El pesaje estuvo enmarcado por la colorida colonia puertorriqueña que fue a alentar a su boxeador, Subriel Matías, quien subió a la balanza con un pasamontaña negro que no permitió ver su rostro.
Tranquilo y sonriente, también lo hizo Jeremías Ponce, fue el primero en pesarse y registró 139.5 libras (63,276 kilogramos) un poco menos que el límite de 140 (63,500). Matías a su vez, dio 139.25 (63,163) o sea que ninguno tuvo problemas.
El argentino, de acuerdo con su estilo, aseguró que será una gran pelea y cundo le tocó dar un pronóstico dijo que ganaba y por nocaut. Matías, a su vez, elogió a su rival y fue medido en sus palabras. Nada de empujones ni gritos ni amenazas. Dos profesionales.
Mientras cae la nieve en las calles, se presiente que la noche del sábado será un infierno en The Armory.
En la otra pelea estelar, Alberto Palmetta (147 libras, limite exacto de los welters con 66,678 Kg.) se medirá con el local Jamal James (1456.7, o sea 66,542Kg). James es el local y eso no le preocupa demasiado a Palmetta, que como manifestó en esta página, quiere ganar sin dejar duda alguna y si es posible, sin necesidad de jurados.
La transmisión desde Minneapolis será a partir de las 23 por ESPN KNOCK OUT con los relatos de Renato Bermúdez, Salvador “Chava” Rodríguez.
Una hora antes habrá una previa muy especial conducida por Sergio “Maravilla” Martínez y una mesa de grandes protagonistas.
ESPN KNOCK OUT, a través de ESPN y STAR+ tendrá así una cobertura de primer nivel para una noche llena de emociones.
La pelea será por el campeonato mundial IBF de los superligeros, dejado vacante por Josh Taylor. Mientras Ponce llega invicto en 30 peleas con 20 KO, Matías suma 18 victorias, todas antes del límite, y una derrota.
La estadística de Boxrec informa que mientras Ponce ha disputado 150 rounds como rentado, Matías tiene 80 rondas realizadas, apenas un poco más de la mitad de lo efectuado por Ponce, quien tiene una efectividad del 66,67% contra un 94,74% del boxeador de Puerto Rico.
Son estadísticas, pero definen también el perfil de un noqueador como Subriel, y una efectividad interesante para el argentino. Es que da la sensación de que Matías tiene el poder suficiente para terminar la pelea de un solo golpe, mientras que el argentino es un demoledor constante.
Mientras uno de los interrogantes es que puede ocurrir con Matías si llega a pasar por una situación de algo riesgo, otra pregunta caliente es que puede dar el puertorriqueño en una pelea que se alargue round a round. Claro que siempre va a estar rondando el nocaut tratándose de un pegador como Subriel, aunque su defensa no sea de las mejores. Pero tiene a su favor, tremendos uppercuts que lastiman profundamente.
Se estima que la estrategia del argentino será la habitual en él: imponer la pelea corta, poner mucha presión, ahogar al rival y no dejarlo avanzar, sobre todo porque Matías tiene largos brazos que utiliza muy bien. Presionar no significaría para Ponce un sinónimo de buscar la pelea abierta, porque no se pueden correr semejantes riesgos ante un peleador-pegador.
Como dice nuestro compañero “Chava” Rodríguez, Ponce deberá hacer la pelea perfecta sin cometer errores, porque todo indica que Matías es capaz de definir de un solo golpe.
El trabajo al cuerpo y la cantidad de golpes lanzados puede ser un factor a favor del argentino, pero no olvidar y estar muy atentos, que en la pelea fragorosa y de “tú a tú” que pueda plantarse, puede ocurrir cualquier cosa y siempre hay un margen para el que pega más. ¿Y quién aguanta más? Eso no lo sabremos hasta ese sábado, cuando se enfrenten ambos, porque es una pelea intrigante, llena de variantes, entre dos boxeadores que tendrán el examen quizás más difícil que hayan tenido hasta ahora.
Y la pelea con la que ambos vienen soñando desde hace mucho tiempo.