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"Hemos sufrido ante un gran equipo": Zidane

Getty Images

BARCELONA -- Del derrumbe a la felicidad existió un remate de Sergio Ramos, salvador como de costumbre, para recuperar la sonrisa del madridismo e invitar a que Zidane mostrase su mejor cara en la sala de prensa.

“Hemos sufrido ante un gran equipo. No es fácil sumar aquí y lo hemos hecho con carácter” destacó el entrenador francés, quien dejó claro que “debemos estar muy contentos por el punto que sumamos, pero no hay que pensar que sepa a victoria porque no han sido tres puntos”.

Por encima de todo, claro, la figura de Sergio Ramos. El salvador eterno de este equipo en una circunstancia que no rechazó admitir Zidane. “Es lo que tiene Sergio. Mucha personalidad y en estos partidos siempre está ahí. Nunca baja los brazos” apuntó el técnico, para quien el central “es un jugador muy importante para nosotros”.

“Estamos contentos por el punto porque en la primera parte tuvimos ocasiones para hacer daño y marcar un gol… Pero no lo hicimos” sostuvo el entrenador del Real Madrid, quien admitió que su equipo lo pasó mal “pero no se rindió”. Lo explicó Zidane afirmando que tras el gol de Suárez “ellos se animaron y tuvimos más problemas”, destacando que el corazón de sus jugadores fue fundamental para no irse de vacío.

“El corazón y la fe del equipo se mantuvo hasta el final. Hoy se ha visto que todos son importantes en el equipo y, por encima de todo, la confianza por mantener el pensamiento en marcar” destacó el técnico, feliz por un resultado que llegó a no sospechar.

Ni la decepción del partido de sus delanteros motivó un solo reproche por parte de Zidane, mucho más centrado en hacer referencia al colectivo. “Quizá estuvimos un poco bajos en la presión, pero ha sido un excelente trabajo colectivo de todo el equipo y en ellos también han colaborado Benzema y Cristiano” sostuvo.

Al final… ¿Es un golpe a la Liga? “No. No creo que el Barcelona lo acuse porque queda mucho y han hecho un buen partido”, sentenció el entrenador francés, quien, de toda manera, no pudo ocultar en su semblante la felicidad por un punto que llegó, seguramente, a contemplar imposible.