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Desde infantiles a profesionales, el fútbol americano creció en México

La última vez que la NFL se aventuró en México fue en 2005, cuando los Arizona Cardinals vencieron a los San Francisco 49ers en el Estadio Azteca. El lunes a la noche, volverá el fútbol americano de máximo nivel al mismo escenario en Ciudad de México, cuando los Houston Texans y los Oakland Raiders se enfrenten en una competición cuyas entradas están agotadas desde el mes de julio.

Pero no debe suponerse que la brecha de 11 años está relacionada con la falta de interés. En realidad, México es el principal semillero internacional del fútbol americano, con la mayor cantidad de fanáticos de la NFL de cualquier país fuera de los Estados Unidos. Hay más fanáticos de la liga en la Ciudad de México que en la mayoría de los actuales mercados de la NFL.

Pero la popularidad del deporte en México se extiende mucho más allá del fanatismo por la NFL. Desde las ligas juveniles, que están superando en popularidad al fútbol en algunas partes del país, hasta una nueva liga profesional, el fútbol americano es un protagonista principal al sur de la frontera. Tengamos esto presente para analizar con más detalle la situación del deporte en todos los niveles de México y de qué manera los fanáticos consumen el juego.

JUVENIL
Las ligas juveniles han brotado en todo México, especialmente en la mitad norte del país, donde el fútbol americano se ha plantado con firmeza como el segundo deporte más popular después del fútbol. En la ciudad de Monterrey, al noreste de México, las ligas juveniles totalizan unos 2,000 participantes, según estimó Alex Olivas, el comisionado de CONADEIP, una de las dos principales ligas de fútbol americano universitario del país.

"En realidad, es el deporte estudiantil N° 1 de todo México", afirma Olivas.

Y el fútbol americano juvenil es tomado muy en serio. Algunos campos de juego están cubiertos con FieldTurf, el césped sintético que algunas universidades y equipos de la NFL usan. También hay programas de Pop Warner en México.

En Monterrey hay una liga juvenil que incluso usa un sistema de repetición de 300,000 dólares, que fue usado para resolver un reclamo que desempeñó un rol clave en un juego de campeonato para niños de 8 años: la decisión inicial de que un jugador había anotado fue apelada, y la repetición de la jugada determinó que se había perdido control de la pelota y la anotación no valió.

De acuerdo con Jorge Orobio, el comisionado de la Federación Mexicana de Fútbol Americano, la naturaleza comunitaria del deporte ayudó a su crecimiento. Las familias invierten dinero en equipos, viajan a presenciar los juegos y por lo general se involucran en la carrera de fútbol americano de sus hijos.

"Es como una cultura o estilo de vida", dijo Hugo Lira, entrenador del equipo universitario del ITESM, campus Puebla. "Es por eso que se ha expandido por todo el país".

Lira, que jugó como receptor abierto en la NFL Europa y participó en el campamento de entrenamiento de los Carolina Panthers en el 2005, agregó que piensa "que sería más grande de lo que es ahora", si los juegos locales se transmitieran por TV.

Orobio dijo que otra manera por la cual el deporte podría crecer aún más, sería que la NFL se involucrara en los niveles inferiores.

"Como promoción, la NFL hace bastante, plantea una gran plataforma, pero no hay un verdadero trabajo de desarrollo en México", dijo. "La promoción del fútbol americano en México ha sido excelente, pero no se ha hecho nada por desarrollarlo".

UNIVERSITARIO
El fútbol americano universitario principal de México es gobernado por dos organizaciones: ONEFA, que funciona desde 1978, y CONADEIP, una derivación que agrupa a universidades privadas, que fue fundada en 2010.

La mayoría de los juegos de fútbol americano universitario convocan entre 2,000 y 3,000 fanáticos, con algunos de los juegos más importantes atrayendo multitudes de 15,000 a 20,000. Olivas dice que ha llegado a ver hasta 40,000 espectadores, según la importancia del juego y los equipos.

El Tec de Monterrey podría ser considerado la versión mexicana del Alabama Crimson Tide. O tal vez, Alabama sea el Tec de Monterrey de los Estados Unidos. Los Borregos Salvajes han ganado 21 campeonatos nacionales, incluyendo el título de 2015 de la CONADEIP.

La calidad del fútbol americano universitario de México ha sido comparada con el nivel de la División III de la NCAA. El Tec ha enfrentado a equipos de todo Texas, obteniendo incluso una victoria en un enfrentamiento en 2009 contra Blinn College, un equipo cuyo mariscal de campo era Cam Newton.

A los jugadores mexicanos les ha resultado difícil ingresar al fútbol americano universitario de mayor nivel al norte de la frontera. El pateador de la Universidad de Colorado, Diego González, era el único mexicano nativo de nivel FBS en los Estados Unidos al comienzo de la temporada de 2016. González se inscribió en el Tec de Monterrey en su primer año de universidad, antes de ser transferido a Colorado y se convirtió en el pateador titular de los Buffaloes en 2015. Este año la suerte no lo acompañó, ya que sufrió la rotura del tendón de Aquiles en el tercer juego de Colorado, lesión por la que perderá la temporada.

PROFESIONAL
El fútbol americano profesional recién está despegando en México. La Liga de Futbol Americano Profesional, con base en la Ciudad de México, concluyó su primera temporada en abril y reportó que la concurrencia superó los 5,000 fanáticos por juego para la campaña inaugural de cuatro equipos. Cada uno de esos equipos, Mayas, Raptors, Eagles y Condors jugó seis juegos en la temporada regular, y los Mayas obtuvieron el campeonato al derrotar a los Raptors 29-13 en el primer Tazón México. La liga anunció recientemente planes para expandirse a seis equipos y aventurarse fuera de la Ciudad de México para la temporada 2017, que se iniciará en febrero.

Tal vez la LFA pueda algún día desempeñar un rol en el desarrollo de talentos aptos para la NFL. Hasta ahora, solo hubo dos jugadores nacidos en México en las listas de 53 hombres de la NFL desde 2001, según ESPN Stats & Information. Ambos eran linieros ofensivos: Rolando Cantú, que participó en un juego para los Cardinals en 2005 (convirtiéndose en el primer jugador de fútbol americano universitario de México que llegaba a la NFL), y Víctor Leyva, que jugó 10 juegos para los Cincinnati Bengals en 2002. Hubo otros mexicanos que participaron en campamentos de entrenamiento, integraron equipos de práctica y jugaron en la NFL Europa.

Históricamente, los nativos de México que tuvieron mayor impacto en la NFL han sido pateadores, notablemente Efrén Herrera, Rafael Septién, Raúl Allegre y los miembros de la familia Zendejas, Tony, Max y Luis.

FANÁTICOS
Los fines de semana de NFL en México se parecen mucho a los fines de semana de NFL en los Estados Unidos. Los fanáticos son atraídos por los juegos desde el jueves a la noche hasta el lunes a la noche. Usan camisetas. Se refuerzan las lealtades. Se especula con la formación de los equipos. Se habla sólo de fútbol americano.

"Aquí en México, la afición por el fútbol americano de la NFL es muy, muy grande", dijo Olivas. "Tenemos muchísimos fanáticos de los Cowboys, de los Steelers. Yo soy fanático de los Raiders. Aquí llegó a haber una gran cantidad de fanáticos de los Raiders".

Los bares dedicados a los fanáticos de equipos individuales están distribuidos por toda la Ciudad de México. Olivas estimó que los fanáticos de la NFL que cuentan con TV de cable, pueden llegar a ver hasta nueve juegos en una semana. Según NFL.com, nueve cadenas diferentes, entre las que se incluyen ESPN y Fox Sports Latin America, transmiten juegos de la NFL en México.

Para que los seguidores puedan desarrollar aún más su fanatismo por sus equipos favoritos, hay una tienda de la NFL en un centro de compras de Monterrey, equipada con camisetas, equipos y otra mercadería promocional.

Es solo una coincidencia, pero el feriado nacional del Día de la Constitución de México se celebra el primer lunes de febrero, que por lo general es el día posterior al Super Bowl. Eso permite que los trasnochadores disfruten del gran juego sin preocuparse por ir a trabajar al día siguiente. "Es una fiesta grandiosa", dijo Olivas acerca del domingo del Super Bowl en México.

Son comunes las fiestas grandes en las casas, con abundante cerveza y carne asada, y las compañías cerveceras auspician reuniones que atraen a cientos de fanáticos. Olivas dijo que el juego es televisado en cuatro canales diferentes, ampliando el alcance de los posibles espectadores. Como sucede en los Estados Unidos, las calles quedan desiertas en muchas ciudades y pueblos, especialmente en la mitad norte del país.

"Eso cancela mucho de lo que uno hace los domingos", comentó sobre el Super Bowl. "Todo el día está dedicado al fútbol americano".