NEW YORK -- Ian Book regresó a la alineación titular para el N° 3 Notre Dame y lanzó para 292 yardas y dos touchdowns en la paliza del Fighting Irish sobre el N° 12 Syracuse, 36-3, este sábado en el Yankee Stadium para mantenerse en la contienda por un boleto al College Football Playoff.
El Fighting Irish mantuvo a Book fuera del partido de la semana pasada en casa contra Florida State por una lesión en la costilla y no se le extrañó ya que Notre Dame (11-0, N° 3 CFP) brilló con Brandon Wimbush como su mariscal de campo.
Notre Dame quería ser precavido con Book antes de su viaje al Bronx para enfrentar al explosivo Syracuse (8-3, N° 12 CFP). El mariscal de campo Junior, quien asumió la titularidad al cuarto juego de la temporada, lució bien en su regreso.
El ataque terrestre del Irish se estancó la mayor parte del día, pero sus pases cortos e intermedio compensaron eso. Notre Dame, que jugó con un uniforme a rayas como tributo a los residentes habituales del estadio que tuvo una asistencia de 48,104 espectadores, se pusieron 7-0 en su segunda posesión con un pase de 9 yardas de Book a Dexter Williams.
Que el Fighting Irish jugara un partido tan importante lejos de South Bend, Indiana, no cayó bien en la mayoría de sus aficionados. Incluso el entrenador en jefe Brian Kelly dijo que no era ideal.
Además de la ansiedad de jugar un partido tan importante tan tarde en la temporada lejos de casa estaba que el equipo de Syracuse está teniendo su mejor temporada en más de una década.
Sin embargo, no había nada de qué preocuparse. El partido colegial más importante que se juega en el Yankee Stadium desde que el N° 1 Army y el N° 2 Notre Dame empataron 0-0 en 1946 estuvo muy lejos de ser un gran partido.
Sólo algunos problemas ofensivos en la zona roja del Irish en la primera mitad mantuvieron el partido cerca con el Orange jugando la mayor parte sin su mariscal de campo estelar Eric Dungey.
Dungey salió en el primer cuarto por una lesión. El pasador corrió hacia el centro de la defensiva del Irish para ganancia de 4 yardas, se levantó y se estaba preparando para la ofensiva sin reunión del Orange para la siguiente jugada cuando cayó al suelo.
El mariscal se tocó su espalda baja y estuvo en el pasto hasta que el cuerpo médico lo atendió. Salió caminando lentamente hacia el vestidor para ya no volver.