Colombia está expectante por el debut de Diego Cocca (Buenos Aires, 11 de febrero de 1972) como nuevo entrenador de Millonarios de Bogotá. Sus palabras, "vengo a trabajar por objetivos grandes, a poner a Millonarios donde debe estar", han comenzado a dulcificar su relación con los hinchas y el entorno del 'Ballet azul', y este sábado 27 de agosto comenzará la aventura para el exentrenador de Racing Club de Avellaneda.
Cocca asistió al juego del equipo en el campeonato contra Deportivo Cali, que el conjunto albiazul selló con una victoria (1-0), a la espera del choque clásico contra Independiente Santa Fe, en la avant première del técnico argentino. Para el entrenador, ha sido un partido especial ya que le ha permitido extraer conclusiones de acuerdo a cómo idear el once estable del cuadro bogotano. El informe que realice el profesor Jorge 'Chamo' Serna, quien reemplazó en un breve interinato al eyectado técnico uruguayo Rubén Israel, será de suma utilidad para el expreparador de La Academia.
Millonarios espera prolongar en el tiempo con Cocca el buen momento que ha iniciado con Serna, después de que las dos derrotas que signaron el final de la era Israel. Diego Cocca trabaja en Millonarios junto a Mauro Jeréz, su técnico asistente; Alejandro Manograsso, analista de videos y observador de los equipos rivales; y el preparador físico Javier Bustos.
Cocca, campeón de la primera división argentina en 2014 con Racing Club de Avellaneda, espera convertir en una fortaleza El Campín de Bogotá. El entrenador confía en que el secreto de una campaña exitosa radica en asegurar la mayor parte de los puntos en juego en condición de local. Al técnico número 11 de Millonarios de Bogotá en los últimos 10 años no le preocupa la fama de trituradora de entrenadores que se ha granjeado el plantel albiazul en la última década, ni la ansiedad que reina en el ambiente producto de 4 años sin títulos que festejar. Cultor de la frase "vamos a ir partido a partido", Cocca incide en que "me gustó la idea de venir a un club grande, con mucha historia en un fútbol colombiano que está creciendo".
Se trata de un entrenador muy inteligente. Que cultiva el perfil bajo y toma mucha distancia de la prensa para centrarse en la atmósfera interna del vestuario y la problemática cotidiana que envuelve a sus dirigidos. Su sistema de juego predilecto es el 4-4-2 y tiene la virtud de potenciar las cualidades de sus jugadores. El caso más importante en este sentido es el del delantero centro Gustavo 'La pantera' Bou, a quien trajo a Racing procedente de River Plate, donde el entrerriano había quedado libre.
Diego Cocca ha sido el protagonista de una sola gran polémica conocida con la tribuna. Cuando en víspera del clásico de Avellaneda Racing-Independiente, muy suelto de cuerpo afirmó en la rueda de prensa previa al juego que "prefiero perder el clásico y salir campeón, a cualquier otra cosa". Los partidarios más fanáticos de Racing no encajaron bien ese pensamiento, esa declaración de intenciones, y Cocca recibió una andanada de críticas... que se silenciaron cuando Racing, poco tiempo después, logró el ansiado campeonato. Lo que el propio Diego Cocca pretendía conseguir, y a lo que se había referido en el contacto con los medios aquella tarde previa al match en el conurbano sur.
Hombre de club, no duda sin embargo, en tomar decisiones respecto a la planificación interna institucional, si algo no le convence. En Racing hizo echar a un canchero (cuidador del césped) para traer al profesional que se había ocupado de ese tema cuando él dirigía a Defensa y Justicia, e incluso motorizó el alejamiento de un entrenador de las divisiones inferiores como Jorge Córdon, para imponer a Gustavo 'Chapa' Zapata, amigo suyo y excompañero de su época en River como jugador. Episodios que le hicieron ser conocido en el Cilindro de Avellaneda como "Diego Cocca el dueño de todas las llaves del club".
De trato correcto con los jugadores, aunque provoca desdén en los profesionales de los medios su distanciamiento y evasivas, habrá que ver cómo se maneja con la prensa colombiana. En un marco de respeto, sin que le hagan sentir innecesario rigor en cada comparecencia, tal vez el nuevo entrenador de Millonarios se muestre más cercano. Aunque, como es obvio, eso no debe ser considerado el aspecto más importante en esta nueva etapa.
Si el cuadro bogotano despega con él y crece, muy pronto se olvidarán los resquemores y el clima hostil del pasado 10 de agosto, cuando el 'ballet azul' cayó frente al Bucaramanga y que derivó en la sanción de jugar 4 partidos a puerta cerrada. Castigo que el Distrito de Bogotá incrementó a 6 juegos sin la presencia de público a causa de la violencia expuesta. Esto, después de que en el primer semestre, la barra brava de Millonarios causara serios destrozos en el estadio Palogrande de Manizales, la casa de Once Caldas, por motivos similares.