Velasco, por otro desafío supremo

El argentino Julio Velasco, el mejor entrenador de este deporte del siglo XX y que condujo a la selección italiana a ser la mejor del mundo, vuelve a la alta competencia al frente de la selección checa, que quiere recuperar con él su prestigio perdido

BU ENOS AIRES -- Julio Velasco, el mejor entrenador del siglo XX, el hombre que condujo a la selección italiana hasta el primer puesto de la clasificación mundial, regresa a la alta competición al frente de la selección checa, decimoséptima del universo, que espera recuperar con este "mago" el prestigio perdido.

El retorno de Velasco estará rodeado de una aureola especial, no en vano será en su país natal, veinte años después de contribuir como técnico asistente a la obtención de la medalla de bronce por la selección albiceleste.

"Para mí, va a ser una gran emoción volver, aunque sea con otra camiseta", aseguró Velasco, primer entrenador extranjero en la historia de la República Checa, que admitió con humildad que aceptó dirigir a esa selección porque "fue la única propuesta concreta" que recibió.

"Es un país que me gusta y que además cuenta con una gran historia en esta disciplina. No nos olvidemos que durante muchos años, la selección checa junto con la de la Unión Soviética fueron grandes protagonistas", recalcó.

SU PASO EXITOSO POR ITALIA
Velasco, que ganó con Italia los mundiales de Río de Janeiro 90 y Atenas 94, se ha marcado ahora como objetivo la octava plaza. Y, paso a paso, promete ir avanzando hasta conducir a sus nuevos jugadores hasta la cima, al igual que hiciese años atrás con los italianos.

Los éxitos en el Panini Módena, club con el que había ganado tres títulos de Liga, tres Copas de Italia, una Recopa y tres subcampeonatos de la Copa de Europa, fueron su aval para ser elegido máximo responsable técnico del voleibol masculino italiano en mayo de 1989.

Hasta su llegada, los resultados italianos en competiciones internacionales habían sido muy discretos. Su carisma, planificación y la introducción de las más modernas tecnologías al servicio de la selección nacional comenzaron a dar frutoS.

Los éxitos se sucedieron e Italia pasó a convertirse en el gran dominador del voleibol mundial.

Su primer éxito deslumbrante fue el título de campeón de Europa en 1989 y, a partir de este momento, los triunfos se sucedieron.

Bajo su dirección, Italia se impuso en cinco ediciones de la Liga Mundial (1990, 1991, 1992, 1994 y 1995). A lo que hay que sumar además el triunfo absoluto en los Mundiales de 1990 y 1994, y los Europeos de 1993 y 1995.

En su brillante palmarés sólo han quedado dos dolorosas lagunas: los Juegos Olímpicos de Barcelona 92 y Atlanta 96.

En Barcelona, Italia partía como la principal favorita para adjudicarse la medalla de oro. Todo lo que no fuese podio sería una decepción. Y ésta fue inmensa; Italia concluyó en un discreto quinto puesto. Fue una de las mayores desilusiones del voleibol transalpino.

La preparación para Atlanta fue meticulosa y exhaustiva. Volvían a partir como máximos candidatos y estaban convencidos de que al fin, el oro sería suyo. Pero Holanda, en una final olímpica agónica, volvió a privarles del triunfo más ansiado.

Velasco anunció su renuncia definitiva. Desde entonces, se convirtió en uno de los técnicos más codiciados. Brasil, Holanda, España... Todos querían ficharle.

VOLEY FEMENINO Y FÚTBOL...
Pero Julio asumió otro reto: el voleibol femenino. Velasco aceptó la oferta. La selección femenina italiana jamás había conseguido participar en unos Juegos Olímpicos.

Velasco permaneció poco tiempo en ese cargo, pero su rendimiento fue enorme. Italia ganó la medalla de oro de los Mediterráneos que se disputaron en Bari 97. El equipo femenino italiano estuvo en Sydney, y hoy está considerado como uno de los mejores del mundo.

Algunos métodos y directrices de la federación italiana no le convencieron y eligió el mundo del fútbol. Silvio Berlusconi, hoy presidente de la República Italiana y entonces presidente del Milán, ya le había "tentado" anteriormente.

El 28 de abril de 1996, el diario deportivo milanés "La Gazzetta dello Sport" publicaba en portada que Berlusconi "desea a Velasco en su club, pues aprecia sus dotes de "ganador".

"Es una noticia curiosa, ya que soy entrenador de voleibol y no de fútbol, aunque sea un gran aficionado a este deporte, al cual he jugado", replicaba Velasco.

En 1998 fue nombrado director general del Lazio. Esa misma temporada el equipo romano fue subcampeón de la Copa de la UEFA, y en 1999 se proclamó campeón de la Recopa, tras ganar en la final al Mallorca (2-1).

Un año más tarde se convirtió en asesor de Massimo Moratti, presidente del Inter de Milán. Pero él continuaba amando al voleibol y ansiaba regresar a las canchas.

... Y DE VUELTA A SU MÁXIMA PASIÓN
El pasado 29 de enero, un exultante Pavel Kucera, presidente de la federación checa de voleibol, anunciaba al mundo su gran fichaje: Julio Velasco, el mejor entrenador del siglo que, a sus cincuenta años, asumió un nuevo desafío.

"Siempre es más lindo escalar la montaña que ver el paisaje desde arriba", asegura.

- EFE

 ENVÍALO | MÁS ENVIADOS

República Checa
viernes, 27 de septiembre
Portada