dividido honores 3 por 3. García no pudo agenciarse el cinturón porque no pudo dar el peso de 140 libras en la ceremonia de pesaje del viernes.

Haney no solo perdió el cinturón en su primera defensa, también perdió su balance invicto (31-1-0, 15 KO's).

Haney era un favorito de -900 a principios de semana, según ESPN BET, pero cerró en -575. García fingió beber una cerveza en el pesaje del viernes y le pagó a Haney más de $600,000, dijeron fuentes a ESPN, como parte del acuerdo para que la pelea continuara.

Un día antes, García hizo una apuesta con Haney y acordó pagarle 500.000 dólares por cada libra que pesara por encima de 140. Haney dijo más tarde que García cumplió la apuesta, lo que significaría que García le pagó a Haney un total de 1.5 millones de dólares.

Luego, en el primer minuto de la pelea del sábado por la noche, en un presagio de lo que estaba por venir, García fue quien hizo pagar a Haney con un desgarrador gancho de izquierda que sacudió al campeón.

Haney se recuperó rápidamente y superó a García en los siguientes cuatro asaltos. Incluso hizo tambalear a García en el tercer asalto con una mano derecha mientras García boxeaba con el pie trasero y buscaba otro gancho de izquierda que cambiaría la pelea.

García, de 25 años, lo encontró en el séptimo asalto cuando derribó a Haney, la primera vez que Haney ha estado en la lona en 32 peleas profesionales, solo que García no aprovechó. Momentos después de la caída, mientras la multitud estallaba, García aplastó a Haney, de 25 años, con una derecha en el contraataque y el árbitro Harvey Dock le dedujo un punto.

Lo que debería haber sido una ventaja de dos puntos para García quedó anulada.

No importó.

García derribó a Haney nuevamente en el décimo asalto, esta vez con una tremenda mano derecha, el mismo golpe que usó para hacer tambalear a Haney en el sexto asalto.

En el siguiente asalto, García volvió a conectar su golpe de dinero, un gancho de izquierda en contra que puso los ojos en blanco a Haney cuando fue lanzado hacia atrás. De alguna manera, Haney volvió a levantarse, con las mejillas muy hinchadas y la boca ensangrentada.

García intentó terminar, pero Haney pudo evitarlo y escuchó la campana final en una de las peleas más sorprendentes y dramáticas de los últimos tiempos.

Información de Mike Coppinger fue utilizada en este reporte.