Desde los Dodgers repletos de estrellas hasta Juan Soto con traje a rayas, esto es lo que estamos viendo cuando comienzan los entrenamientos de primavera.
Después de un ajetreado invierno para el mundo del béisbol, volvemos a sentir los aires primaverales.
Los Angeles Dodgers invirtieron $1,200 millones durante la temporada baja para hacerse con los servicios de los dos principales agentes libres del mercado, Shohei Ohtani y Yoshinobu Yamamoto. Los New York Yankees, luego de su eliminación de los playoffs el año pasado, concretaron la llegada del slugger Juan Soto. Poco después de ganar 101 juegos, mejor registro de la Liga Americana, los incipientes Baltimore Orioles negociaron para traer a su rotación al as del pitcheo Corbin Burnes.
Con el reporte de lanzadores y receptores a los campamentos, veremos cómo estos movimientos (y tantos otros) se traducen en el diamante. Pedimos a nuestros expertos de ESPN en el Béisbol de Grandes Ligas que den el pistoletazo de salida de estos entrenamientos primaverales con las estrellas e historias que más los emocionan con miras a la temporada 2024.
¿Qué te entusiasma más en este inicio del Spring Training?
Buster Olney: La presión que aumentará durante todo el verano para un pequeño grupo de equipos que se enfrentan a una temporada en la que estarán obligados a ganar. Si los Dodgers no se llevan el trofeo de la Serie Mundial, su temporada será considerada un fracaso. Los Atlanta Braves están justo en el medio de su ventana de oportunidad para hacerse con un campeonato, antes de que Max Fried y Charlie Morton se declaren agentes libres. Los Philadelphia Phillies debieron haber ganado la Serie Mundial el otoño pasado y ese fracaso les servirá de impulso. La organización de los Yankees deberá dar un gigantesco paso adelante esta postemporada. Todo parece indicar que ésta será la última temporada de Alex Bregman con los Houston Astros. Los Texas Rangers deberán resistir hasta el regreso a mitad de campaña de Jacob deGrom y Max Scherzer… para después preguntarse qué podrán soportar ambos brazos a estas alturas de sus respectivas carreras mientras el equipo de Texas intenta obtener su segunda corona consecutiva. Varias novenas tienen aspiraciones de ganar la Serie Mundial todos los años, pero esta temporada tenemos un montón de equipos obligados a alzar el título.
Jeff Passan: La pelea por la supremacía en la Liga Nacional entre Braves y Dodgers, que durará toda la temporada. Con el debido respeto a los Arizona Diamondacks, campeones reinantes de la Nacional y sus antecesores en la Serie Mundial (Phillies), los Braves y Dodgers son los dos equipos más talentosos de todo el béisbol, repletos de estrellas y hambrientos de alzar otro campeonato. Sumar la mayor cantidad de victorias en la temporada regular les aseguraría la ventaja de local; y si bien la postemporada de Grandes Ligas es demasiado impredecible como para sugerir que Braves y Dodgers se mantendrán vivos para la Serie de Campeonato del Viejo Circuito, cualquier ventaja cuenta por pequeña que sea. Hablamos de dos súper equipos y las dos series que tienen previstas en la temporada regular (tres encuentros entre el 3 y 5 de mayo en Dodger Stadium y cuatro en el Truist Park entre el 13 y 16 de septiembre) podrían ser los preludios de una serie de octubre inolvidable.
Alden González: No tanto entusiasmado. Más bien, me interesa ver cómo se mantienen las expectativas que rodean a Shohei Ohtani y, en menor medida, a Yoshinobu Yamamoto. Cerca de 12 fotógrafos y camarógrafos se mantienen, poco después del amanecer, a las afueras del complejo de los Dodgers esperando captar a Ohtani a su llegada al estacionamiento de peloteros. Aproximadamente 70 representantes de los medios de comunicación asistieron a su primera sesión de entrevistas este viernes. Ese mismo día, le preguntaron al manager de los Dodgers Dave Roberts quién podría actuar como vocero ante los medios japoneses y nominó (presumo que lo hizo en son de broma) a Jason Hayward. A la mañana siguiente, Heyward compareció dos veces frente a su vestidor ante más de 10 periodistas que lo rodearon en ambas ocasiones. Heyward lo tomó con calma: “Shohei es el chico indicado para hablar sobre Shohei”. Los Dodgers han manejado bien toda la atención, pero es muy pronto.
Jesse Rogers: “Entusiasmado” podría ser la palabra equivocada; sin embargo, me interesa mucho saber cuántos conejos podrá el agente Scott Boras sacar de su gorra de béisbol. Representa a cuatro agentes libres clave. ¿Podrá conseguir cuatro equipos capaces de pagar el precio que pide a estas alturas? ¿Tres? No descartemos la posibilidad de que todo salga bien para él y sus clientes, pero ese sería un truco digno de Harry Houdini. No olvidemos que Cody Bellinger, Blake Snell, Jordan Montgomery y Matt Chapman se harán más ricos cuando y dondequiera que firmen; pero un contrato a corto plazo con cláusulas de rescisión (lo que implicaría que deberán volver a demostrar su valía ante posibles candidatos) no sería más que un premio de consolación.
David Schoenfield: Tuvimos una gran clase de novatos en 2022 (Julio Rodriguez, Adley Rutschman, Michael Harris II, Spencer Strider, Bobby Witt Jr., Jeremy Pena, Steven Kwan, George Kirby, Onell Cruz) y otros en 2023 (Corbin Carroll, Gunnar Henderson, Triston Casas, Josh Hung, Tanner Bibee, Elly De La Cruz, Eury Perez) y podríamos tener otro en 2024. Quiero ver cómo les va a Jackson Holliday, Jackson Chourio, Jackson Jobe y Jackson Merrill en los entrenamientos primaverales y especialmente, si Holliday y Chourio harán los rosters del Día Inaugural de Orioles y Brewers. ¡Y esos son los Jacksons! Tenemos en nuestra lista de peloteros para tener presentes a Wyatt Langford, Evan Carter (que vimos desempeñando un papel importante en la lucha de los Rangers por el título), Junior Caminero, Paul Skenes y Colson Montgomery, entre otros. Esta clase de novatos podría ser mejor y más profunda que las dos anteriores.
Bradford Doolittle: Sonará excesivamente sentimental, pero aquí va: no puedo decir que estoy entusiasmado de una forma excepcional dentro del entorno actual de este deporte. Por lo general, durante las dos semanas previas al inicio de los entrenamientos primaverales, siento mucha ilusión por la nueva temporada. En este momento todo es una hoja en blanco, y al estar consciente de todos los hitos que se avecinan en el ciclo anual del béisbol; o sea, los primeros juegos primaverales, el Día Inaugural, la lucha por los playoffs, peloteros emergentes, una nueva clase de exaltados al Salón de la Fama, la Serie Mundial… todo está incrustado en mi ritmo de vida. Se trata de resolver este nuevo rompecabezas: las Grandes Ligas 2024. Sin embargo, sería agradable si no hubiera tantos temas importantes de temporada baja por definir y, claro, hay hilos narrativos específicos que seguiré basándome en las tendencias y movimientos de la temporada baja. Pero disfruto más esas narrativas emergentes que aún no conocemos.
Con la excepción de Shohei Ohtani, ¿qué pelotero que acaba de cambiar de equipo te interesa más en su nuevo uniforme?
Olney: Yoshinobu Yamamoto será un espectáculo fascinante tras la hiper concentración mediática sobre él durante el invierno, su contrato récord y si su desempeño será digno de toda la atención. Varios evaluadores de talento creen que, a pesar de cobrar un sueldo digno de un primer abridor, realmente es más un pitcher de mitad de rotación que se hizo con un contrato cuantioso porque se convirtió en agente libre a una edad muy joven. ¿Será un as del pitcheo? ¿Demostrará ser un brazo de elite? ¿Le ayudará esa gran arrogancia competitiva que demostró en el pasado para adaptarse en su primer año en las Mayores? ¿Su productividad será digna de las expectativas? Yamamoto podría acallar temporalmente el sesgo en contra de pitchers de menor estatura, como lo hizo Pedro Martínez en su momento; o reforzarlo si confronta dificultades.
Passan: Quizás se deba a que Juan Soto se apresta a declararse agente libre una vez concluida la temporada, o porque los Yankees vienen de una temporada 2023 mediocre, el matrimonio entre uno de los mejores bateadores de esta generación y la franquicia más triunfadora de la historia de las Grandes Ligas ha pasado este invierno por debajo de la mesa. Todo se apresta para una gran temporada en el Bronx, y la idea de ver a Aaron Soto y Aaron Judge bateando uno después del otro es increíblemente seductora. A Soto le encanta el protagonismo. Disfruta del porche corto del jardín derecho. Y después de una temporada en la que jugó los 162 encuentros y conectó un tope personal de 35 cuadrangulares, está justo en medio del mejor momento de su carrera: 25 años, sano y listo para demostrar que habrá valido la pena que los Yankees despacharan cinco peloteros a los San Diego Padres por apenas un año de servicios de Soto.
González: Se podría argumentar que ningún otro pelotero cambió la dinámica de su nueva división más que Corbin Burnes (lo sentimos, Juan Soto). Los Orioles poseen el mejor núcleo de peloteros jóvenes de todo el béisbol. Ganaron 101 encuentros en la temporada pasada, a la vez que muchos de esos peloteros seguían en la fase de desarrollo de sus respectivas carreras. Deberían mantener su ascenso. Pero necesitaban de una transacción importante para fortalecer la parte alta de su rotación. Evidentemente, Burnes aporta esa estabilidad. En años recientes, quedó a poco de igualar el nivel que le llevó a alzar el Cy Young en 2021; no obstante, aportó mucho a la causa de los Milwaukee Brewers el año pasado con 1.017 WHIP (líder de la Liga Nacional) en 193 2/3 innings. Burnes se apresta a cumplir con el último año de su contrato, y se unirá a Kyle Bradish (que ya ha lanzado muy bien) y Grayson Rodriguez (que debería mejorar en su segundo año). Los Orioles están listos.
Rogers: Estoy de acuerdo con Jeff, pero no porque ésta sea la temporada en la que Soto podría declararse agente libre. Este invierno, estaban disponibles tres peloteros capaces de transformar la ofensiva de los Yankees y se hicieron con uno. Los otros eran Ohtani y Bellinger. Brian Cashman lleva varios años involucrado en la misión de equilibrar su alineación ofensiva con resultados aleccionadores. Joey Gallo no pudo. Tampoco Brett Gardner. Y menos Matt Carpenter. La lista de zurdos sigue y sigue. Anthony Rizzo ayudó, pero necesitaban más aportes de los bateadores zurdos. Ahora, se hicieron con uno de los mejores siniestros con el madero. A la ofensiva, es todo o nada para los Yankees. Y con la presencia de Soto, los Yankees podrían retomar la cima… suponiendo que logren mantenerse sanos.
Schoenfield: Pues bien, Yoshinobu Yamamoto cambió de equipo: de los Orix Buffaloes a los Dodgers, así que voy con él. Sus estadísticas en Japón parecen sacadas de la era de la pelota muerta: efectividades de 1.39, 1.68 y 1.16 en las últimas tres temporadas. Con su comando y pitcheos three-plus (recta que se mantiene cerca de las 95 mph, splitter y curva), firmó con los Dodgers un contrato por 12 años y $325 millones, con la firme creencia de que puede convertirse en primer abridor. Yamamoto se enfrentará a más bateadores de poder que en Japón, mientras que los niveles generales de la ofensiva nipona son muy inferiores a lo visto en Grandes Ligas, así que tendremos que ver cómo logra adaptarse a su nuevo entorno.
Doolittle: Quizás sea una reacción contraria al estilo de béisbol actualmente predominante en las Mayores, pero me siento cada vez más enamorado de los bateadores de la vieja escuela con altos promedios ofensivos que controlan el bate y logran que los pitchers ponchadores hagan pataletas. Por eso, Luis Arraez se ha convertido en uno de mis peloteros activos favoritos. En ese sentido, estoy muy ansioso por ver si Jung Hoo Lee puede convertirse en esa clase de bateador encabezando la alineación diaria de los San Francisco Giants, quizás con un poco más de consistencia. En los últimos dos años jugando con los Kiwoon Heroes, negoció 115 boletos y se ponchó en apenas 55 turnos. Ligó para .340 en siete temporadas en la liga coreana; la primera de ellas con solo 18 años. No digo que todo eso logrará trasladarse exitosamente al Béisbol de Grandes Ligas, pero será genial verle intentándolo.
¿Qué equipo te interesa hoy mucho más que en la primavera pasada?
Olney: Los Boston Red Sox. Hace un año, estaban a la deriva en los márgenes de la contención. Actualmente, Boston es un equipo que se enfrenta a un serio proceso de transición y problemas serios. Olvídense del cortés título de “asesor”: Theo Epstein será la voz más influyente dentro de las operaciones deportivas y el manager Alex Cora se apresta a cumplir con el último año de su contrato en un momento en el cual la organización parece confrontar serios problemas económicos. Nos hemos acostumbrado a ver a los Red Sox como una superpotencia en lo financiero y eterno contendor al campeonato, pero actualmente parecen estar en el punto más alejado de semejante estatura en los últimos 25 años, especialmente considerando que forman parte de una complicada División Este de la Liga Americana, que se ha hecho mucho más formidable gracias al surgimiento de los Orioles. Será interesante ver los primeros pasos dados por Epstein y el jefe de operaciones de béisbol Craig Breslow en su trabajo para restaurar el señorío de los Red Sox.
Passan: Aún podría faltar un año para que los Detroit Tigers alcen el título del Centro de la Liga Americana. Pero si existe una división presta para ser dominada por un equipo en ascenso, es precisamente la Central del Joven Circuito. El campeón reinante Minnesota Twins ha firmado tres agentes libres este invierno (Carlos Santana, Jay Jackson, Josh Staumont) y perdieron los servicios de Sonny Gray, que quedó segundo en la votación al Cy Young de la Americana. Los Cleveland Guardians han hecho mucho menos. Los Kansas City Royals ganaron músculo con varios agentes libres, pero vienen de sufrir una campaña con 106 derrotas. Esto nos deja un camino relativamente despejado para un equipo de Detroit que cuenta con talento joven establecido en las Mayores (liderado por el zurdo Tarik Skubal y el jardinero Riley Greene) con más en camino. Colt Keith debería ser el camarero titular luego de signar una extensión previa a su debut. Y tengan presente a Jackson Jobe. La tercera selección general del draft 2021 se moverá rápidamente y no debería sorprender a nadie su presencia en el Comerica Park en 2024.
González: Los D-Backs, de lejos. No los consideré un equipo contendor a estas alturas del año pasado; sin embargo, llegaron hasta la Serie Mundial. Pero lo que despierta mi interés es la forma en la que han duplicado la apuesta. Los D-Backs pudieron haber preferido la discreción tras la temporada baja monstruosa de los Dodgers. Pudieron (al igual que tantos equipos) excusarse con la incertidumbre sobre sus derechos de TV regional para no invertir. Por el contrario, comprometieron $80 millones para firmar a Eduardo Rodriguez, una pieza que encaja perfectamente en los puestos medios de su rotación, e invirtieron más de $50 millones para contratar a Joc Pedersen y traer de vuelta a Lourdes Gurriel Jr. No son mejores que los Dodgers, pero se ubican entre los cinco mejores de la Liga Nacional.
Rogers: Los Cincinnati Reds. En última instancia, podríamos mirar en retrospectiva y preguntarnos por qué no vimos venir esta explosión, considerando que mostraron suficientes señales el año pasado. No estoy convencido de que pueda darse todo, pero de todos esos equipos de segunda o tercera categoría, creo que Cincinnati tienen la mejor probabilidad de dar un salto importante en una división accesible. Probablemente dependerá de su staff joven, pero en lo que respecta a repertorio, Hunter Greene, Nick Lodolo, Graham Ashcraft y Brandon Williamson lo tienen todo. Ahora deben aprovecharlo mejor. La combinación de talentos sobre el montículo y en el terreno convierten a los Reds en contendores en el Centro de la Nacional… y mi favorito para ganar la división.
Schoenfield: Los Orioles. Hace un año, venían de sumar récord 83-79 y parecían ser un equipo montado en el potro de los .500. Interesante, claro, pero no necesariamente convincente. Ahora vienen de una temporada con 101 victorias, la inclusión de Holliday y Burnes y tienen un grupo de jóvenes peloteros y novatos interesantes como Jordan Westburg, Heston Kjerstad y Coby Mayo, capaces de impactar en la alineación. Puedo ver a Grayson Rodriguez convertido en All-Star en su segunda campaña. Además, tienen a un joven receptor como Samuel Basallo, que podría ser uno de los mejores tres prospectos al final de temporada. Los días de gloria han vuelto a Baltimore y sospecho que podría ser el equipo que vea jugar más en 2024.
Doolittle: Los Royals. No, lo digo en serio. El año pasado, me molesté mucho con ellos porque no parecían hacer nada bien como organización. Y no estoy seguro de que eso haya cambiado. Por un lado, no creo que haya visto alguna lista de 100 mejores prospectos este año que incluya un solo pelotero de los Royals. ¿Cómo es eso posible para una organización cuyo equipo grande viene de sufrir 105 derrotas? Sin embargo, los Royals pasaron el invierno intentando mejorar. Firmaron peloteros con nombres conocidos por el público. Le dieron una extensión de proporciones épicas a Bobby Witt Jr. Mantienen una actitud proactiva para hacer realidad su proyecto para un nuevo estadio. No han hecho adquisiciones estremecedoras, pero como grupo, peloteros tales como Adam Frazier, Hunter Renfroe, Will Smith y Michael Wacha elevan el nivel del roster. Necesitan que todos sus peloteros jóvenes asciendan uno o dos niveles. Eso incluye a Witt, que tiene potencial para figurar entre los candidatos al Más Valioso. Pero si los Royals logran mantenerse en los .500 (un condicional muy grande) en el Centro de la Americana, probablemente sean contendores suaves y pueden construir en base a ese punto de partida. Es un destello de esperanza muy tenue, pero es mucho más de lo que parecía posible a finales del torneo pasado
Los D-Backs, de lejos. No los consideré un equipo contendor a estas alturas del año pasado; sin embargo, llegaron hasta la Serie Mundial. Pero lo que despierta mi interés es la forma en la que han duplicado la apuesta. Los D-Backs pudieron haber preferido la discreción tras la temporada baja monstruosa de los Dodgers. Pudieron (al igual que tantos equipos) excusarse con la incertidumbre sobre sus derechos de TV regional para no invertir. Por el contrario, comprometieron $80 millones para firmar a Eduardo Rodriguez, una pieza que encaja perfectamente en los puestos medios de su rotación, e invirtieron más de $50 millones para contratar a Joc Pedersen y traer de vuelta a Lourdes Gurriel Jr. No son mejores que los Dodgers, pero se ubican entre los cinco mejores de la Liga Nacional.
Rogers: Los Cincinnati Reds. En última instancia, podríamos mirar en retrospectiva y preguntarnos por qué no vimos venir esta explosión, considerando que mostraron suficientes señales el año pasado. No estoy convencido de que pueda darse todo, pero de todos esos equipos de segunda o tercera categoría, creo que Cincinnati tienen la mejor probabilidad de dar un salto importante en una división accesible. Probablemente dependerá de su staff joven, pero en lo que respecta a repertorio, Hunter Greene, Nick Lodolo, Graham Ashcraft y Brandon Williamson lo tienen todo. Ahora deben aprovecharlo mejor. La combinación de talentos sobre el montículo y en el terreno convierten a los Reds en contendores en el Centro de la Nacional… y mi favorito para ganar la división.
Schoenfield: Los Orioles. Hace un año, venían de sumar récord 83-79 y parecían ser un equipo montado en el potro de los .500. Interesante, claro, pero no necesariamente convincente. Ahora vienen de una temporada con 101 victorias, la inclusión de Holliday y Burnes y tienen un grupo de jóvenes peloteros y novatos interesantes como Jordan Westburg, Heston Kjerstad y Coby Mayo, capaces de impactar en la alineación. Puedo ver a Grayson Rodriguez convertido en All-Star en su segunda campaña. Además, tienen a un joven receptor como Samuel Basallo, que podría ser uno de los mejores tres prospectos al final de temporada. Los días de gloria han vuelto a Baltimore y sospecho que podría ser el equipo que vea jugar más en 2024.
Doolittle: Los Royals. No, lo digo en serio. El año pasado, me molesté mucho con ellos porque no parecían hacer nada bien como organización. Y no estoy seguro de que eso haya cambiado. Por un lado, no creo que haya visto alguna lista de 100 mejores prospectos este año que incluya un solo pelotero de los Royals. ¿Cómo es eso posible para una organización cuyo equipo grande viene de sufrir 105 derrotas? Sin embargo, los Royals pasaron el invierno intentando mejorar. Firmaron peloteros con nombres conocidos por el público. Le dieron una extensión de proporciones épicas a Bobby Witt Jr. Mantienen una actitud proactiva para hacer realidad su proyecto para un nuevo estadio. No han hecho adquisiciones estremecedoras, pero como grupo, peloteros tales como Adam Frazier, Hunter Renfroe, Will Smith y Michael Wacha elevan el nivel del roster. Necesitan que todos sus peloteros jóvenes asciendan uno o dos niveles. Eso incluye a Witt, que tiene potencial para figurar entre los candidatos al Más Valioso. Pero si los Royals logran mantenerse en los .500 (un condicional muy grande) en el Centro de la Americana, probablemente sean contendores suaves y pueden construir en base a ese punto de partida. Es un destello de esperanza muy tenue, pero es mucho más de lo que parecía posible a finales del torneo pasado