Hace más de un mes que el jugador franco-argentino se mantiene en absoluto silencio, tras haber ofrecido el 9 de octubre una conferencia de prensa en la que hizo un "mea culpa" por haber acusado 48 horas antes al club de haberlo hecho jugar antes de tiempo.

El jugador se lesionó el 31 de julio y después de haber jugado a inicios de octubre dos partidos en cuatro días, volvió a tener la rodilla hinchada y a sentir fuertes dolores.

En su "arrepentimiento", se culpó a sí mismo de haber forzado su regreso a la cancha. Sin embargo, poco después renunció uno de los médicos de Juventus, que supervisaba la rehabilitación de Trezeguet, y un fiscal de Turín abrió una investigación judicial, interrogando a periodistas a los cuales había responsabilizado a Juventus de su recaída, y al propio jugador.

El fiscal desea saber si se violó la ley sobre la tutela de la salud de los trabajadores. El diagnóstico oficial habla de tendinitis del rótulo de la rodilla derecha, una inflamación que se considera entre las patologías más difíciles de curar, que puede desaparecer para siempre, o volver a presentarse, afirmó el diario Gazzetta dello Sport.