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Un vistazo a ocho de los corredores más notables para el draft de la NFL

La posición de corredor ha sufrido, a lo largo de la última media década, una fuerte devaluación cuando se trata del draft de la NFL. Solamente siete corredores fueron elegidos en la primera ronda del sorteo en los últimos cinco años, dos de los cuales se fueron en blanco.

El año pasado, hubo resultados mixtos. Todd Gurley pagó con creces lo invertido por los St. Louis Rams en la primera ronda, en camino al premio de Novato Ofensivo del Año, mientras que Melvin Gordon decepcionó durante la mayor parte de sus oportunidades con los San Diego Chargers.

Por si fuera poco, los 18 corredores reclutados a lo largo de las siete rondas del 2015 también fueron la menor cantidad para un draft en los últimos cinco años, lejos de los 29 reclutados en el 2011.

A continuación, echamos un vistazo a los ocho corredores más notables para el próximo draft, sin olvidarnos, además, de la posición de fullback.

Devontae Booker, Utah

Se trata de un corredor de tres intentos con poco kilometraje en las filas colegiales, pero interrogantes en torno a su estado de salud. Originalmente, Booker había aceptado asistir a Washington State, pero problemas académicos lo llevaron a hacer una escala de dos años y solamente una temporada de fútbol americano --2012-- en el American River College, antes de brillar por dos campañas para los Utes. Lastimosamente, Booker sufrió rotura de menisco en el décimo juego del 2015. En términos generales se trata de un jugador muy completo sin debilidades que salten a la vista, aunque tampoco posee fortalezas excepcionales en ninguna faceta del juego. Debe escuchar su nombre en la segunda vuelta del draft.

Alex Collins, Arkansas

Muy probablemente, los Razorbacks aporten dos corredores en el sorteo de este año, y Collins es el mejor de ellos, o al menos el más explosivo. El jugador de tercer año aprovechó la lesión en el pie de su compañero Jonathan Williams antes del inicio de la pasada campaña para demostrar que puede ser un corredor de tres intentos, y aunque fue su única temporada como titular de tiempo completo, rebasó las 1,000 yardas por tierra en sus tres campañas en Fayetteville. Collins tiene olfato para la zona de anotación, y mientras pierda esa costumbre de frenarse demasiado antes de atacar los huecos, estará bien. Creo que Collins pinta para la tercera ronda del sorteo, apenas por arriba de Williams.

Kenneth Dixon, Louisiana Tech

Junto a Booker, Dixon es un candidato para ser el tercer corredor seleccionado este año, a mi juicio, algo que deberá suceder en la segunda vuelta. No se le puede pedir mucho más en términos de producción a Dixon, quien culminó su carrera colegial como el segundo máximo anotador de touchdowns totales en la historia de la FBS con 72 por tierra y 15 por aire. Dixon es extremadamente versátil, y puede hacer daño en todas las facetas del juego, no solamente por aire y por tierra, sino también es efectivo tanto en situaciones de corto yardaje como a la hora de realizar jugadas de ganancias grandes. Dixon aportará gran valor al equipo que lo seleccione, lo que seguramente ocurrirá en segunda ronda.

Ezekiel Elliott, Ohio State

Sin lugar a dudas el mejor prospecto en la posición para este año, la pregunta se convierte entonces en: ¿qué tan alto se puede ir Elliott? Algunos sostienen que puede colarse al Top-5 de la primera ronda, aunque yo me inclino por la suposición que será elegido entre los turnos seis y 10. Francamente, hablamos de un corredor que lo tiene todo. Elliott posee suficiente fuerza para ser efectivo por el interior donde se ganan las yardas difíciles, pero no carece de la velocidad que se requiere para lograr grandes escapadas en campo abierto. Por si fuera poco, posee el tamaño idóneo para aguantar los bloqueos en las jugadas defensivas de carga y ha mostrado ser un recurso en el juego aéreo como receptor. Se trata del "paquete completo", y no debemos olvidar que fue Elliott la clave ofensiva del título nacional de los Buckeyes de hace un par de temporadas. Elliott llegó a la NCAA ranqueado como el corredor N° 15 a nivel nacional por Rivals --y prospecto N° 84, independientemente de la posición--, por debajo de otros estelares de esta lista como Taylor y Henry, pero hoy no cabe duda que está por arriba de ellos como prospecto de NFL.

Derrick Henry, Alabama

De un campeón universitario a otro, Henry fue la locomotora que impulsó al Tide a su cuarto título nacional en los últimos siete años, adjudicándose de paso el codiciado Trofeo Heisman. Con un estilo que depende de inicio a fin en lo físico --Henry es probablemente el corredor más grande de todos los que tienen pretensiones a ser reclutados--, no son numerosos los defensivos que gustan de un contacto franco. Aunque para Alabama consiguió algunas escapadas largas, incluyendo un touchdown de 50 yardas ante Clemson en la final del temporada pasada, esas no serán comunes al siguiente nivel, y el hecho de que algunos equipos no lo consideren un corredor de tres oportunidades --por bueno que sea en primero y segundo intento-- lo devalúa. Creo que será el segundo jugador reclutado en la posición, después de Elliott, pero no estoy tan seguro de que lo pueda acompañar en la primera vuelta.

Daniel Lasco, California

Lasco es un corredor elusivo que mostró un contraste fuerte entre su campaña del 2014 y la del 2015, lo que presentará una disyuntiva para los equipos que lo examinen. En el 2014, fue designado Jugador Más Valioso de su equipo, gracias a una campaña de destape en la que acumuló 1,115 yardas y anotó 12 touchdowns terrestres. Sin embargo, algunas lesiones de tobillo y cadera lo limitaron severamente en el 2015, aunque la realidad es que tampoco lució tan explosivo cuando se suponía estaba sano. Lasco es probablemente el mejor atleta puro de este grupo, y calculo que escuchará su nombre entre la tercera y cuarta ronda.

Keenan Reynolds, Navy

El caso de Reynolds es uno de los más interesantes de este año. Se trata de un mariscal de campo de ataque "triple-option" para los Midshipmen que acumuló, nada más, 88 touchdowns como universitario, récord absoluto para FBS. Por si fuera poco, ningún mariscal de campo acumuló más yardas por tierra en la NCAA que sus 4,559. Desde luego, no es lo mismo acarrear el ovoide cuando se tiene siempre la opción de entregar o pichar a un compañero, que ser designado desde el inicio el corredor primordial de la jugada, y sin duda Reynolds enfrenta una curva pronunciada de aprendizaje al siguiente nivel en una posición que no le es natural. Reynolds además no posee el tamaño idóneo para la NFL, pero es sumamente elusivo en el espacio reducido y nadie le tiene que decir cómo llegar a la zona de anotación. No estoy seguro de que sea reclutado, ni siquiera en séptima ronda, pero insisto en que podría ser uno de los jugadores más interesantes a seguir cuando lleguen los campamentos de entrenamiento.

Kelvin Taylor, Florida

Hijo de uno de los tres jugadores más importantes en la historia de los Jacksonville Jaguars, Fred Taylor, Kelvin Taylor arribó al alma mater de su padre en el 2013 como el mejor prospecto en la posición de corredor según ESPN300 y el séptimo mejor según Rivals, luego de imponer la marca de yardas terrestres a nivel preparatoria para el estado de Florida. No obstante, en Gainesville las cosas no salieron como se esperaba, en parte gracias a que debió compartir acarreos con Matt Jones a lo largo de casi toda su carrera universitaria. Taylor no tiene el nivel de talento de su padre, y no es el corredor más poderoso de la camada de este año. Sin embargo, posee un juego bien redondeado que incluye buenas manos para el juego aéreo, una capacidad aceptable en protección de pase y buena seguridad de balón. Calculo que escuchará su nombre entre la cuarta y sexta ronda.

Dan Vitale, Northwestern

El mejor prospecto en la posición de fullback no era en realidad un fullback puro a nivel universitario. Vitale jugaba una posición híbrida para los Wildcats donde hacía de todo un poco: bloquear, correr rutas y cargar el ovoide. Se trata de un prospecto con mucho por aprender a la hora de hacer la transición al siguiente nivel, ya sea de la posición de fullback propiamente dicho, o como ala cerrada si este termina siendo su destino de NFL, pero Vitale es el más atlético del grupo y uno de esos "jugadores de fútbol americano" que nunca sobran en un equipo. Es probable que sea reclutado entre la quinta y sexta ronda. Llama la atención que el caso de Vitale es similar al de los otros dos fullbacks que más llaman la atención este año, Glenn Gronkowski y Derek Watt, en el sentido de que fueron utilizados en diversas situaciones ofensivas, y entre las estadísticas que acumularon los tres, fueron más productivos atrapando el ovoide que corriéndolo. Ninguno de ellos es un fullback típico en el molde de un Darryl Johnston, pero las ofensivas modernas exigen una mayor versatilidad en la posición que antes, toda vez que es cada vez más raro correr descaradamente desde una formación-I en la NFL. Como en el caso de Vitale, se me haría raro que Gronkowski o Watt fueran reclutados antes de la quinta ronda, con todo y la fama vinculada a sus apellidos.