MADRID -- Cada semana, una controversia diferente en torno al uso del VAR. En esta ocasión se ha centrado en la jugada que supuso el segundo tanto del Barcelona en la victoria por 3-1 sobre Leganés debido a la falta de Luis Suárez al arquero Iván Cuéllar, y que ha llevado al club pepinero a interponer una queja formal ante la Federación Española de Futbol.
El caso resonó en el entorno del Real Madrid, que en su momento hizo lo propio con el posible penal a Vinicius Júnior, y que el VAR decidió no conceder, en la derrota por 2-0 ante la Real Sociedad.
El problema, reiteró el entrenador del conjunto merengue, Santiago Solari, es la “confusión” que genera el criterio con que se aplica.
“Repito lo que dije con respecto al VAR. Es un sistema que todo el mundo del futbol ha recibido con ilusión; ahora nos confunde un poco y todos queremos que se aplique, y se aplique bien. Que no se hable de arbitraje, porque cuando no se habla de arbitraje quiere decir que sean buenos. Repito lo que dije la última vez, que lo que más nos confunde es la discrecionalidad en la aplicación. Es el primer año y lo que esperamos es que mejore y lo comprendamos mejor”, comentó Santiago Solari en rueda de prensa celebrada tras el último entrenamiento de su equipo antes de medirse este jueves a Girona en la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey.
Solari evitó pronunciarse respecto a la influencia directa que los errores arbitrales pueden tener en la tabla, pues el tanto de Suárez, que rompió un empate 1-1, encaminó el triunfo que permitió al Barcelona conservar los diez puntos de ventaja sobre los merengues en la tabla.
El entrenador argentino insistió en que el objetivo del VAR es tener “claridad”, y espera que el sistema se perfeccione con el tiempo.
“Está allí en el debate público y yo repito lo mismo. Lo que todos deseamos es claridad y entenderlo y nada más. Porque todos recibimos esto con mucha ilusión y ahora hay un poco de confusión. Hay que perfeccionarlo para que el deporte sea mejor”, reiteró.