Después de obtener el título de manera amplia y brillante ante el nicaragüense Adonis Rivas, el pasado 13 de julio en la reapertura del legendario Luna Park, Narváez cumplirá el sueño de combatir por la faja ecuménica ante su gente, de allí el slogan que da nombre al festival: "Promesas Cumplidas".

Esta será la cuarta confrontación por un título mundial entre dos boxeadores argentinos: Víctor Emilio Galíndez-Jorge "Aconcagua" Ahumada, Julio César Vásquez-Ricardo Núñez y Juan Domingo Córdoba-Sandro Oviedo, fueron los protagonistas de los primeros choques entre connacionales por una corona.

Quizás, esta propuesta no despertó grandes expectativas en el aficionado boxístico, ya que el pleito largamente esperado era el de Narváez con el "Cacique" Horacio Chicagual, también oriundo de Trelew, campeón argentino y sudamericano de los 50,800 kilos (112 libras).

No obstante, cuestiones extradeportivas, más desinteligencias con su técnico Juan Carlos Pradeiro, hicieron que Chicagual rechazara dicha posibilidad. Para Lazarte, quien ya era prácticamente un ex boxeador, esta chance mundial representa algo así como un regalo caído del cielo. La tercera en su campaña profesional, puesto que anteriormente cayó por puntos ante Kermín Guardia y por nocaut frente a Pongsaklek Wonjongkam, respectivamente.

Narváez es favorito en base a una precisión milimétrica, una defensa casi inexpugnable y un ataque inteligente potencializado por un ritmo endiablado, de parte del zurdo pupilo de Carlos Tello.

Tal vez, Lazarte, el diminuto gladiador marplatense, haya pasado su mejor momento, pero nunca hay que olvidar aquel viejo axioma popular que dice que "peleas son peleas". Narváez llega a esta instancia con una carta de presentación de 11 victorias (7 antes del límite) y dos empates. Mientras, Lazarte lo hace con 20 peleas ganadas (ocho por la vía rápida), cinco reveses y un empate.

El árbitro internacional Carlos Roldán será el tercer hombre sobre el ring, mientras que el jurado estará integrado por Carlos Rodríguez, Carlos Villegas y Ramón Cerdán. El presidente de la FAB, Osvaldo Bisbal, oficiará como supervisor de la OMB.

En el semifondo, el invicto rosarino Marcos Silvano Díaz (9-0-0, 7 KO) se topará a ocho vueltas con el bonaerense Gustavo Javier Ruíz (5-2-3, 3 KO).