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Jay Cutler es un error de 10 millones de dólares para los Dolphins

Los Miami Dolphins acaban de cometer un error de 10 millones de dólares.

Firmaron al agente libre Jay Cutler a un gran contrato por una campaña que no resultará en más victorias que el año pasado --ni siquiera el mismo número-- ni un viaje a la postemporada. Lo único que garantiza esta movida es que los Dolphins perdieron 10 millones de dólares en espacio bajo el tope salarial --¿se acuerdan de la extensión para Jarvis Landry?-- o para trasladar a la siguiente campaña con la esperanza ciega de que Cutler llevará a Miami a los playoffs.

Los Dolphins creen que son equipo de playoffs y realizaron una movida desesperada por Cutler luego de que Ryan Tannehill sufriera una lesión en la rodilla izquierda que probablemente lo margine por la totalidad de la temporada.

Para ahora, ustedes ya conocen la conexión: Cutler jugó un año bajo Adam Gase con los Chicago Bears en el 2015. Gase cree en Cutler quizás más que cualquier otro coach que haya tenido el quarterback en su carrera. Cutler tiró para 3,659 yardas, 24 touchdowns y 11 intercepciones en su única temporada juntos.

Los Bears también se fueron con marca de 6-10 ese año y ranquearon N° 23 por aire. ¿Hasta dónde es más alto el techo en el 2017 para Cutler, de 34 años de edad, quien ahora es dos años más viejo y viene de una lesión de hombro que borró su última campaña? Sumen el hecho de que Cutler ni siquiera contó con una temporada baja de minicampamento, actividades organizadas del equipo ni una buena porción del campamento de entrenamiento, y las expectativas deben mesurarse.

Gase es un coach inteligente con grandes cualidades en relaciones personales. Evitará que este experimento con Cutler se convierta en un desastre total. Pero un 8-8 luce como el techo para este equipo con Cutler, quien tiene una marca de por vida de 68-71 como titular. Miami debió haberse quedado con lo que tenía en casa, tirado los dados con Matt Moore y ahorrar esos 10 millones de dólares para construir la plantilla del 2018. Moore ya cuenta con el respeto de sus compañeros de equipo y entrenadores en Miami. Ese ha sido un tema con Cutler en el pasado, y necesitará tiempo para lograrlo.

La firma de Cutler es sobre vender esperanza. Pese a todas sus fallas, cuenta con uno de los brazos más fuertes de la NFL. Pero la realidad es que demasiada esperanza de Miami descansaba en la delicada rodilla izquierda de Tannehill, una que entre el mariscal de campo y el equipo decidieron no sería sometida a cirugía para ser reparada en la temporada baja. Ese fue el error fatal de los Dolphins que no puede enmascararse con este fichaje de 10 millones de dólares.

Nadie debe culpar a Cutler por tomar esa clase de dinero. Los reportes iniciales de Cutler inclinándose hacia mantenerse en la televisión parecen ahora una jugada de palanca que funcionó a su favor. Cutler decidió que 10 millones de dólares eran suficientes para dejar su empleo televisivo y jugar para un coach al que quiere.

Los Dolphins dejaron en claro desde el final de la temporada pasada que la meta era atrapar a los New England Patriots y al futuro miembro del Salón de la Fama, Tom Brady. Responder con Cutler no es la respuesta. Será una trama intrigante para seguir en Miami este año, pero no pagará suficientes dividendos en la columna de las victorias, que es la que más importa.