Tom Brady y los New England Patriots tuvieron una tercera y gol en la yarda uno contra los Kansas City Chiefs la semana pasada. Con la esperanza de extender la ventaja de 7-0, Brady lanzó un pase que ha hecho docenas de veces en situaciones similares: buscar al ala cerrada a la mitad de la zona de anotación.
Pero en vez de anotar con el ala cerrada Rob Gronkowski, el balón llegó a las manos del apoyador de los Chiefs Reggie Ragland. ¿Cómo le pudo pasar eso a Brady cuyo porcentaje de intercepción, 1.82, es el segundo menor en la historia de la NFL?
Peyton Manning tiene una buena idea. En su última participación en ‘Detail’ de ESPN, Manning gentilmente reprendió a Brady por lanzar el pase luego de perder de vista a Ragland.
“Sucede de vez en cuando”, dijo Manning mientras se muestran múltiples ángulos de la jugada. Ragland se mueve inicialmente a la línea del scrimmage luego de una jugada de engaño, Manning añade: “Pierdes de radar a ese jugador que parece mordió el engaño… parece esconderse detrás de tres jugadores de la línea ofensiva de los Patriots (y) dos de los defensivos de los Chiefs. No hay manera de que Tom pueda ver a ese jugador. Yo siempre decía que, si no puedes ver claramente enfrente de ti, si crees que quizá alguien esté ahí, debes optar por la cautela y no lanzar en esa zona, o lánzalo un poco más alto”.
La vista de una cámara a nivel de campo en la otra zona de anotación y de frente, confirma que Ragland está lo suficientemente bajo como para esconderse incluso de Brady, quien mide seis pies y cuatro pulgadas (1.93m).
“Creo que Tom simplemente perdió de vista a ese jugador”, reitera Manning. “No lo puede ver. Cree tener a Gronk abierto”.
Eso fue lo más cerca que Manning estuvo de criticar a Brady –su amigo y competencia en la discusión sobre el mejor mariscal de campo de la generación- durante un desglose de 25 minutos sobre su rendimiento en el juego de campeonato de la AFC. Brady se recuperó de esa intercepción para liderar a los Patriots a una victoria en tiempo agregado, calificando para el noveno Super Bowl desde que él tomó el trabajo en 2001.
Comenzando en ese punto (2001), 12 de los siguientes 17 Super Bowls incluyen o a Brady o Manning. Brady ha ganado cinco, y Manning se retiró luego de ganar su segundo (en cuatro apariciones) al final de la temporada 2015. Compitieron en el campo, con Brady y los Patriots ganando los primeros seis juegos y Manning seis de los últimos 11. Y sus números pasando están muy cerca en el casi mismo número de juegos pese a jugar en muy diferentes esquemas en sus carreras.
En vez de enfocarse en los lanzamientos de Brady durante el análisis, Manning ocupa la mayor parte del tiempo explicando sus decisiones y enfatizando su depurada técnica.
De una jugada de pase, Manning demuestra como Brady se mantiene “justo en la bolsa” para permitir que el guardia derecho de los Patriots, Joe Thuney, ejecutara un bloqueo en trampa a través de la formación. Él mismo hacía esa jugada a menudo: “Protege a tu liniero ofensivo estando en la posición correcta en la bolsa. No te desvíes. No quedes muy adentro”.
Ni Manning ni Brady serán recordados por su movilidad, pero Manning proveyó un luminoso ejemplo de cómo Brady evita dolorosos contactos en la bolsa. Cuando el apoyador de los Chiefs Justin Houston se abalanza sobre Brady desde su lado derecho, Manning hace notar el “violento” giro de Brady en el momento justo en el que Houston llega. Brady mantuvo ambas manos en el balón, pero giró todo su torso hacia la línea lateral izquierda. Houston se fue de largo, Brady tiro un pase preciso.
Manning en muchas oportunidades demostró la química entre Brady y el receptor Julian Edelman, comenzando con un pase de 14 yardas a las costuras para convertir una tercera y siete en la primera serie ofensiva. Manning enfatiza que Brady puede lanzar la ruta “con los ojos cerrados, “siempre manteniendo el baló bajo para proteger a Edelman de un contacto más duro”.
El respeto de Manning a Brady está claro a lo largo del desglose, prueba de una relación que ambos dijeron siempre que fue fuerte, pese a sus excepcionalmente competitivas personalidades magnificadas en una obsesión por el rango en el medio. De hecho, su amistad sobrevivió la extraña y rara revelación de un mail privado que Brady le envió a un amigo en 2014. Sobre su “rivalidad” con Manning, Brady escribió: “Tendré otros siete u ocho años. Él tiene dos. Es el capítulo final. A jugar”. Brady se disculpó con un texto, el cual Manning dijo era “innecesario”, y que no había “daño ni culpa”.
Resultó que Brady tenía razón. Manning llegó al final de la siguiente temporada. Brady aún juega y dijo el fin de semana que había “cero” opciones de retiro al final de la campaña. Tiene al menos un récord más que reclamar. Mientras en este momento, ¿adivinen quién es el mariscal de campo más viejo en ganar un Super Bowl?
Respuesta: Peyton Manning, que tenía 39 cuando los Denver Broncos derrotaron a los Carolina Panthers en el Super Bowl. Una victoria contra L.A. el domingo le daría el récord de seis Super Bowls ganados a Brady, y con 41 años.