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Dodgers suelen apelar a la paciencia

LOS ÁNGELES -- En una temporada baja cargada de cambios frenéticos y transacciones rutilantes, los Dodgers de Los Ángeles están haciendo de la paciencia un culto.

Hasta el momento, el club comandado por Stan Kasten y Ned Colletti ha volado fuera del radar, pasando desapercibido tanto antes, como durante y después de las reuniones invernales realizadas en Florida.

Esta estrategia tiene varias explicaciones y muchas aristas, pero lo que se destaca es que hasta el momento se ha preferido la cautela por encima de fichar a golpe de talonario.'

Los Dodgers han sido partes de un sinfín de rumores, por jugadores que van desde David Price hasta Robinson Canó, pero hasta el momento solo se han encargado de retener algunas piezas claves del equipo de 2013.

Brian Wilson y Juan Uribe, de gran nivel la última temporada, recibieron contratos tan lucrativos como justos, y mucho más teniendo en cuenta las cifras que se están manejando.

El relevista firmó por una temporada a razón de $10 millones, y será la póliza de seguro de Kenley Jansen y el preparador perfecto para el bulpén blanquiazul.

A su vez, Uribe aceptó un contrato de dos años por menos dinero del que se esperaba, y así la antesala seguirá teniendo dueño por un buen rato más.

Ambas firmas eran necesarias tanto en el diamante como en el camerino, y además eran dos de los tres agentes libres más importantes que tenía el conjunto.

¿El otro? Ricky Nolasco, quien partió hacia los Mellizos de Minnesota con un contrato que los Dodgers hicieron bien en no ofrecer ni igualar.

Su reemplazante ya tiene nombre, y aunque el precio de Dan Haren genere dudas ($10 millones por una temporada, con opción a otra), la manera en la que está funcionando el mercado obliga a ajustar las expectativas.

Pese a eso la plantilla está lejos de ser estar completa, pero cada acción (o falta de acción) tiene una explicación más que valorable.

Además, luego de la plantilla que construyó Colletti en 2013 (y los refuerzos constantes que supo encontrar), el gerente general merece el beneficio de la duda.

LA ROTACIÓN, EN BUENAS MANOS

El quinteto abridor fue uno de los puntos fuertes de los Dodgers a lo largo de la temporada, y parece que en 2014 tampoco será la excepción.

Tener al mejor lanzador de la Gran Carpa y actual Cy Young Clayton Kershaw, al mejor número 2 en Zack Greinke y a una verdadera gema en Hyun-Jin Ryu es una gran forma de empezar.

Ese 1-2-3 estará flanqueado por el mencionado Haren, quien a pesar de no venir de su mejor campaña tiene reputación de durabilidad y suficiente en el tanque como para cumplir su rol.

El quinto puesto será una incógnita, pero no por falta de opciones.

Entre los que se encuentran en la nómina, Chad Billingsley y Josh Beckett pujarán por tener la bola cada cinco días.

Sus presencias y aportes dependerán más que nada de su estado de salud, ya que el primero se recupera de una cirugía Tommy John y el segundo de una operación en la que le removieron una costilla. Ambos podrían estar disponibles para los entrenamientos de primavera, aunque sus pronósticos son reservados.

La granja también ofrece opciones, al menos para tapar un hueco a corto plazo.

Stephen Fife alternó momentos de gran nivel con otros de mediocridad, pero en 10 aperturas tuvo efectividad de 3.04, con 7.1 ponches por cada 9 innings.

La otra alternativa es el jovencito Zach Lee (tercer mejor prospecto y mejor brazo), quien tuvo un ERA de 3.22 en 28 salidas (25 como abridor) en Doble-A en 2013.

El carabinero derecho podría hacer su debut a mediados de temporada.

En cuanto a jugadores fuera de la organización, el sueño continúa siendo el japonés Masahiro Tanaka, pero los Dodgers tendrán ardua competencia para adquirir sus servicios, con los New York Yankees y Angelinos de Los Ángeles como otros candidatos.

Por último, los inquilinos del Chávez Ravine podrían hacer una oferta tentadora a los Rays de Tampa Bay por Price, pero esto requeriría vaciar la granja, algo que tanto Kasten como Colletti han dicho que no están dispuestos a hacer.

DUDAS EN EL INFIELD

La renovación de Uribe hace que los Dodgers ya tengan su infield titular diagramado, en el que repetirán Adrián González y Hanley Ramírez, y en el que Alexander Guerrero reemplazará a Mark Ellis en la intermedia.

Sin embargo, nadie sabe bien qué esperar del toletero cubano, y por el momento la plantilla no ofrece demasiada profundidad en el cuadro.

Dee Gordon y Justin Sellers están, pero no han podido asentarse, y eso que han tenido repetidas chances. Lo de Gordon es lo que más sorprende, ya que cuando debutó se lo veía con un gran futuro.

Por el momento estos dos estarían en la nómina, ya que los otros miembros del equipo de 2013 no continuarán.

Nick Punto (Atléticos de Oakland) y Skip Schumaker (Rojos de Cincinatti) tienen nuevos equipos, Jerry Hairston Jr. le puso fin a su ilustre carrera y Michael Young difícilmente sea tenido en cuenta.

Eso deja a Scott Van Slyke como alternativa en primera base y a Brendan Harris (con invitación al campamento) como únicos jugadores restante.

Sin dudas será aquí donde Colletti y compañía deberán apuntar, y deberán actuar pronto ya que las opciones restantes (Chris Nelson, Wilson Betemit, Yuniesky Betancourt, Jayson Nix, Plácido Polanco y Kevin Youkilis) tampoco ofrecen demasiadas garantías.

QUEDA LUGAR EN EL BULPÉN

El resurgir de 2013 estuvo fundamentado en gran parte por la confiabilidad del cuerpo de relevistas, pero una vez terminada la temporada las incógnitas volvieron a aparecer.

Ya no estará Ronald Belisario (en una sospechosa decisión de los Dodgers ya que el venezolano acabó firmando por más de lo que le podrían haber pagado los angelinos en el arbitraje) y tampoco ha renovado aún J.P. Howell.

El zurdo podría llegar a un acuerdo todavía, pero sus demandas son altas y por ahora los Dodgers no las han aceptado.

De los demás, algunos como Peter Moylan (Astros de Houston) ya se fueron, y otros como Carlos Mármol seguramente seguirán el mismo camino.

Eso deja al trío conformado por Jansen, Wilson y Paco Rodríguez en las situaciones de más presión, y a otros como Brandon League y Chris Withrow un poco más atrás en el orden jerárquico del bulpén.

Esto deja un par de lugares disponibles para algunos prospectos (José Domínguez y Onelki García) y otros veteranos (Scott Elbert y Javy Guerra).

Quizás el objetivo podría ser un relevista zurdo de experiencia para tener en caso de una nueva lesión de Elbert o que el cubano García aún no esté listo. Aquí entre las mejores opciones se encuentran Scott Downs, Eric O'Flaherty y Óliver Pérez.

Sea como sea, los Dodgers están tomándose las cosas con calma, dejando que el mercado se desarrolle y aguardando el momento indicado para actuar.

Después de todo, un equipo que estuvo tan cerca de llegar a la Serie Mundial, y que además sufrió tantas lesiones, no debería ser alterado de manera significativa.