El Real Betis, donde milita Andrés Guardado y que el domingo visita al Barcelona, sólo ha ganado cuatro de sus cincuenta y dos partidos de Liga en el campo del vigente campeón, donde se impuso por última vez hace veinte años y donde acumula una serie de ocho derrotas consecutivas.
La última victoria bética (1-3) en el Camp Nou se produjo en la temporada 1997-98, cuando el equipo dirigido por Luis Aragonés remontó, gracias a un doblete de Finidi y a un gol del Alfonso, el tanto con el que Bogarde había adelantado a los azulgranas.
Los otros tres triunfos del Betis en el coliseo barcelonés llegaron en la década de los ochenta: 1-3 en la temporada 80-81, con goles del local Krankl y de los visitantes Benítez, Cardeñosa y Morán; 1-2 en la campaña 85-86, cuando Ito deshizo en el último minuto el empate que habían fijado Pichi Alonso y Rincón; y 0-1, con tanto de José Luis, en el curso 87-88.
Además de estas victorias reseñadas, el Betis ha cosechado en sus visitas ligueras al Barcelona siete empates y 41 derrotas, las doce primeras de forma consecutiva entre 1933 y 1964 y la última, en la jornada inaugural de la temporada pasada, cuando perdió 2-0 a causa de los goles de Tosca, en propia meta, y de Sergi Roberto.
Para preparar el partido, este viernes, como suele hacer en la jornada posterior a un partido, el entrenador bético, Quique Setién, ha dirigido una sesión en la que los titulares ante el Milan han hecho trabajo específico de recuperación en el gimnasio y el resto, en el césped de la ciudad deportiva verdiblanca.
En el grupo que ha saltado al exterior, han estado el portero titular en la noche europea, Pau López, además del mexicano Andrés Guardado y el delantero Loren Morón, quienes suplieron en el último cuarto del partido ante el Milan a Joaquín Sánchez y Tonny Sanabria, respectivamente.