Fútbol Americano
Eric Gómez 6y

Manuel Jiménez: de vender limones a ser presidente del Puebla

MÉXICO -- No cabe duda que una de las historias más sorprendentes del actual torneo mexicano es el buen futbol mostrado por Puebla.

La Franja marcha cuarto en la tabla general con 13 puntos y ha vencido en el Clausura 2018 a Tigres, Chivas y Toluca. A poco más de la mitad de que culmine el campeonato, Puebla ya piensa más en la liguilla y menos en el descenso, despegándose del Veracruz –que marcha último– con un colchón de 17 unidades.

Al centro de la transformación poblana se encuentra el nuevo presidente del club, Manuel Jiménez García, un hombre que se levantó de la escasez económica y de la tragedia familiar en su juventud para erigirse como un empresario de éxito y el socio mayoritario del club de sus amores.

Limones y Gansitos

El oriundo de Atlixco, Puebla, comenzó su vida en los negocios a los cinco años de edad, desde la puerta de su casa. “Siempre fui soñador y me gustó trabajar desde pequeño para ganarme el pan”, dijo Jiménez en entrevista para ESPN Digital. “Además de los limones y los Gansitos, los sábados de plaza en Atlixco, cargaba canastas y me daban unos centavos y una fruta,” continuó.

De niño, se enamoró del Cruz Azul de Fernando Bustos (“era un jugadorazo, gambetero como pocos,” recuerda) y del Atlas de Roberto Masciarelli, pero siempre fue fiel al Puebla, equipo con el que soñó integrar desde muy chico.

Junto con sus hermanos Domingo, Juan y Marco, la venta de comida evolucionó a la de ropa en su juventud. Tras la muerte de su madre, Tere, el joven empresario continuó con la venta de ropa mientras era estudiante de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). “Le vendía ropa a los docentes, a los alumnos,” recuerda Jiménez.

Tras recibirse como contador público de la BUAP en 1986, Jiménez cumplió con el sueño de su madre -abrir una boutique que llevó el nombre de la matriarca-. Las lecciones que Jiménez se llevó como propietario de negocio en ese entonces forjó la siguiente parte de su vida y su siguiente emprendimiento.

Seis pares de tenis fiados

“Seguíamos vendiendo en los tianguis,” dijo Jiménez. “Y me di cuenta que mis hermanos y yo podríamos tener éxito con los tenis,” continuó. Aprovechó un viaje a la Ciudad de México para iniciar su camino en el mundo de la indumentaria deportiva y consiguió que un distribuidor le fiara seis pares de tenis para comenzar su negocio.

Esos seis pares de tenis se convirtieron en 160 tiendas alrededor del país. La marca Mister Tennis se convirtió en el oficio principal de los hermanos Jiménez, y el patrimonio familiar. Aficionado del Puebla de toda la vida, el otrora CEO de Mister Tennis comenzó a adentrarse en el mundo del futbol.

“Hace dos años hicimos una fusión con un grupo y dejamos de tener Mister Tennis pero nos dio la oportunidad de hacernos del equipo de mis amores,” explicó.

Del descenso al protagonismo

Jiménez, junto con sus socios Manuel Alejandro Ruiz Delgado, Héctor Álvarez Tostado y Rafael Torre Mendoza, se hicieron del club en diciembre del 2017. Inmediatamente, heredaron un club con temas jurídicos: el ex dueño del equipo, Ricardo Henaine, se hizo acreedor legal del mote y el escudo de la institución, obligando un cambio de nombre de “Puebla FC” a “Club Puebla”.

Además, el equipo se encontraba con problemas de cociente y era candidato asiduo al descenso en las últimas campañas. En el semestre anterior, Puebla era noticia por temas mayormente negativos, como la disputa entre los antiguos propietarios o los comentarios del futbolista argentino-palestino Carlos Salom, quien aseguró tras los sismos en septiembre que dejaría el país por miedo a los fenómenos naturales.

Entre lo negativo, Jiménez rescató la gestión de varios jugadores, y de su técnico, Enrique Meza. “Contamos con un cuerpo técnico demasiado profesional y muy experimentado. Meza, si no es el mejor, es uno de los mejores técnicos con los que cuenta la liga,” aseguró. De la mano de su entrenador, Jiménez se encargó de fichar elementos para salvar al club del descenso y proyectarlo hacia el protagonismo.

Inteligencia deportiva, el secreto poblano

De acuerdo al presidente poblano, el grupo de inteligencia deportiva, integrado por los ex jugadores Fabián “Ruso” Peña, Ángel “Rambo” Sosa y el Director de Operaciones Deportivas, Eduardo Saracho, ha sido una catálisis de éxito durante la campaña actual.

La estrategia del equipo evoca a la estrategia denominada “Moneyball,” misma que implica el riguroso análisis estadístico y de otros factores tangibles para la construcción de un plantel. “Es verdad, Peña, Saracho y Sosa han hecho un equipo muy interesante,” dijo Jiménez. “La inteligencia deportiva es fundamental para nosotros. El ‘Profe’ Meza nos solicita refuerzos y le damos una serie de candidatos de acuerdo a lo que él pide,” continuó.

Esa estrategia resultó en los fichajes en el actual semestre del delantero canadiense Lucas Cavallini, el central peruano Anderson Santamaría y el mediocampista boliviano Alejandro Chumacero, considerado por mucho como uno de los mejores jugadores del certamen.

“Las contrataciones que hemos hecho son muy atinadas,” aseguró. “Santamaría es un gran central, muy rápido y se adaptó rápido. Chumacero de veras es un jugadorazo, súper sencillo y es una gran satisfacción. Cavallini es un gran profesional, no durmió el día antes del partido del Toluca porque nació su hijo, y luego se presentó". 

Jiménez resalta la gran calidad humana de sus elementos, conviviendo el mayor tiempo posible con ellos y alentándolos para seguir cosechando resultados. Pese al buen momento que vive el club, el presidente poblano no se deja llevar demasiado.

“Soy un soñador, pero estoy consciente que se tiene que despertar muy temprano para lograr esos sueños,” admite Jiménez. “El campeonato está casi a la mitad, en la segunda mitad se aprieta. En el caso de nosotros, nuestra mirada es la calificación. Tenemos que trabajar con humildad y sencillez.”

^ Al Inicio ^