Esta ofensiva es una consecuencia del desarrollo de los acuerdos con la multinacional Nike y, según el club, le sitúa, junto al Manchester United inglés y Juventus italiano, como a uno de los equipos con una red comercial más potente del mundo.

La red de distribución principal serán los 58.000 puntos de venta con los que trabaja habitualmente Nike, a los que se añadirán otros canales para reforzar la presencia en algunos países, para lo que se espera cerrar próximamente una negociación al respecto en Japón.

El club tiene previsto también para este año aumentar las líneas de negocio para atender la nueva demanda, como por ejemplo accesorios para la práctica del golf, relojes oficiales de alta gama o CD interactivos.

Los planes de competitividad e internacionalización de la entidad azulgrana para 2003 contemplan en los proyectos mundiales de mercadotecnia la consolidación del Barcelona como marca de primera fila en el mundo, así como la consecución de nuevos ingresos, el aumento de afiliaciones al carné de simpatizante 'Gent del Barca' y la fundación de escuelas de fútbol en determinados países.

El director comercial del club, Esteve Calzada, afirma a través de la página electrónica azulgrana que el incremento de la red comercial mundial a través de Nike era totalmente necesaria porque "las transmisiones de televisión y las nuevas tecnologías han aumentado sensiblemente el conocimiento y la afición por el equipo en muchos países".

"Habíamos pasado a tener consumidores potenciales de nuestros productos y servicios en lugares que hasta ahora no atendíamos muy bien", explicó Calzada. Para afrontar esta nueva etapa, desde julio de 2002 el número de propietarios de licencias para comerciar con productos Barca se ha incrementado en un 35 por ciento, según explica el club.

La sociedad FCB Merchandising canaliza el acuerdo de colaboración entre el Barcelona y Nike.