OXNARD -- Ahora que el corredor de los Dallas Cowboys, Ezekiel Elliott, ha sido suspendido seis partidos por violar la política de conducta personal de la NFL, veremos cuán valioso es para el éxito del equipo.
Algunos equipos creen que corredores exitosos pueden encontrarse en cualquier lado, razón por la cual la posición ha quedado devaluada a lo largo de los últimos años en el draft. Otros creen que un corredor especial puede hacer toda la diferencia.
Elliott marcó diferencias para los Cowboys en el 2016. Lideró a la NFL por tierra (1,631 yardas, 15 touchdowns) y jugó en 15 partidos. Hizo para los Cowboys la temporada pasada lo que DeMarco Murray hizo por ellos en el 2014.
En el 2015, los Cowboys optaron por no retener a Murray, quien emigró a los Philadelphia Eagles como agente libre en una sociedad que se amargó tras apenas una temporada. Los Cowboys dieron las llaves del juego terrestre a Joseph Randle, quien no pudo con la presión y fue reemplazado por Darren McFadden a los seis juegos de comenzada la temporada.
Los Cowboys finalizaron 4-12, pero la mayor parte de eso puede culparse al juego de quarterbacks, con Tony Romo perdiéndose 12 juegos por una fractura en la clavícula izquierda.
En el 1993, los Cowboys vieron cuán valioso era un corredor cuando perdieron sus dos primeros partidos durante un boicot de Emmitt Smith. Jerry Jones rápidamente firmó a Smith y los Cowboys perdieron solamente dos veces más en el resto de la campaña en camino a títulos consecutivos de Super Bowl.
McFadden, quien finalizó cuarto en la liga por tierra en el 2015 con 1,089 yardas, reemplazará a Elliott por los primeros seis encuentros. No es tan dinámico como Elliott, pero fue capaz de sumar cinco partidos de 100 yardas y dos más de al menos 90 yardas en el 2015, y lo logró con la mencionada baja de nivel en el juego de sus quarterbacks. Una fractura en el codo efectivamente lo marginó durante la campaña pasada. Acarreó el ovoide 24 veces para 87 yardas en tres encuentros.
La suspensión de Elliott también dará, probablemente, a Alfred Morris una oportunidad. Con Elliott, los Cowboys probablemente no hubieran necesitado a Morris. Para el final del programa de temporada baja y de cara al campamento de entrenamiento, Rod Smith estaba recibiendo más oportunidades que Morris en la práctica, algo que dice mucho.
Morris tuvo tres campañas al hilo de 1,000 yardas con los Washington Redskins del 2012 al 2014. Con los Cowboys la temporada pasada, sumó 69 acarreos para 243 yardas y dos touchdowns, y fue desactivado por dos encuentros.
Su experiencia podría hacerlo valioso con la ausencia de Elliott. Es mejor entre más acarreos recibe. Si McFadden falla, Morris mostró el año pasado que puede acomodarse bien con la línea ofensiva de los Cowboys.
Oh sí, la línea ofensiva. Esa es la fortaleza de los Cowboys, con los All-Pro Tyron Smith, Travis Frederick y Zack Martin. La'el Collins es el nuevo tackle derecho, reemplazando al retirado Doug Free. No están fijos en el guardia izquierdo, con Jonathan Cooper, Byron Bell y Chaz Green compitiendo por el puesto.
Aun así, los Cowboys creen que su línea estará entre las mejores del juego. Sin Elliott, debe ser igual de dominante. Y si no lo es, entonces veremos cuán valioso es Elliott para el éxito de los Cowboys.