CINCINNATI -- Tyler Eifert disfrutó del viaje gratuito a Hawaii y la larga lista de eventos que precedieron al Pro Bowl de la temporada pasada. Sin embargo, el ala cerrada de los Cincinnati Bengals prometió que nunca más aparecerá en el juego de estelares luego de una extraña lesión de tobillo que lo marginó por la mayor parte de la temporada baja.
"Simplemente no lo vale", declaró Eifert.
La lesión podría marginarlo del primero o los primeros dos juegos esta temporada, aunque Eifert sigue siendo optimista que estará totalmente recuperado antes de eso.
"Todo va a salir bien", expresó Eifert, horas antes del inicio del campamento de entrenamiento de los Bengals. "No pongo un plazo para eso ni nada por el estilo. Hay una gran progresión por la que debes pasar aquí y volver a jugar. Tienes que ser visto por distintos ojos, dar diferentes pasos.
"Voy a seguir trabajando duro y controlar lo que puedo controlar y estar de vuelta tan pronto como sea posible".
Eifert se lesionó a mitad del último cuarto del Pro Bowl cuando el mariscal de campo de los Tampa Bay Buccaneers, Jameis Winston, lo voló en la parte final de las diagonales. Eifert cayó mal sobre su pie izquierdo e inmediatamente solicitó salir del partido.
"Es algo circunstancial", sentenció Eifert. "Mi pie golpeó el suelo. En realidad no lo torcí ni nada por el estilo. Simplemente tenía mis zapatos en el suelo y mi pie se dobló".
Las pruebas realizadas después del partido no revelaron un daño importante, y pruebas realizadas en Cincinnati días después también resultaron negativas. Con el descanso adecuado, se esperaba que Eifert estuviera bien a tiempo para cuando comenzaran las actividades organizadas por los Bengals en mayo.
Pero no estaba bien. Un ligamento que se desgarró en esa jugada no sanó de manera apropiada. Escondido al fondo del hueso circular dentro del pie de una persona, el ligamento está en un lugar que a menudo es difícil de desgarrar, indicaron a Eifert. Los médicos también le dijeron que la lesión, por razones desconocidas, era común en las alas cerradas.
Una vez que el descanso y rehabilitación no permitieron a Eifert estar al 100 por ciento en mayo, se sometió a cirugía. El tiempo de recuperación pronosticaba un regreso para el inicio de la temporada.
"Es una línea delgada entre que quieres apresurarte y quieres mejorar, pero tienes que averiguar por qué no está mejorando. Trabajas duro, tomas un par de días de descanso y sigue doliendo", indicó Eifert de su régimen de principios de la temporada baja. "Es cuestión de llegar al fondo de lo que está pasando".
Eifert ha estado utilizando una bota protectora las últimas seis semanas. Dejará de usarla la próxima semana y en ese momento, comenzará a probar su tobillo con movilidad y otros ejercicios de rango de movimiento.
Eifert ha podido seguir con su acondicionamiento en las últimas semanas con levantamiento de pesas en sus extremidades superiores, ejercitándose en una bicicleta estática y trabajando en la escaladora. Aunque está decepcionado por perderse el campamento de entrenamiento, no cree que tomará mucho antes de volver a su forma de mitad de temporada. El año pasado, marcaba el ritmo entre las alas cerradas de la NFL con 13 recepciones de touchdown.
"Vamos a volver", declaró Eifert. "No creo que lo hayamos perdido durante la temporada baja. Así que creo que estaremos bien".