<
>

Ernesto Valverde: "Jugar bien no es tan sencillo como se piensa"

BARCELONA -- El partido de Miami, las críticas al juego del Barça, su renovación, su agotamiento por la presión como entrenador... Casi se diría que este domingo no hay futbol en el Camp Nou a la vista de una rueda de prensa que se convirtió en un auténtico bombardeo del que Ernesto Valverde salió como buenamente pudo.

“No digo nada a quienes critican... Esto es así y lo acepto con deportividad”, se defendió el técnico azulgrana cuando fue interpelado por el juego de su equipo. “Intentamos ganar y jugar bien, pero no es tan sencillo como la gente piensa”, recordó, dando cuenta que hechos puntuales, “tratándose del Barça”, tienen un peso fuera de lo normal: “A veces juegas 87 minutos bien... En los otros tres el rival te hace una ocasión y ya se dice que el rival hizo algo. Sé la exigencia que hay aquí”, resolvió.

“Tengo margen para agotarme porque aún estamos en septiembre”, solventó con calma, rechazando estar pensando en una renovación “porque tengo contrato y hay posibilidad de ampliarlo un año más... Aún estamos en septiembre”, repitió, recordando que “ya sabemos cómo van las temporadas y es muy pronto para hablar”.

Comenzado su segundo curso como entrenador azulgrana, a Valverde se le denota menos cercano, más frío y calculador en la sala de prensa. Cada pregunta provoca cierta tensión de la que huye con calma, ofreciendo una imagen de sensatez que pone a prueba esa paciencia de la que tanto se le ha elogiado y que motiva respuestas elaboradas.

¿Cambio de sistema? “Nos ponemos en el campo en función de las características de nuestros jugadores”, explicó con certeza. “Si ves que tenemos a Iniesta por la izquierda y piensa que eso es un 4-4-2... Tiene que volver a mirárselo porque una cosa es cómo te organizas para defender y otra cómo lo haces para atacar”, convino, negando que su equipo haya perdido el tacto ofensivo que le hizo característico en el pasado.

De ahí, que se pueda entender la posición de Coutinho como interior izquierdo. “Es una posición que conoce bien. Su forma de jugar es muy vertical, de jugársela y de hacer el uno contra uno... Pero aporta mucho desequilibrio”, defendió Valverde, intentando no entrar en discusiones.

Tal como en el partido de Miami, tan puesto en entredicho y que, confesó, “me cansa”. “El ruido que está haciendo un partido que se tiene que jugar dentro de cuatro meses me parece incomprensible”, zanjó, explicando que, de momento, “el partido que me interesa es el de este domingo; el otro me preocupa poquísimo y me parece sorprendente las vueltas que está dando esto. Supongo que habrá que estirar la goma”.