Juan Fernando Quintero entró en la historia grande de River. El volante colombiano llegó a comienzos de este 2018, y con el golazo que marcó en la final de la Copa Libertadores, contra Boca, fue el gran héroe de la jornada.
El talentoso mediocampista le cambió la cara al equipo: movedizo, con sus clásicos pases precisos y buscando siempre el espacio fino, Juanfer se convirtió en una de las figuras de la cancha.
Quintero comenzó su carrera muy joven y enseguida mostró su buen juego en el Envigado, de Colombia.
Atlético Nacional fue su próximo paso, un grande de Colombia, y luego llegó el saltó a Europa: Pescara de Italia, Porto, de Portugal, Stade Rennais, de Francia…
Pero en Europa le costó afianzarse y pegó la vuelta en 2016 para ponerse la camiseta de Independiente Medellín. Desde allí lo rescató Marcelo Gallardo, y pese a algunos altibajos y a no ser siempre titular, su presencia nunca pasó inadvertida.
Se lo cuestionó por su entrega, por sus lagunas, por su falta de compromiso, a veces, para hacerse cargo del juego.
Pensar que en 2016, cuando las cosas no salían y estaba bajoneado, el amigo de Maluma (hicieron juntos Inferiores) pensó en dejar el fútbol para dedicarse al reguetón, su otra pasión.
Pero el talento siempre estuvo intacto. Hasta que apareció. Y lo demostró con el gol que abrió el camino hacia el título en el Bernabéu. Así, Quintero fue el héroe que ya entró en la historia de River.