No hubo sorpresas en cuanto a los resultados, aunque la forma en que La Dolfina, Ellerstina y los conjuntos de Indios Chapaleufú alcanzaron su clasificación para las semifinales fue muy dispar.

El objetivo primario de estas cuatro formaciones ya está cumplido, y ahora saben que afrontarán un fin de semana tranquilo, donde ganar o perder no representará quedar eliminado. Tan solo se juega para conocer el orden final en cada grupo y decidir el cruce en las semifinales.

CHAPALEUFÚ INTENTARÁ REARMARSE
La rigurosidad analítica de Bautista Heguy entregó una visión exacta de la actuación de Indios Chapaleufú: "Todo nos está costando mucho, no es fácil rearmar el equipo sobre la marcha cuando sale un 10 de handicap, y las repetidas lesiones de Marcos nos alteran los planes en cada encuentro".

Ante El Metejón, el back otra vez salió de la cancha muy pronto, y con el ingreso de Alejandro Agote, lo de Indios Chapaleufú fue meritorio.

Algunas combinaciones marcaron la leve diferencia ante el equipo que debutaba y nada más.

El campeón argentino no pudo imponer de manera sostenida su juego profundo y veloz. También arrastró varios momentos de imprecisión. Para lo que se viene, y con Marcos Heguy nuevamente en el equipo, Chapaleufú intentará reordenar sus fuerzas.

ELLERSTINA TOMA VUELO
Si se compara al Ellerstina pre-Palermo con el que debutó con éxito ante El Metejón, puede aseverarse que aquel no tenía chances de avanzar mucho más. Este Ellerstina, sin embargo, se perfila cada vez más con muy serias pretensiones de alcanzar la final.

Mucho se esperaba por la oposición que podría hacer El Metejón, una barrera que finalmente fue más accesible de lo pensado. Con Miguel Novillo Astrada recuperado, Ellerstina volvió a contar un juego impecable en defensa y desde allí atacar se hace más sencillo.

Aunque aún quedan las pruebas más duras de Palermo por afrontar, el back es una de la esperanzas más firmes para convertirse en el primer integrante de la familia Novillo Astrada que llegue a los 10 goles de handicap.

CHAPALEUFÚ II, CON LIBRETO
Junto a Ellerstina, la imagen de Indios Chapaleufú II es de las más consolidadas del Abierto, con una actuación muy homogénea. El desequilibrio lo aportan Eduardo Heguy y la movilidad creciente de su hermano Alberto.

La otra parte del equipo, Milo Fernández Araujo e Ignacio Heguy, marcan, aguantan adversarios y se preocupan por mantener un balance constante entre ataque, defensa, cambio de caballos dentro del juego y relevos que no deben quedar a mitad de camino.

Todo se produce dentro de un libreto que Chapaleufú II, no sólo en Palermo, sino también en Tortugas y Hurlingham, viene interpretando de manera prolija y sin saltearse capítulos.

LA DOLFINA, CON LA MIRADA A CORTO PLAZO

No es fácil hallar la explicación de por qué La Dolfina, con todo el poder de sus individualidades, se hunde por momentos en lagunas tan profundas.

Durante varios pasajes, su juego es temible y, como ante La Irenita, alcanzó su rendimiento más alto sin utilizar sus mejores caballos. Esto demuestra que el problema no está en los motores, sino más bien en la táctica que este equipo no termina de desarrollar.

A pesar de las dudas que mostró en el debut, La Dolfina continúa siendo el conjunto de mayor potencial, y también por eso el público siempre le pide un poco más.