MÉXICO -- Se acabó otra F1esta en el Autódromo de los Hermanos Rodríguez. Es difícil comparar y un lugar común decir que cada Gran Premio de México supera al anterior. En realidad, es complicado tener todas las perspectivas porque uno es solo un reportero en medio de un enorme complejo en el que hay cientos de miles de personas; muchas cosas pasan muy rápido y en distintos lugares.
Lo mejor, lo más destacado, es que ningún medio reportó o ha reportado desde 2015, año en el que el país regresó a la Fórmula 1, algún caso grave de inseguridad o violencia, ni siquiera graves accidentes han sido reportados –dentro y/o fuera de la pista–, afortunadamente.
En 2016 recuerdo que algunos medios informaron sobre un asalto a personal de Mercedes. Al siguiente día fui a Mercedes para preguntar a los miembros del equipo sobre lo acontecido. No sabían de qué hablaba.
Todo esto viene porque el GP celebrado ayer, y que ganase brillantemente Max Verstappen (Red Bull), fue el cuarto de cinco. El del siguiente año será el último bajo el contrato actual, mismo que, según reporta Motorsport, habrá de quedar renegociado en los próximos 3 meses una vez el nuevo gobierno asuma el próximo 1ro de diciembre.
Será momento de hacer sumas y restas y sacar un balance general. Ya hemos presentado en ESPN, a propósito de armar un paquete de información previo al evento, lo que han dejado las ediciones pasadas. La derrama económica es impresionante, pero hay que aceptar que solo es parte de la información, falta la otra parte… la del gobierno.
Porque si estas impresionantes cifras al final resultan ser menores al gasto que representa traer el Gran Circo, entonces no es un buen negocio. Confieso desconocer dicho balance y reconozco que es nuestra tarea, desde ESPN, buscar dicha información con las instancias correspondientes. Solo puedo esperar, creer, que, si no fuese un buen negocio, un ganar-ganar para todos, tantos no seguirían involucrados y convencidos de que el show debe seguir.
Busqué las opiniones de personalidades de la F1 en el Paddock –por cierto, de nuevo se lució la organización: tacos, churros, cerveza, barbería, maquillaje de Día de Muertos. El Paddock se convirtió en un pedacito de México para presentar apenas un pequeño porcentaje de su variedad cultural.
Resumo: nadie dijo que México no debería de seguir y que el gobierno entrante hace bien en, al parecer, no prestar atención al Gran Premio. Seguro, amable lector, no está sorprendido.
La crítica más negativa vino de Jacques Villeneuve, campeón mundial de 1997: “no me gusta el circuito desde un punto de vista de piloto”, y aceptémoslo, es muy complicado rebasar en el AHR. “Pero es un buen evento, un buen show. No sabíamos exactamente qué esperar la primera vez, pero ha sido muy bueno”, agregó el canadiense, ya más enfocado sobre lo que es el GP de México, no solo la carrera.
“Realmente me ha gustado venir a México, desde que volvió al calendario ha sido de las carreras más anticipadas del año, todos esperan venir aquí”, me dice Will Buxton, ex reportero de la NBC y que ahora trabaja con Liberty Media para hacer F1 lLive. Buxton, por cierto, reportó en su Twitter una evacuación del edificio de transmisión debido a una alarma de incendios. Nada grave y todos bien.
“Es único y la ciudad es fantástica. México es un país con mucha cultura e historia y sí, nos gusta venir aquí y pareciera que nunca se fue (del calendario)”, agrega el británico.
¡Así se vivió la fiesta del #GPMexico 🎉🏁
— ESPN.com.mx (@ESPNmx) 28 de octubre de 2018
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En el mismo sentido se expresa Matteo Bonciani, este alto italiano, muy expresivo y pausado al momento de hablar: “He estado ocho años en la FIA y eso quiere decir que en ocho años he estado en todas las carreras. Es complicado encontrar en otra carrera esta atmósfera, esta ‘fiesta’ para todos. Ves la ‘ola’ en las gradas, los números, ves europeos y VIP’s que quieren venir a esta carrera y no a otras. No sé cómo sea en este país (la administración pública), debo confesar mi ignorancia al respecto, lo que sí sé es que es notorio cómo esta carrera se convirtió no hace mucho (2015) en el lugar para estar”.
Es importante notar que Matteo menciona a fans europeos y VIP’s de otros países que prefieren gastar en México que en otras carreras. Algo parecido menciona otro europeo, Johnny Helbert, ex piloto de F1.
“Estuve en la grada principal, en el estadio (Foro Sol) y hay estadounidenses, australianos, canadienses, británicos y otros tantos europeos y eso prueba que el evento atrae al aficionado a la Fórmula 1 y creo que es muy importante intentar mantenerlo”, vi mucho holandés y habrán disfrutado mucho a Verstappen y Armin Van Buren, quien tocó luego de la competencia.
La #F1 se va del AHR 🇲🇽 tras días de grandes emociones... 👋🏁
— ESPN.com.mx (@ESPNmx) 29 de octubre de 2018
Siguiente parada 🏎 ➡️ #BrazilGP 🇧🇷 https://t.co/RUd6hjgOwE pic.twitter.com/u43XPohztZ
No es que el Gran Premio de México esté hecho y pensado para los europeos, o que solo su opinión importe, no me mal interprete. Pero es importante subrayar lo que creen y lo que ven, porque al final el gobierno mexicano pone dinero público (no sé cuánto y no sé si ese cuánto sea mucho o poco) para vender la marca México y vendérsela no al local -sabemos qué es México… ¿cierto?- sino al extranjero que pueda traer importantes divisas en euros o dólares al país y que impulse el comercio y el trabajo a través de la actividad turística.
Por eso es importante su opinión y por eso es importante enamorarlos con playas, cultura, eventos como el GP de México, uno que se ha convertido en la referencia, a decir de Federico Gestaldi, ex director deportivo en Lotus y ahora integrante del comité que busca regresar la F1 a la Argentina.
“Yo no conozco de política y mis respectos al nuevo gobierno, lo que sí les puedo decir es que un Gran Premio de Fórmula 1 es una excelente herramienta de marketing, una gran plataforma de negocios, trae trabajo a muchísima gente, antes y durante la carrera; hay estudios de mercado que justifican porque un Gran Premio es un buen negocio y lo digo no solo desde mi experiencia sino también desde mi interés porque vuelve a la Argentina, nosotros con nuestras autoridades, hemos tomado a México como ejemplo”.
“Aquí hay una conjunción de gente que trabaja en la misma dirección, un apoyo muy importante de parte del gobierno, las autoridades, las empresas, fanáticos. Siempre hemos dicho y lo digo por la época en la que estuve en Lotus (de director deportivo), para mí, México es la mejor carrera que hay, sería un lujo tener una carrera como esta en la Argentina”.
Un lujo que no sabemos si la siguiente administración impulsará. Es obvio que el gobierno, en distintos niveles, debe invertir para traer estos eventos a un país: invierte su capital humano, como en la seguridad, por ejemplo; también invierte en promocionar el país, en este caso la marca México.
Gastar e invertir no es lo mismo, no se saca ningún provecho de un gasto. Si el siguiente gobierno llega a la conclusión de que el Gran Premio de México es un gasto, entonces no habrá más show más allá de 2019 –que ya está garantizado con presupuesto de la actual administración–. Solo espero que de verdad se haga el balance y no sea una cuestión de opinión o de cómo esté el humor de quien dependa la decisión.
Desde mi pequeña perspectiva solo puedo confiar en lo que mis ojos alcanzan a ver y mi percepción es capaz de intuir: esta inversión llamada Gran Premio de México, vale la pena… ha valido la pena por cuarta vez.