El antiguo lanzador de los Yankees, David Cone, experimentó algunos de los peores fracasos y más grandes éxitos en su paso por ambos equipos de Nueva York, convirtiéndolo en un gran recurso de perspectiva. En los playoffs de 1988, fue el autor anónimo de una columna que inspiró el resurgimiento de los Dodgers, y más tarde con los Mets, fue la figura central en una jugada que formaría parte del video de errores más grandes en la historia del béisbol.
También fue líder de posiblemente el más grande equipo de todos los tiempos, los Yankees de 1998, y en 1999, Cone lanzó un juego perfecto. Así que, cuando se dirigía a los jugadores más jóvenes, Cone les daba el mejor consejo (y esperamos que la Asociación de Jugadores y algunos equipos se beneficien de eso, en sus programas de desarrollo de jugadores) y decía esto sobre la presión: significa que los fans se preocupan por ti.
¿Los abucheos? Así demuestran su preocupación. Quieren que ganes, explicaba, están esperando que triunfes, pero cuando pierdes, esta es la manera en la que expresan lo mucho que se preocupan.
Decide por ti mismo si esto es verdad o si en realidad es un truco de Jedi necesario para compartimentar las respuestas negativas. Mientras tanto, te presentamos nuestra lista anual de las personas del mundo beisbolístico que estarán sometidas a terrible presión durante la próxima temporada.
1. David Price, Medias Rojas de Boston: El zurdo obtuvo la mayor cantidad de dinero garantizada para un lanzador en un contrato, al aceptar el acuerdo de 217 millones de dólares con los Medias Rojas y, a cambio, ha asumido la responsabilidad de dirigir al equipo que ha terminado en el sótano de las últimas dos temporadas de la División Este de la Liga Americana. Price viene de una temporada en la que registró el peor ERA de su carrera, 2.45, con 225 estrocados en 220 1/3 entradas. Pero más allá de la parte deportiva, nunca ha eludido la responsabilidad de ser el mejor lanzador de su equipo; y en Boston, uno de los mercados de béisbol más importantes, el peso de este reto es aún mayor.
2. Andrew Friedman, presidente, Dodgers de Los Angeles: Está en sus segunda temporada completa al frente de las operaciones beisbolísticas de los Dodgers y su trabajo está bajo tremenda vigilancia, por la forma en la que el equipo comprado por el más alto precio y operado con una nómina récord ha sido superado en lo que se refiere a ofertas, en los últimos seis meses. Los Rangers sacaron a los Dodgers de la jugada y contrataron a Cole Hamels en julio, y después los Dimondbacks presentaron una oferta tardía por Zack Greinke; según los informes, los Dodgers también participaron en las negociaciones por Johnny Cueto y Mike Leake, y no consiguieron a ninguno.
Con el tiempo, es posible que se justifique la decisión de Friedman de apartarse de los contratos excesivos. Pero, mientras tanto, los Dodgers deben continuar el negocio de intentar alargar el récord de éxitos establecido bajo el antiguo gerente general Ned Colletti y el manager Don Mattingly, quienes ganaron la División Oeste de la Liga Nacional en repetidas ocasiones: 2013, 2014 y 2015.
Huelga decir que si los Dodgers continúan su relativamente tranquila offseason, los fans del equipo vigilarán de cerca los eventos del 2016. Sin embargo, también lo hará la gente dentro del edificio: desde los jefes de Friedman hasta el lanzador Clayton Kershaw, quien tendrá la oportunidad de optar por rescindir su contrato después de la temporada 2018.
3. Mike Rizzo, gerente, Nacionales de Washington: Comenzando con la decisión de despedir a Matt Williams, el gerente cuidadosamente seleccionado por Rizzo, los ejecutivos rivales han observado cada uno de los movimientos de los Nacionales este verano y han buscado las huellas de los propietarios del equipo, tras una terriblemente decepcionante temporada en el 2015. El cuerpo de lanzadores nunca dominó como hubieran esperado los Nacionales, y a medida que avanzaba el año, las lesiones y los problemas de rendimiento afectaron seriamente la alineación y el bullpen, lo que dio lugar al intercambio de Jonathan Papelbon y la relegación de Drew Storen. A finales del año, la imagen de los Nacionales más célebre fue aquella de Papelbon agarrando a Bryce Harper por el cuello en una pelea en el dugout.
Harper se encuentra entre los mejores beisbolistas, y con Max Scherzer, Stephen Strasburg, Anthony Rendón y ahora Daniel Murphy, Washington tiene un excelente núcleo de jugadores, al tiempo que compite en una liga cargada de equipos que están perdiendo como estrategia o llevando a cabo completas restructuras que han reducido sus presupuestos. Así que los Nacionales podrían recuperarse.
Pero si no lo hacen, como bien lo sabe Matt Williams, el gerente y el gerente general son los responsables.
4. Stephen Strasburg, Nacionales: El próximo otoño será agente libre y, como cliente de Scott Boras, es muy poco probable que llegue a un acuerdo con Washington antes de llegar al mercado. Además, considerando la escasez de lanzadores el próximo otoño, no existe motivo para que no salga a subasta. Strasburg cumplirá 28 años en julio, y Price, Scherzer, Zack Greinke y otros le pueden decir que ser un lanzador de élite de la libre agencia estos días puede ser muy lucrativo.
5. Brett Anderson, Dodgers: Nadie en el béisbol tiene más que ganar con una sólida temporada 2016, que el zurdo de los Dodgers, quien cumplirá 28 años en febrero. Es considerado como un lanzador talentoso, aunque propenso a las lesiones, motivo por el cual los Dodgers le extendieron una oferta calificada a principios de la offseason, y al aceptar el acuerdo por un año, Anderson se consolidará como uno de los mejores y más importantes elementos de la débil clase de agentes libres del próximo otoño. Si completa todas las salidas programadas en el 2016 y lanza a nivel de un Todos Estrellas, podría estar encaminado a ganar muchas decenas de millones de dólares el próximo otoño.
6. Mark Shapiro y Ross Atkins, ejecutivos, Azulejos de Toronto: Stan Kasten, presidente de los Dodgers, habló la semana pasada sobre el control que se tiene sobre los ejecutivos de primera línea, al citar la legendaria línea de Hyman Roth en El Padrino II: "Este es el negocio que hemos elegido." Así que nadie debería sentir pena por Shapiro y Atkins, presidente y gerente general de los Blue Jays, respectivamente, en su primera temporada completa después de su cambio de los Indians a los Blue Jays.
Sin embargo, la presión que recae sobre sus hombros es ridícula y simple, por el contexto desde el que trabajan: o llegan a los playoffs o mueren en el intento.
Ese es el aparente estándar creado por el antiguo gerente general, Alex Anthopoulos, el año pasado, cuando los Blue Jays llegaron a la postemporada por primera vez en 22 temporadas.
Sin embargo, Anthopoulos sorprendió a los Azulejos al marcharse, alegando que trabajar con Shapiro no era adecuado para él. Atkins fue contratado en su lugar y ahora, si los Jays no llegan a la postemporada el próximo año, el desempeño del nuevo gerente general y presidente se comparará con el de Anthopoulos, quien nació y se crio en Canadá y adquirió enorme popularidad gracias a la participación de los Azulejos en los playoffs.
Los Azulejos cuentan con una alineación muy sólida: desde el MVP Josh Donaldson hasta Jose Bautista y el campo corto Troy Tulowitzki, y podrían predominar en la División Este de la Liga Americana; y si lo hacen, entonces Shapiro y Atkins tendrían un pequeño respiro para hacer su trabajo en el futuro, con una franquicia que necesita una inyección de joven talento. Pero si los Blue Jays tienen problemas por cualquier motivo, entonces la directiva deberá tomar la desoladora decisión de si vender a media temporada a agentes libres potenciales, como Bautista y Edwin Encarnación -en el primer año después de Anthopoulos, la directiva fue súper agresiva en los intercambios con vistas a meter a Toronto en la postemporada-.
La situación es absurda y superficial, pero también real. No puedo recordar a ningún otro grupo de directivos asumiendo un cargo en la MLB, con tanta presión inmediata para ganar.
7. Mike Trout, Angelinos de Los Angeles: Albert Pujols se sometió a una cirugía en el pie y los Angelinos no saben con certeza cuándo regresará a la alineación. Así que, aunque Andrelton Simmons indudablemente ayudará en la defensa y como lanzador, la ofensiva, que cayó del primer puesto en carreras anotadas en el 2014 al vigésimo lugar en el 2015, es una verdadera preocupación. Actualmente, hay pocos motivos para que los equipos adversarios traten de llevarse a Trout, cuyos turnos al bate con corredores en posición anotadora cayeron de 118 en el 2014, a 88 en el 2015, aun cuando tuvo más turnos al bate en el puesto número 3.
Los Angelinos deben encontrar la forma de darle mayor protección en la alineación, ya sea antes o después de él. Pero cada vez más, Trout es una isla en medio de una disminuida alineación.
El dueño Arte Moreno ha indicado que ya se realizaron los gastos más importantes del invierno, pero el mercado de bateadores disponibles continúa siendo abundante y, aparentemente, los Angels no parecen tener una solución a largo plazo para el campo izquierdo, al menos aún no. Definitivamente tienen una necesidad en la alineación.
8. Randal Grichuk y Stephen Piscotty, Cardenales de San Luis: La esperanza de los Cardenales antes de la offseason era conseguir a David Price, cuyos lanzamientos podrían disipar las preocupaciones sobre una ofensiva cada vez más disminuida. Sin embargo, Price eligió a Boston y los Cardenales trataron de contratar de nuevo a Jason Heyward, cosa que tampoco pudieron hacer, conformándose con el lanzador Mike Leake.
Dado que Yadier Molina necesitó someterse nuevamente a cirugía del pulgar y Matt Holliday está por cumplir 36 años, la alineación podría ser un problema, como lo fue en ocasiones la temporada pasada. No hay manera de ignorar esta simple verdad: los Cardenales necesitan que Grichuk y Piscotty bateen, y necesitan que bateen mucho, y que generen algo de poder para una alineación que ha sufrido una pronunciada disminución en jonrones en las temporadas recientes. He aquí el total de jonrones de los Cardenales por temporada:
2011: 162
2012: 159
2013: 125
2014: 105
2015: 137
Grichuk, de 24 años, registró 23 dobles, 7 triples y 17 jonrones en solo 350 apariciones al plato, y Piscotty llegó a media temporada y contribuyó bastante, al batear .305 con siete jonrones en 63 juegos. Heyward ya no está, Jon Jay ya no está, y no hay manera de saber cuántos juegos Holliday y Molina jugarán. Grichuk y Piscotty deben ayudar a guiar la ofensiva.
9. Zack Greinke, Diamondbacks de Arizona: Greinke esperó y esperó a que se concretara una mejor oferta que la propuesta de 155 millones de dólares por cinco años de los Dodgers, así que cuando Arizona presentó una oferta, Greinke (siendo el acumulador de información beisbolística que es) pudo proporcionar una recitación inmediata y completa, no solo del equipo de las Grandes Ligas de Arizona, sino también del sistema de sucursales de liga menor de los Diamondbacks.
Ahora ocupa el primer puesto de una rotación que quedó en el vigésimo tercer lugar en ERA en el 2015 y vigésimo noveno en entradas. Dada su edad y el tamaño de su contrato, las expectativas de los Diamondbacks son claras: fue contratado para ayudar al equipo a ganar ahora. Tan pronto como el 2016.
10. José Fernández, Marlins de Miami: El próximo año será su primera temporada completa desde que se sometiera a una cirugía Tommy John, y ya se habla de sus límites en cuanto a entradas y los planes que los Marlins tienen para él. Si Miami tiene problemas, tendría sentido que fuera nuevamente a probar suerte en el mercado, para ver qué pueden obtener de un lanzador que estará elegible para la agencia libre en el otoño del 2018. Si los Marlins ganan bajo la dirección de Don Mattingly en su primer año, Fernández marcará el camino.
Esto es mucho para un lanzador que cumplirá 24 años en la fecha límite del mercado de intercambios, el 31 de julio de 2016.