"Me sentí muy mal dentro de la cancha. No puedo entender que en un torneo como el de Buenos Aires pongan una pelota tan rápida. No se puede jugar, encima había mucho viento. Siempre estuve muy incomodo", dijo en caliente Gaudio.

Después de la crítica para la organización, el tenista de 24 años reconoció que lo más importante es haber avanzado de ronda pero se negó a elogiar una parte de su juego porque jugó "menos mal" que el argentino de nacimiento Meligeni.

PRIMER CAPITULO DE UNA LARGA HISTORIA En el primer set, las cosas resultaron parejas hasta el cuarto game. Allí fue cuando Fernando Meligeni le quebró el saque a Gaudio y se puso 3-1. Motivado por los aplausos del público, su público, el Gato no tardó en reaccionar y a fuerza de golpes profundos fue él quién vulneró el saque de su rival.

Meligeni hacía su juego: meter todo en la cancha y dejar que Gaudio, un "gato con pocas pulgas", se cansara de rematar y la tirara afuera. Sin sacarse ventajas llegaron al tie break.

En el noveno punto una doble falta de Meligeni (tres en el set) dejo a Gaudio 5-4 de cara a la victoria. El número 20 del mundo no falló con sus servicios y se adjudicó el primer parcial por un ajustado 7-6 (7-4).

EL FASTIDIO QUE LO SACO DEL PARTIDOEn el segundo set Meligeni siguió dando batalla. Ya desde el principio del tie break se había animado a atacar en busca de los puntos.

Además el nacionalizado brasileño le sumó una dosis de humor a su buen momento tenístico. Una pirueta para volear, muecas al público por el castigo de Gaudio y hasta muestras de alivio por una pelota que se fue larga.

En el primer game Gaudio mostró su peor cara. La del tenista fastidioso cuando las cosas no salen. Que el viento, que las pelotitas, por suerte para el, el público comenzó a aplaudirlo y así levantó un break point y se llevó el primer juego.

Continuaban las payasadas de Meligeni, que definitivamente se ganó a la gente que antes no le perdonaba su "nueva" bandera brasileña.

El rubio, 79 del escalafón mundial, relató con un "ay, ay, ay" cuando un magistral globo de Gaudio le picó detrás suyo. De la bronca revoleó la pelotita y dio en el techo del asiento del umpire (juez). Afortunadamente sin causar consecuencias.

Meligeni se impuso en el séptimo y octavo game tras recuperarse de dos breaks de Gaudio. El Gato descontó pero finalmente cayó por 6-4.

Antes del cierre, otra perlita: en la platea sonó un "bip bip" y el brasileño se animó a preguntar si ese era el sonido de un conocido artefacto de telefonía celular. El umpire entró en el juego y le contestó que era de una radio, para sorpresa de todos.

RECUPERO LA SONRISA Y LO MEJOR DE SI El set definitivo fue increíble para aquellos que estaban disfrutando de un encuentro parejo. Gaudio mantuvo su saque, pese a contar con cuatro break points en contra, y se impuso en el segundo game, el primer quiebre para el 6-0 final.

Meligeni acusó el desgaste físico de casi tres horas de juego y tras haber eliminado a Mariano Puerta de la primera ronda, se despide de Buenos Aires, su antigua casa.

"La pelota me trasmitía inseguridad porque la tocás y se puede ir a la tribuna. Si quieren una pelota mas chiquita que traigan una de golf", ironizó Gaudio antes de irse a descansar porque más tarde jugaba el dobles con Mariano Zabaleta contra Lucas Arnold-David Nalbandian, la dupla titular de Copa Davis.

Su próximo rival en singles saldrá del ganador del match entre Agustín Calleri y Juan Ignacio Chela.