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Si a Kirk Cousins le interesa ganar, no cualquier equipo es opción

No importa dónde firme el quarterback Kirk Cousins, y dada la atención que ha recibido su situación contractual, existe un claro mandato: Está obligado a ganar. Él lo sabe mejor que nadie. Y en toda entrevista, Cousins ha reiterado lo importante que será ganar para su decisión.

Si ese es el caso, entonces algunos equipos tienen mucho sentido mientras que otros no.

Los Minnesota Vikings encabezan la lista de los equipos que tienen mayor sentido, si es que deciden no retener a ninguno de los tres agentes libres sin restricciones de su plantilla del 2017 en la posición. La cosa es, los Vikings alcanzaron el Juego de Campeonato de la NFC (con un Case Keenum mucho menos costoso), así que las expectativas serían exageradamente altas para Cousins. Aún así, se trata de éxito sostenido a largo plazo y si los Vikings están interesados, entonces son la elección sencilla, incluso si significa rechazar ofertas más cuantiosas de otros equipos.

Los Washington Redskins no quisieron pagar a Cousins una cierta cantidad porque pensaron que dificultaría construir a su alrededor. La plantilla de Minnesota ya está construida. A los Vikings les alcanza para pagar de más a un tipo si lo consideran la pieza final, uno que pudiera ayudarlos ahora y en los siguientes años mientras se mantengan en esa ventana de oportunidad para el Super Bowl.

Los Jacksonville Jaguars también tienen sentido, dependiendo en lo que decidan hacer con Blake Bortles.

Pero hay equipos para los cuales, si firma, necesitará ayuda y esperará que la organización le pueda aportar lo necesario.

Arizona Cardinals: Los Cards tienen un nuevo entrenador en jefe en Steve Wilks. Pero también necesitan mucha ayuda y no cuentan con mucho espacio bajo el tope salarial (aproximadamente 23 millones de dólares). Existe otro problema potencial: Juegan en la NFC Oeste, la misma división donde residen dos ex entrenadores de Cousins; Sean McVay de Los Angeles Rams y Kyle Shanahan de los San Francisco 49ers. Eso no significa que Cousins no pueda jugar en Arizona y ganar, pero también disputaría cuatro partidos al año contra coaches que lo conocen mejor que nadie, y saben especialmente qué le incomoda. Cousins jugó lo suficientemente bien durante una victoria sobre los Rams la temporada pasada y lanzó para 330 yardas para derrotar a los 49ers (quienes en ese momento no tenían victoria). Pero triunfar se dificultaría.

New York Jets: Con aproximadamente 75 millones de dólares en espacio bajo el tope salarial, pueden pagarle bastante a Cousins si lo desean; pueden liberar otros 15 millones de dólares, aproximadamente, con cortes. Pero firmar a Cousins no resuelve todos los problemas. El quarterback Josh McCown no fue el problema en los 13 partidos en que jugó la temporada pasada, tirando 18 touchdowns contra nueve intercepciones con un índice de pasador de 94.5. No fue jugador de Pro Bowl, pero lo hizo bien y los Jets se fueron 5-8 en partidos en que inició. New York carece de armas ofensivas; hallar una con la sexta selección global no será suficiente. Requieren un corredor, ala cerrada y ayuda en la línea ofensiva. Requieren arreglar a su defensiva, que ranqueó N° 22 en puntos permitidos y N° 25 en yardas permitidas.

El dinero por sí solo nunca ha solucionado problemas en la NFL. Aun así, los Jets siempre podrían estructurar el contrato de Cousins para que la carga financiera se inclinara hacia los primeros años, permitiéndoles seguir construyendo en años futuros. Luego la pregunta se convierte en: ¿Podrán conseguirlo? Si Cousins firma aquí, retará la noción de que desea ganar. A veces un equipo ofrece tanto dinero, que convence a un jugador de que, sí, puede ganar aquí (véase a los Redskins, 2000s). Contar como coordinador a Jeremy Bates quien tiene la reputación de ser extremadamente detallista --y quien dirigió con Mike Shanahan, el primer coach de Cousins-- ayuda. Cousins se reunió con él alguna vez y conoce el sistema que emplea. Ganar en New York convertiría a Cousins en un rey; perder allí luego de firmar un acuerdo enorme haría todo lo contrario. Cousins estaría apostando a sí mismo de nueva cuenta, esta vez a que puede elevar a una franquicia. También estaría apostando a que los Jets pueden conseguirle lo que requiere. Son apuestas arriesgadas.

Denver Broncos: Si los Vikings y Jaguars no se meten a la puja, podría reducirse a Broncos o Jets. Denver ha demostrado que puede construir a un ganador. Los Broncos también cuentan con buen ataque terrestre, ranqueando N° 12 en yardas por juego la temporada pasada. Cuentan con una defensiva que ranqueó tercera en yardas (pero N° 22 en puntos permitidos). Existe una base alrededor de la cual construir, además de que cuentan con la quinta selección global. El problema para Denver será crear el espacio necesario bajo el tope salarial. Los Broncos no solamente no cuentan con mucho espacio actualmente --unos 25 millones de dólares– sino también están en aprietos para el 2019 (proyectados en el lugar N° 29 en espacio disponible). Denver podría cortar o traspasar a jugadores para crear más espacio, pero uno de ellos sería el receptor abierto Emmanuel Sanders. Además, el head coach Vance Joseph culminó su primera campaña al frente con rumores de ser despedido. Se trata de una franquicia con historia, pero es otra apuesta. Y ambas partes se preguntarán lo mismo: dada su situación bajo el tope salarial, ¿firmar a Cousins impediría que pudieran construir a largo plazo?

Cleveland Browns: Nunca ha tenido mucho sentido para ninguna de las partes, y existe una buena posibilidad de que los Browns ni siquiera hagan oferta a Cousins. Tienen la oportunidad de tomar al mejor quarterback en un draft con varios prospectos buenos que, en un par de años, podrían superar a Cousins. Y serían mucho más baratos. Desde la perspectiva de Cousins, los Browns acumulan marca de 1-31 en el último par de años y todavía tienen al mismo head coach. Fin de la historia.