Lo que pudo haber sido la primera victoria de un piloto mexicano en la historia de las 500 millas de Indianapolis terminó con Pato O'Ward contra el muro a menos de ocho vueltas del final, pero el regio no se arrepiente de nada, todo lo volvería a hacer igual, intentaría pasar a Marcus Ericsson por dentro, salvo que en el futuro no será tan gentil con el sueco.
Veinticuatro horas después de la edición 107 de Indy 500, Pato O'Ward, piloto del equipo Arrow McLaren, ha digerido lo sucedido en el legendario superóvalo de 2.5 millas (4.022 kilómetros), pero no cambia de opinión al juzgar como sucia la maniobra del piloto de Ganassi que lo hizo terminar su carrera.
Era la primera rearrancada de tres que tuvo la carrera por bandera roja, ésta provocada por el accidente de Felix Rosenqvist. O'Ward comandaba el pelotón con Ericsson detrás y Josef Newgarden al acecho. La bandera verde ondeó cuando restaban ocho giros de los 200 pactados y empezó la lucha: Newgarden atacó por fuera y se puso primero, Ericsson pasó a Pato, pero el mexicano respondió con un movimiento por la parte interna de la curva tres. Al ver el movimiento de Pato, Ericsson se bajó en la curva para bloquearlo, no le dejó espacio y lo mandó al pasto. O'Ward se trompeó y chocó contra el muro.
"La próxima vez no cambiaría nada, más que quedarme en mi propia línea y pensaría dos veces antes de darle el espacio que él no me dio a mí. La próxima vez estaré seguro de no irme al muro solo", dijo Pato O'Ward, con una reflexión en frío, donde no retrocede un centímetro sobre sus primeras reacciones luego del accidente.
Hay opiniones sobre si Pato O'Ward pecó de impaciente al tirarse al rebase tan pronto, pero el joven de 24 años no piensa lo mismo, habría hecho lo mismo siempre, con la diferencia de que no habría sido tan gentil con el piloto de Ganassi.
"Yo, naturalmente, me fui moviendo con él (Ericsson), porque yo no quería chocar, ¿estamos de acuerdo? Obvio si ya lo ves y dices 'eso es lo que hubiera pasado', pues no me hubiera movido y los dos al muro, pero lo natural de mí era salvarme. Pero me mandó hacia abajo y tan pronto agarré el pasto, me trompeé", narró Pato O'Ward sobre la maniobra.
"Porque no soy marrano, yo no lo quería sacar, yo le quería dar el espacio, pero él me tenía que dar el espacio, él escogió por fuera, te quedas por fuera, no me cortas, pero todo pasa demasiado rápido".
Incluso, O'Ward dijo que la reacción de su equipo, comandado por Zak Brown después de la carrera fue que no esperaban nada diferente de él, "ibas por todo, como tenía que haber sido".
El domingo 28 de mayo, Pato O'Ward lideró 39 vueltas de las 500 Millas de Indy, fue el piloto que más comandó la carrera, pero no es que todo hubiera sido tan sencillo. Luego de una arrancada donde se fue al séptimo lugar y comenzó a remontar posiciones, hasta que tras la primera detención en pits tomó la punta junto con su compañero en McLaren, Felix Rosenqvist.
Más tarde en la tercera detención hubo un problema para repostar combustible, el tanque por alguna razón no se llenaba. Eso provocó que Pato O'Ward tuviera que entrar por cuarta vez, tres vueltas antes de lo esperado y que tuviera que cambiar, más adelante, su estrategia para remediarlo.
El mexicano iba fuera de secuencia con los líderes y era impensable que desde la posición 10 o 12 pudiera remontar de nuevo ya que el "aeroscreen" de los monoplazas de Indy hace muy complicado rebasar para los autos que están dentro del pelotón. La turbulencia que se produce de aire sucio no fomenta lo adelantamientos.
Así que, sorpresivamente, en la vuelta 180, Pato hizo un giro magistral para entrar a pits, cargar la gasolina suficiente para las 20 vueltas que faltaban, algo que es conocido como un "splash and dash" y logró salir en el Top 4 con neumáticos frescos.
"El tanque de combustible nos forzó a hacer esa estrategia, pero terminó jalando", explicó Pato.
El escenario estaba puesto, iba adelante, las circunstancias y el manejo a su favor en una pista donde las cosas se le dan muy bien, pero vino el percance con Ericsson y ahí terminó todo. La victoria fue para el piloto de Penske, Josef Newgarden.
Ahora, Pato O'Ward, quien en 2022 había sido segundo en Indy 500 sólo detrás del mismo Ericsson, es tercero en el campeonato de IndyCar con 185 puntos, detrás de Alex Palou (Ganassi) que tiene 219 y de 199 de Ericsson.
La próxima carrera del serial será el 4 de junio en el circuito callejero de Detroit.