Boca se había destacado hasta la tercera fecha del presente torneo Apertura por no haber sufrido goles, pero ante Estudiantes y, en especial, contra San Lorenzo, adoleció de fallas en la última línea que le provocaron tres goles y varias situaciones de riesgo.

Más allá de los goles azulgranas, en Boca son conscientes de que ante San Lorenzo no se quedaron con las manos vacías por la gran labor del arquero Roberto Abbondanzieri.

El primer turno del segundo entrenamiento de la semana en Casa Amarilla fue dedicado -casi en forma exclusiva- para los defensores, quienes durante 25 minutos se encargaron de cubrir los espacios que dejaban los mediocampistas cuando se proyectaban al ataque.

Tabárez no realizó modificaciones de jugadores en la formación presuntamente titular, pero les exigió más atención, en especial a los marcadores laterales, cuando regresan de sus escaladas al ataque.

"En los últimos partidos nos han llegado un poco más porque jugamos como local y tratamos de ganar. A veces, quedamos un poco abiertos en el fondo, pero no es para desesperar sino para tener mayor cuidado", dijo Abbondanzieri tras la práctica.

Más tarde, el técnico uruguayo dispuso movimientos de presión sobre el rival y de control de la pelota cuando era recuperada. Sólo Abbondanzieri trabajó en forma diferente al resto del plantel, porque padece una fatiga muscular que, sin embargo, no le impedirá enfrentar a Lanús, el domingo, por la sexta fecha.

Por lo expuesto en el entrenamiento, se infiere que Tabárez le renovará su confianza al delantero Roberto Sosa, pese a que aún no señaló goles, y la alineación con que arrancará el cotejo ante Lanús no tendría modificaciones.