Eagles y 49ers perdieron el invicto de forma similar en sus visitas a Jets y Browns, respectivamente, mientras que los Lions se afianzan como contendientes, los Bills sufren ante los Giants y los Texans confirman su ascenso.
La Semana 6 marcó el fin de los equipos invictos en la temporada 2023-24 de la NFL y, además, ambos cayeron en circunstancias similares.
Todo comenzó el jueves pasado con la victoria de los Kansas City Chiefs sobre los Denver Broncos y el domingo inició con el triunfo de los Baltimore Ravens sobre los Tennessee Titans en Londres, Inglaterra, para después dar paso a las sorpresas.
Los San Francisco 49ers y los Philadelphia Eagles cayeron por primera vez en la campaña al chocar con los muros que les pusieron los Cleveland Browns y los New York Jets, respectivamente, mientras que otros equipos, como los Cincinnati Bengals y los Detroit Lions, confirmaron sus ascensos.
Echemos un vistazo a lo más relevante del domingo en la NFL.
Lions
Los Detroit Lions construyeron la victoria en Tampa Bay con paciencia, pero con paso firme y con un Jared Goff que cada vez luce como el quarterback que todos esperaban que fuera cuando fue reclutado como la primera selección global del draft de 2016 al completar 30 de 44 pases para 353 yardas y tres touchdowns y sin forzar envíos y que supo dirigir a su ataque pese a perder al corredor David Montgomery quien abandonó el duelo en la primera mitad por una aparente lesión en las costillas.
A su vez, los Lions usaron como base para el triunfo el dominio en la línea de scrimmage al tener éxito en 9 de 13 conversiones de tercera oportunidad. De hecho, hasta la mitad del último cuarto, habían convertido nueve de 13 y anularon a los Buccaneers en esas situaciones clave para dar continuidad a las series ofensivas.
Próximo juego: en Baltimore (domingo, 1 pm ET)
Buccaneers
El juego ante los Lions resultó ser un mejor parámetro para saber cuál es la realidad de los Tampa Bay Buccaneers que a la inversa.
Los Buccaneers se vieron inofensivos e indefensos en conversiones de tercera oportunidad al ser dominados por Detroit en esa categoría a ambos lados del balón. Al ataque, Tampa Bay tuvo 12 intentos de conversión y sólo pudo lograr dos. Además, Baker Mayfield trabajó bajo presión constante y cuando pudo lanzar el balón, perdió la oportunidad de conectarse en tres ocasiones con receptores que ya habían vencido su marca en pases largos.
La derrota en casa ante Detroit es una lección que puede resultar valiosa en el mediano y largo plazo para unos Buccaneers que están en una NFC Sur débil.
Próximo juego: vs. Atlanta (domingo, 1 pm ET)
Eagles
Los Philadelphia Eagles ya habían coqueteado con el desastre y no pudieron evitarlo en su visita al MetLife Stadium, donde se encontraron con una sólida defensiva que expuso lo limitado que puede ser el ataque encabezado por Jalen Hurts si anulan su aspecto más poderoso, el juego terrestre.
Hurts, quien sufrió tres intercepciones, la última la más costosa al lanzar el ovoide a un receptor entre dos defensivos y que resultó en el touchdown que sentenció la primera derrota de los Eagles, pudo escapar de la presión en varias ocasiones, pero batalló ante la cobertura por zona de los Jets, ante la que sólo pudo completar el 52 por ciento de sus pases con dos intercepciones.
Próximo juego: vs. Mami (domingo, 8:20 pm ET)
Jets
Ocho intercepciones y tres pases de touchdown. Esa es la cuota de la defensiva de los New York Jets ante Josh Allen, Patrick Mahomes y Jalen Hurts, los tres quarterbacks con más votos para MVP la temporada pasada, pero ese balance es sólo el resultado de la presión, incomodidad y golpes que le han dado a esos pasadores.
Ante los Eagles, la defensiva de los Jets no contó con sus mejores esquineros, Sauce Gardner y D.J. Reed, y logró presionar a Hurts en 20 ocasiones y, además, permitió sólo 80 yardas por tierra.
Lástima que no le quedan muchos juegos a los Jets ante equipos con quarterbacks de élite.
Próximo juego: en N.Y. Giants, domingo 29 de octubre, 1 p.m. ET)
49ers
Las lesiones respetaron en las primeras semanas de la temporada regular, pero una vez que aparecieron, los San Francisco 49ers no pudieron compensarlas y perdieron el invicto en 2023.
Desde que perdieron a Deebo Samuel en el primer cuarto por una aparente lesión en el hombro, los 49ers comenzaron a tener problemas a la ofensiva, luego de anotar en su primera serie con un pase pala (shovel pass) de Brock Purdy a Christian McCaffrey, quien dejó el juego en el cuarto periodo por una dolencia en el abdomen. Fue desde ese punto que el ataque de San Francisco, literalmente, se desinfló.
Sin su mejor corredor y a pesar de que los Browns anularon la posibilidad de que recurriera a George Kittle y lo presionaron con frecuencia, Purdy puso a los 49ers en posición de ganar el juego, pero la falla del novato pateador Jake Moody en el intento de gol de campo de 41 yardas sentenció su primera derrota del calendario.
Próximo juego: en Minnesota (lunes 23 de octubre, 8:15 pm ET)
Browns
Los Cleveland Browns le jugaron al tú por tú al que, quizá, es el equipo más físicamente exigente y dominante y ganaron la partida con una defensiva que incomodó, no sólo a Purdy sino a todos los jugadores de habilidad de los 49ers.
En una sórdida lucha defensiva, los Browns usaron coberturas personales en el 71 por ciento de las jugadas ofensivas de San Francisco y permitieron sólo 215 yardas totales.
A la ofensiva, PJ Walker fue interceptado un par de veces, lo que puede esperarse de un quarterback suplente cuando enfrenta a una de las mejores defensivas de la liga, pero tuvo buenos momentos cuando buscó y se conectó con Amari Cooper, en particular, cuando el receptor se desmarcó y atrapó un envió para una ganancia de 58 yardas.
Próximo juego: en Indianapolis (domingo, 1 p.m. ET)
Saints
Inconsistencia es el nombre de la ofensiva de los New Orleans Saints, que mostraron chispazos de eficiencia en Houston, pero no mucho más que eso.
La ofensiva de los Saints llegó tres veces a la zona roja y terminó con las manos vacías, incluido uno de los dos intentos de gol de campo de Blake Grupe, luego de que Derek Carr llevó a su ataque a la yarda 11 de Houston. Además, New Orleans falló las dos conversiones en cuarta oportunidad que intentaron.
Las buenas noticias para los Saints son que juegan en la NFC Sur, una de las divisiones más débiles de la NFL, y que los Buccaneers y Falcons también perdieron.
Próximo juego: vs. Jacksonville (jueves, 8:15 p.m. ET)
Texans
Habrá que tomar cada vez más en serio a los Houston Texans del coach DeMeco Ryans y del quarterback novato C.J. Stroud, quien completó cuatro de siete envíos de 15 o más yardas (57 por ciento) para 117 yardas ante una defensiva que llegó al juego con el tercer porcentaje más bajo permitido (29 por ciento) en esa categoría en la NFL.
La defensiva de los Texans juega cada vez mejor y al grupo se le nota la personalidad agresiva y consistente que tuvo Ryans como jugador, lo que se reflejó en las intensa presión que aplicaron sobre Derek Carr, a quien lograron presionar en 19 ocasiones y quien en esas circunstancias completó sólo seis de 17 pases con una intercepción y dos capturas.
Próximo juego: en Carolina (domingo 29 de octubre, 1 p.m. ET)
Giants
Los New York Giants hicieron entretenido un juego en el que la expectativa era que perderían fácilmente, sobre todo por no contar con varios titulares, incluido el quarterback Daniel Jones, pero malas decisiones en momentos clave evitaron que fueran protagonistas de otra sorpresa.
Los Giants forzaron dos pérdidas de balón de los Bills y aunque contar con Saquon Barkley le inyecta energía, su ataque es limitado, lo que se reflejó en sólo los dos goles de campo que consiguieron en cinco incursiones en zona roja, incluida su última posesión de la primera mitad, en la que, sin tiempos fuera y en la yarda 1 de Buffalo con menos de 10 segundos en el reloj, decidieron correr, lo que hizo que se agotara el tiempo.
Próximo juego: vs. Washington (domingo, 1 p.m. ET)
Bills
Por segunda semana consecutiva, los Buffalo Bills tuvieron un inicio lento de juego, pero en esta ocasión sí pudieron recuperarse, gracias a su defensiva y a que enfrente tuvieron a unos Giants limitados por las lesiones, incluida la de su quarterback titular, y que cometieron un grave error en el manejo del reloj al final de la primera mitad, cuando estaban a una yarda de anotar.
Mientras la defensiva de los Bills lograba contener a los Giants, Josh Allen logró recomponer el camino para aprovechar el apoyo del otro lado del balón. Luego de completar ocho de 18 envíos y sufrir una intercepción en la primera mitad, Allen completó 11 de 12 envíos para dos touchdowns en la segunda.
Próximo juego: en New England, domingo, 1 p.m. ET)
ESPN Stats & Information contribuyó a este reporte.