DALLAS – Para Jason Witten, por fin llegó el momento de regresar.
El ala cerrada de los Dallas Cowboys dijo que ansiaba que comenzara la temporada 2019 de la NFL, en la que después de un año de retiro regresa como jugador activo.
Witten anunció en abril del 2018 que dejaba los emparrillados para convertirse en analista de televisión, después de 13 campañas con los Cowboys.
"Desde que comenzó la temporada pasada comencé a cuestionarme si había hecho lo correcto", dijo Witten. "Cada semana, en cada partido que estuve, me di cuenta que aún tenía ‘eso’, que sentía que todavía podía ser productivo y jugar al nivel que yo mismo exijo de mí".
Witten, de 37 años, dijo que a mediados de febrero empezó a pensar cada vez más en la posibilidad de regresar y que cuando los Cowboys le brindaron la oportunidad de estar con el equipo de sus amores tomó la decisión por completo.
"Ahora más que nunca me doy cuenta de que fue la decisión correcta", afirmó. "Me siento mejor ahora que cuando tomé la decisión en marzo. Ya pasé por el campamento de pretemporada y mostré que puedo jugar. Me siento en perfectas condiciones físicas y de futbol americano. Estoy ansioso porque esto empiece".
En sus 13 temporadas anteriores, desde que fue reclutado en la tercera ronda del Draft del 2003, Witten sólo faltó a un partido; ha jugado lesionado, enfermo y con cualquier otra cantidad de problemas encima. Y siempre al máximo nivel.
En 239 partidos disputados, Witten suma 1,152 recepciones para 12,448 yardas y 68 touchdowns.
"Cuando Jason me habló de regresar, de inmediato me emocioné", dijo quarterback de los Cowboys Dak Prescott. "No sólo es la gran habilidad que tiene para recibir pases y bloquear, sino por su liderazgo y todo lo que trae a este equipo".
"Me dijo que quería volver para tratar de ayudarnos a conseguir lo único que a él le faltó, un campeonato", agregó. "Estamos muy contentos de tenerlo aquí otra vez".
Witten reconoció que este domingo contra los New York Giants será especial cuando salga al campo de juego, quizá igual que cuando debutó en el 2003.
Ha extrañado los partidos contra sus rivales divisionales. Tal vez en especial contra los Giants, a los que ha hecho demasiado daño de manera consistente.
Acumula 161 recepciones para 1,649 yardas y 15 touchdowns en 31 partidos contra los neoyorquinos.
"Aquí es donde viene la emoción para mí", comentó. "Sé que puedo salir y encontrar maneras de vencer a los Giants. Por eso estoy aquí. Por eso tomé la decisión de regresar. Estaba pensando en momentos como este. No hay ningún otro lugar en el que preferiría estar en vez de aquí".
"Es difícil estar viendo los partidos cuando aún sientes que puedes dar algo en el campo", agregó. "Es duro estar viendo a tus compañeros salir y jugar. Pero la oportunidad se presentó por sí misma y la agradezco. Siento que tengo algo que probar".
Y el entrenador de los Giants, Pat Shurmur coincidió.
"Me gusta Jason, temenos una buena relación", dijo en conferencia telefónica con la prensa que cubre a los Cowboys. "Ahí es a donde pertenece. Es un Cowboy de por vida".