Arranca la temporada de la Serie A más excitante de la última década y todas las miradas son acaparadas por la larga estela de Cristiano Ronaldo como nuevo jugador del campeón, Juventus.
El fichaje más caro del futbol italiano --una liga que en los 90 y principios de los 2000 estuvo acostumbrada a reinar en las listas de los mejores compradores del mundo-- ha caído en Turín como un terremoto, con la misión de convertir a un buen conjunto, campeón del torneo doméstico los últimos siete años, en un superequipo que pueda por fin volver a reinar en Europa.
El equipo ha sabido mantener la estructura del año pasado, la que le llevó a ganar el Scudetto y plantarse en cuartos de final de la Champions League, donde claudicó ante el Real Madrid liderado por Ronaldo. Con tres goles (dos en Turín y el polémico penalti en el último minuto en el partido de vuelta en el Bernabéu), el portugués apeó a los italianos del torneo del cual habían sido finalistas el año anterior.
La ovación que brindó el Juventus Stadium al portugués tras su gran gol de chilena a Gianluigi Buffon seguramente caló hondo en el ego de Cristiano, que tras nueve años en el equipo merengue decidió dejar atrás todos los problemas conyugales que tenía con la directiva --y los fiscales que tenía con Hacienda-- y decidió poner rumbo a la ciudad del norte de Italia.
Allí, tras la salida del equipo de Higuaín, compartirá delantera con jugadores de la talla de Mario Mandzukic o Paulo Dybala, y complementará un equipo de estrellas en el que brillan Douglas Costa, Miralem Pjanic, Juan Cuadrado, o los nuevos fichajes Leonardo Bonucci --de vuelta a casa-- y Emre Can.
Sin duda, los hombres de Massimiliano Allegri han sabido conformar un equipo que aspira absolutamente a todo esta temporada, aunque les ha salido un duro competidor en un renovado AC Milan.
Los rossoneri quieren pasar página y olvidar el mal trago de la temporada anterior. El club ha cambiado absolutamente todo: desde los dueños, la junta directiva, pasando por el nuevo director deportivo --Leonardo, el hijo pródigo-- y llegando hasta la reconstrucción a fondo de la plantilla.
11 nuevos nombres pueblan la plantilla que tiene a su disposición Genaro Gatusso para intentar plantar cara a la todopoderosa Juve y por lo visto en pretemporada, el equipo puede llegar a encajar y dar ese salto de calidad necesario.
Por jugadores no va a ser. Al fichaje estrella de Gonzalo Higuaín, que llegó a cambio de unos 54 millones de euros desde la Juve, se han juntado el también exjuventino Mattia Caldara, el uruguayo mundialista Diego Laxalt, el francés Bakayoko cedido por el Chelsea, el joven croata Alen Halilovic, y los españoles Pepe Reina y Samu Castillejo. Además, el club consiguió mantener en propiedad a Fabio Borini y quedarse con Suso, la estrella del equipo y uno de los hombres que más tentado para salir del club estuvo este verano.
El AC Milan ha conformado así una potente escuadra que aspira a dar la campanada en Italia y a volver clasificar a la Champions League tras verse “condenado” a jugar la Europa League este año después del descalabro de la Liga pasada.
La pregunta sin embargo queda en el aire, ¿serán suficientes estos fichajes para cambiar el rumbo de un equipo que lleva cerca de un lustro sin dar miedo a nadie? Es complicado de predecir.
Por un lado, el equipo tiene un buen balance de juventud (Donnaruma, Romagnoli, Caldara, Rodríguez, Laxalt, Halilovic, Castillejo o Suso) y de veteranía (Zapata, Abate, Strinic, Bonaventura, Montolivo, Biglia, Higuaín) como para pensar que pueden repuntar y conseguir grandes metas. Por otro, tantos cambios de golpe pueden ser contraproducentes y hacer que el año acabe siendo, solamente, de transición. Es justo ahí donde le toca a Rino Gatusso arremangarse para conseguir que su equipo dé lo mejor que lleva dentro.
La Serie A se presenta más que emocionante, ya que no es el AC Milan el único equipo que se ha reforzado a conciencia para intentar batir a la Juventus. El Inter de Milán también ha salido al mercado y se ha gastado cerca de 100 millones de euros en nuevas caras, y la Roma ha sobrepasado esa cifra para confeccionar --un año más-- un equipo con todas las garantías de victoria. Si añadimos al Napoli a la terna, que ha fichado a Carlo Ancelotti de entrenador y básicamente cambiado los cromos de Jorginho y Pepe Reina, por Fabián y David Ospina, tenemos entre manos un campeonato que sin duda hará las delicias de los aficionados.