La carrera de Ezequiel Maderna, oriundo de La Plata, Buenos Aires, arrancó en el profesionalismo tras una participación en los Juegos de Pekín, 2008: bautizado deportivamente como “El Olímpico” y lleno de posibilidades entre los pesos medianos.
De la mano de su padre y con grandes expectativas, comenzó así justamente en el 2008 y llegó a ser campeón argentino de los super medianos conducido por Rubén Paniagua, el mismo que forjó a Sergio “Maravilla” Martínez. Luego, como suele suceder, no todo funcionó como se debía. Vinieron algunas derrotas categóricas, incluyendo salidas al extranjero en las que nunca logró un triunfo y tal vez, no lo sabemos, se fueron diluyendo sus esperanzas de algo grande.
De hecho, el 4 de junio de 2016 cayó en el cuarto asalto (fue nocaut técnico) ante un Beterviev que venía invicto en 9 peleas. Fue en Montreal, Canadá. “Creo que no puedo pelear en medio pesado, doy demasiadas ventajas”, dijo aquella vez y –cosas de la vida- ahora es el campeón Internacional del Consejo en esa división.
Este sábado, en la caliente pantalla de ESPN KNOCK OUT, Maderna sacudió todas las estanterías al noquear en el quinto asalto al eslovaco Karol Itauma, en Wembley, Inglaterra. Justo en la misma velada en la que Artur Beterviev noqueó en dramática pelea al local Anthony Yarde, reteniendo sus coronas de los medio pesados WBC, IBF y WBO, con los relatos de Renato Bermúdez, los comentarios de Salvador “Chava” Rodríguez, Julius Julianis y la Tarjeta de Hierro de Fernando Barbosa.
Fue, sin dudas, una gran sorpresa para todos y la prueba de que jamás se puede subestimar a nadie y menos en boxeo. Si no era el favorito, si peleaba de visitante, si enfrentaba a un boxeador muy joven -22 años, 14 menos que el argentino-, con un record de 9 peleas todas ganadas y 7 antes del límite, todo indicaba que el
zurdo radicado en Inglaterra iba a sumar una victoria más. En el boxeo, como en la vida, dos más dos no siempre es cuatro y todo eso quedó en la lona. Una impecable derecha a la cabeza provocó un nocaut indiscutible para “El Olímpico”. Enorme triunfo, sin dudas.
Itauma pasó por Buenos Aires en 2018 y se alzó con la medalla dorada en el campeonato Juvenil Olímpico. Nacido en Eslovaquia pero radicado en Inglaterra, era el lógico favorito.
Maderna, a los 36 años, queda ahora con 29 peleas ganadas, 19 antes del límite, 10 derrotas (4 de ellas por fuera de combate) y con un título Internacional que estaba vacante y que le asegurará peleas futuras por bolsas interesantes.
Fue una noche de enero, en Wembley, cuando un hombre que jamás bajó los brazos, demostró que los sueños siempre pueden hacerse realidad.