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River pegó fuerte: volvió a ganarle a Talleres y avanzó a cuartos de final de la CONMEBOL Libertadores

Volvió a festejar. River Plate, dirigido por Marcelo Gallardo, fue superior y derrotó 2-1 a Talleres en la revancha en el Monumental de Núñez y, tras el 1-0 de la ida en Córdoba, se impuso sin problemas en la serie de octavos de final de la CONMEBOL Libertadores. Así, el Millonario avanzó a los cuartos de final, donde jugará con Colo Colo, de Chile.

Este enfrentamiento entre conjuntos argentinos era trascendental para ambos en sus aspiraciones continentales de asegurar un lugar entre los ocho mejores del torneo. Para el Millonario se trató de la oportunidad de cerrar la serie ante su gente en busca de conquistar la gloria, en medio de un clima positivo por las llegadas de Marcelo Gallardo como técnico y de algunos refuerzos de primera línea.

En tanto, la T tenía su chance de dar el golpe eliminando a uno de los candidatos y de afianzarse como una de las sorpresas de la Copa. Así y todo, perdió peso arriba con la desvinculación del paraguayo Ramón Sosa y se quedó afuera de carrera ante un rival que pide pista en serio en la Libertadores.

Miguel Borja volvió a ser el referente en el ataque. Y el DT paró en el mediocampo a Santiago Simón, Matías Kranevitter y Rodrigo Aliendro, más los ofensivos Franco Mastantuono y Maximiliano Meza, en su primer encuentro como titular en el Millonario. Y dejó en el banco a Claudio Echeverri.

El partido lo empezó mejor Talleres, en busca de un gol para ponerse a tiro en la serie. Inclusive, se acercó más al arco rival. Pero a los 34 minutos apretó Kranevitter en la salida de la T desde el fondo, aprovechó la falla Simón, se la dio a Aliendro, quien de taco habilitó en el área grande a Borja para que el colombiano definiera frente al arquero, Guido Herrera.

Apenas dos minutos después, probó Blas Riveros desde lejos y Franco Armani sacó la pelota con una gran volada sobre su izquierda. Y luego Cristian Tarragona, que se metió entre la dupla de Germán Pezzella y Paulo Díaz, le pegó afuera y dejó escapar otra ocasión. Así, en definitiva, se cerró un primer tiempo en el que el dueño de casa aprovechó su oportunismo con la presión de sus volantes y la eficacia de su goleador, contra un adversario que no estuvo preciso en la recta final, como una semana antes en Córdoba.

Con la ventaja aumentada, a los cinco minutos del segundo tiempo River dio otro golpe sobre la mesa. Meza habilitó impecablemente a Simón, quien ingresó al área en diagonal y la tocó con la punta del botín derecho para poner el 2-0 parcial y 3-0 global, ya lapidario. Y, en contrapartida, una vez más, falló Talleres el descuento seis minutos después, con un cabezazo de Sebastián Palacios que salió desviado.

Ya con la diferencia que tomó el equipo, Gallardo incluyó algunos cambios, como el de Echeverri por Mastantuono, mientras los hinchas cantaban, gritaban y festejaban en las tribunas del Monumental. Y cuando era todo una fiesta, Talleres armó una estupenda acción colectiva y definió el ingresado Federico Girotti a los 24 minutos, abajo del arco, ante Armani, y por su pasado en River no festejó el gol, haciendo el gesto de ofrecerle disculpas al público.

Siguió intentando el anfitrión y Guido Herrera salvó al conjunto cordobés ante un remate de Echeverri, a los 28. Ya con el partido abierto, hubo algunas emociones más y finalmente River se dio el gusto de meterse entre los ocho mejores del continente casi sin pasar sobresaltos. El triunfo en la ida gracias al tanto de Paulo Díaz y esta victoria en casa llevaron a los de Gallardo a cuartos, a la espera de Colo Colo. En el camino seguirán sumando rodaje los nuevos y todo River se ilusiona con más.