EAST RUTHERFORD -- Vaya que si hace diferencia Sean Lee para los Dallas Cowboys.
El alma de la defensiva de los Cowboys llegó de nueva cuenta al rescate de sus maltrechos compañeros, que sufren hasta lo indecible sin él. Lee parece que se encarga de todo, ya sea de taclear, motivar, ajustar, interceptar y hasta “coachear“ a sus compañeros defensivos dentro del campo
Y si parece exagerado, hay que ponerlo de esta manera después de la victoria 30-10 sobre los New York Giants (2-11) de este domingo: Dallas (7-6) tiene marca de 1- 4 sin Lee en la actual temporada y de 6-2 cuando el linebacker deambula por todo el terreno.
“Por momentos, parece que está en todos lados. Se mueve rápido, taclea carreras y pases. Mueve a sus compañeros”, reconoció Eli Manning, quien volvió como quarterback titularid de los Giants. “La verdad es que es muy difícil sacarlo de balance o al menos evitarlo“.
El regreso de Lee se notó de inmediato. Para la primera mitad, cuando los Giants parecían imparables con el regreso de Manning, el linebacker de los Cowboys ya sumaba 10 tacleadas.
Al final, Lee terminó con 18 tacleadas, varias de ellas en momentos clave, como la acción en la que provocó pérdida de yardas a los Giants en jugada reversible del receptor Sterling Shepard en tercera oportunidad que obligó a Nueva York a despejar, antes de que los Cowboys tomaran el balón en el último cuarto y se enfilaran a anotar 20 puntos sin respuesta en el último cuarto.
La intercepción de Lee con 3:32 por jugar para amarrar el partido es otro ejemplo del impacto que su presencia tiene en la defensiva de Dallas.
“Es frustrante estar afuera lastimado“, señaló Lee. “Sientes que decepcionas a tus compañeros. Regresé muy motivado, sobre todo por el apoyo que recibí las semanas anteriores. Quería regresar y ayudar a este equipo a ganar“.
Los Cowboys han sufrido más sin Lee que sin el estelar corredor Ezekiel Elliott, quien cumplió el quinto de seis partidos de suspensión.
La presencia de Lee ocultó la ausencia del ala defensiva David Irving, a pesar de que los Cowboys presionaron muy poco a Manning, en especial en la primera mitad. También eclipsó errores de su propia secundaria y ayudó a contener al ataque terrestre de los neoyorquinos, que sólo sumaron 102 yardas por esa vía.
“La gran ayuda que recibo es de los entrenadores. El entrenador Eberflus (Matt, entrenador de linebackers) me tiene listo para jugar cada semana”, afirmó Lee. “Tuve la ventaja de que me comencé a preparar hace un par de semanas, porque mi meta era regresar hoy (el domingo).
“Cuando juegas contra Eli Manning es extremadamente difícil. Es un quarterback del Salón de la Fama. Tienes que venir con tu mejor juego y estar bien preparado“, agregó.
El único problema que tiene Lee es que el desgaste al que se somete es la razón por la que se lesiona con frecuencia.
“Tengo que estar preparado para todo. Tengo que ser inteligente. Hay lesiones que se pueden evitar o minimizar su riesgo. Es mi trabajo estar disponible para jugar cada domingo. No hay excusas“, señaló.
Los Cowboys ligaron victorias, pero Lee y el resto del equipo están conscientes de que necesitan ganar los últimos tres partidos de la temporada si desean pelear hasta el final por un boleto a la Postemporada, aunque su destino no esté en sus manos.
“Seguimos como al principio, día a día y juego a juego”, aseguró Lee. “Tenemos que hacer nuestro trabajo sin pensar en los resultados de otros partidos. Nosotros mismos nos metimos en este hoyo y tenemos que encontrar maneras de salir de él”.